Capitulo 3: Los mejores amigos de Dream

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Los golpes cesaron después de 3, Dream intentó convencerse en su estado medio aturdido de que todo era un sueño. Pero el convencimiento se detuvo por completo cuando los golpes volvieron a sonar, esta vez un poco más fuertes. Dream se puso de pie, mirando nerviosamente alrededor de su habitación en busca de una camisa, sintiéndose de repente muy vulnerable. Cuando volvieron a llamar y no encontró ninguna camisa, se apartó el cabello de la frente y abrió la puerta.

Sapnap miraba la madera dura bajo sus pies, moviendo nerviosamente los dedos de los pies mientras Dream se inclinaba en la puerta.

—¿Qué pasa, Sapnap? —Dream sólo podía imaginar en su cabeza el aspecto que tenía ahora mismo.

—Mi- mi habitación está súper fría. —Sapnap se encogió de hombros— Vengo a pasar el rato. —

—¿Aquí? —

Dream señaló detrás de él con el pulgar, Sapnap le echó un vistazo y sonrió, con los labios escondidos entre los dientes. Dream se apartó dejando que Sapnap entrara en su espacio privado, lo primero que hizo Sapnap fue tocar el desaliñado edredón de la cama de Dream. Sus dedos rozaron suavemente la tela mientras se acercaba a la estantería gigante de la habitación. La estantería, que antes estaba llena de libros de verdad, ahora ha sido sustituida por objetos que le envían sus fans, ya que su oficina estaba demasiado llena para asimilarlos de manera permanente.

—¿Aquí guardas las cosas nsfw? —bromeó Sapnap, intentando no ponerse de puntillas para ver las estanterías más altas.

—Ya te gustaría. —sonrió Dream, echando un vistazo al cajón situado junto a los tobillos de Sapnap, donde guardaba todas las cosas obscenas que algunos fans le enviaban.

—¿Tienes algunos? —

—Claro que no. —mintió— Saben que no deben enviar esas cosas. —Dream se cruzó de brazos mientras se sentaba a los pies de su cama.

Observaba cada movimiento de Sapnap, sus pies en calcetines arrastrando los pies por la madera oscura y deteniéndose frente al cuadro enmarcado de fan art que había en su pared.

—Te amas demasiado. —se rió Sapnap mientras llevaba las manos a la cómoda.

—No tanto como yo te amo a ti, Sappy, no te preocupes. —bromeó Dream, desplegando los brazos y apoyándose en las palmas de las manos— Eres un entrometido. —

—Quiero conocerte. —jugueteó Sapnap con el pomo de uno de los cajones de la cómoda.

—Ya lo haces. —Dream no tragó saliva, sólo para calmar su respiración mientras Sapnap soltaba el pomo.

¿Todo? —Sapnap se giró ahora hacia él, con una ceja levantada.

—¿Qué quieres saber, Sap? —preguntó Dream lentamente, viendo cómo su amigo se volvía hacia los cuadros de una estantería flotante.

—¿Has estado alguna vez con un chico? —Sapnap fue inteligente con sus movimientos, de espaldas a Dream mientras hablaba— ¿Cómo, sexualmente? —

—¿Me estás preguntando si alguna vez me he follado a un chico? —Dream se rió.

—Bueno, ¿lo has hecho? —

—Uno. —

Fue casi como si Sapnap se desinflara ante la afirmación, volviendo a la estantería llena de regalos. No dijo nada en respuesta a la respuesta de Dream, sólo tomo un pequeño llavero hecho de arcilla.

—¿Por qué? —

—Dije que quiero conocerte. —Sapnap se encogió de hombros— ¿Cuándo? —

Dream no pudo evitar la risita que soltó.

Por Amor al Manhunt // KarlWasNotNapDonde viven las historias. Descúbrelo ahora