Capítulo 1

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esta historia no es mia es de AizenTheGoat


El clan Bael, uno de los 72 pilares del inframundo y el de mayor rango entre ellos. El Bael tenía el rango de "Gran Rey". Nacer en el clan te garantiza vivir y disfrutar de lo mejor que la sociedad diabólica tiene para ofrecer. O eso es lo que sucede si se cumplen dos condiciones. Esas condiciones son que heredes el famoso Poder de Destrucción del clan. Esto otorga a los usuarios un inmenso poder explosivo que puede aniquilar completamente las cosas cuando se usa. La segunda condición es ser parte de la familia principal. Si cumples ambas condiciones, entonces tendrás casi garantizado todo lo que tu corazón desea.

Sin embargo, si tienes la mala suerte de no cumplir con esas condiciones, vales menos que la basura a sus ojos, y algunos te consideran ni siquiera digno del suelo que pisas. El clan Bael siempre ha sido muy tradicional, más que los otros clanes. Su creencia es que si no posees sus habilidades, es mejor que estés muerto que asociado con ellos.

Dos ejemplos de miembros del clan que no tuvieron la suerte de cumplir con las condiciones fueron Sairaorg Bael, el hijo de Lord Bael, quien recientemente fue enviado lejos junto con su madre por no haber heredado el Poder de Destrucción.

El segundo era un joven rubio de ocho años llamado Naruto. El único hijo de los ahora fallecidos Minato y Kushina de la rama familiar del clan Bael. Al igual que Sairaorg, él no heredó el Poder de Destrucción y era esencialmente inexistente para los miembros principales del clan. Sin embargo, a diferencia de sus compañeros del clan, no fue enviado a una de las propiedades como lo había sido Sairaorg, no, desafortunadamente no tuvo tanta suerte. Cuando preguntó por qué era así, todo lo que le dijeron fue que Lord Bael "le debía un favor a alguien" y eso fue todo.

Sin embargo, no todos lo trataron con dureza, algunas de las sirvientas de la familia tuvieron la amabilidad de mantenerlo bien alimentado siempre que tuvieron la oportunidad, cualquier cosa más que eso y potencialmente serían descubiertas y castigadas. Pero para Naruto eso no fue suficiente para compensar el hecho de que lo trataran como si no existiera por algo con lo que no nació.

Lo peor era que mientras todos los otros niños de su edad estaban obteniendo sus juegos de piezas malvadas de Ajuka Beelzebub, uno de los actuales Satán, todo lo que él podía hacer era leer viejos libros de ciencia que el clan no cuidaba ni mantenía. Realmente lo enojó. ¿Por qué no podía tener su propia nobleza? Incluso Sairaorg, quien era considerado un fracaso, obtuvo uno antes de que lo enviaran.

¿Y qué si no podía usar ese maldito poder? Todavía podría ser fuerte. Les había pedido que le enseñaran a usar magia y con eso podría ser fuerte y no deshonrar el nombre de Bael como ellos temían. ¿Su respuesta? No valía la pena el esfuerzo. Incluso si aprendiera magia, seguiría siendo un Bael sin la habilidad característica del clan.

"Malditos sean" dijo Naruto enojado mientras miraba el colchón en el que estaba sentado actualmente. Sus pequeñas manos se cerraron en puños al recordar todas las conversaciones. Cada vez que intentaba iniciar una conversación, le decían que "se dirigiera a su habitación". Honestamente, estaba sorprendido de tener incluso una habitación. Por supuesto, era una habitación en el extremo más alejado de la mansión, en un ala que casi nadie visita, pero sigue siendo una habitación.

"¡Malditos sean!" Gritó mientras comenzaba a golpear la cama con todo lo que podía reunir. Después de cinco minutos de abusar de su colchón, se detuvo para respirar profundamente unas cuantas veces. Se enderezó y trató de calmarse pero le resultó difícil. Al levantar la vista, su atención se centró en un viejo cajón que había estado en la habitación desde que pasó a ser suyo. "Se los mostraré todos". En ese momento algo dentro de él cambió.

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