7-Mision rescate

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Estaba escondida, aun no amenecia era noche mejor dicho madrugada dos de la mañana, jugaba con mi navaja lanzando la al aire y atrapandola,Rodolfo se alejaba porque no quería ser víctima de mi navaja, observe a lo lejos ni una pizca de nadie, escuche por la radio órdenes de Graves como quería que encerraran a Alejandro, estábamos impacientes, usé mi radio y le pique a un boton.

-Me escuchas? -Hable en voz baja-

No hubo respuesta me estaba decepcionando

-Te escucho-Respondio ella,sentía mi estómago revolverse, sentir mariposas, sentir demasiadas emociones-
-Hola-dije después de unos segundos-
-Que te hace hablarme? Digo me despreciaste todo el día-Contesto-
-Dios Valeria uno quiere arreglar las cosas y tu no te dejas-Dije de mala gana, ví a Rodolfo verme de lejos con cara de sospecha, fulminando la radio, que discretas no? -
-Bueno mujer tu tampoco te dejaste cuando quize arreglar las cosas-Contesto-
-Porque me dejaría convencer por alguien como tú-Respondo-Despues de todo quien besa a alguien horas antes de su puta traición-Mi voz se quebró, no podía hablar del tema, no podía, era doloroso y una arma de doble filo-

Nos quedamos calladas nadie habló...

-Nunca fue mi intención de utilizarte, nunca te ví como un objeto eras una persona especial para mi-Hablo rompiendo el silencio-
-Pero aún así me rompiste en mil pedazos-Respondi limpiando las lágrimas de mis ojos-
-Solo dejame compensartelo-Dijo-
-Lo veré luego, ahorita no puedo lidiar con una cita-Respondi-
-Solo dejame arreglar las cosas, dejame tratarte mejor que antes, dejame hacerte mía-

Me puse nerviosa ante eso, me quedé callada y esta solo reía, apague la estación de ese radio y solo seguía escuchando como Graves veía que hacer con Valeria, eso me preocupaba, esperamos buen rato cuando se escucho el chillido de una llanta, nos pusimos atentos, me puse detrás de una barra café, Rodolfo al lado de la paja, mi navaja de mis manos estaba apuntando a la pared donde se educhaban quejigos de subida, ví como salto al piso y lanza mi navaja al lado de la navaja cuando escuche la voz ruda de Ghost.

-Ghost, Soap-Respondimos por instinto Rudy y yo-
-T/n, Rodolfo-Hablo Soap abrazandome-
-pensamos que eran los Shadow-
-Donde estaban? -Pregunte curiosa-
-En la Iglesia, Ghost esperando, yo escapando-Respondio-
-Son un equipo? -Pregunto Rudy-
-Si-Respondio con la cabeza Ghost-
-Todos contando fuera de esta sala es considerado enemigo y debe ser eliminado con una sola excepción Alejandro y los vaqueros-Dijo Ghost-
-Sabemos donde están Los vaqueros y Alejandro-Hable, viendo el amanecer lentamente-
-Están en la prisión clandestina de las Almas que era de alta seguridad, pero por los barcos lo tomaron como suya y fue abandonada, ahora está rodeada por helicópteros y seguridad de Graves-Dijo en pausas Rodolfo-
-Por como reaccionó Alejandro con Graves suponemos que esta en la sala segura-Respondi ya que yo presencié esa pelea-

Estuvieron hablando, yo seguía distraída, la verdad todo venía a mi mente, escuche una voz.

-T/n-Era insistente no era de hombre era de Valeria-
-Valeria? -Respondí-
-Si, carajo t/n donde chingados te metiste, movieron mi contenedor y el pinche Gringo pelo falso ya es la cuarta vez que patea mi contenedor-Dijo ella sin paciencia-
-Ni siquiera estoy cercas ni segura para poder ir por ti eh-Respondi-
-apresurate-Exigió-
-Ya veré yo Valeria-Mire de mala gana la radio-
-Chula te lo juro, yo te amo, la verdad nunca pensé que te causaría tanto daño al haberte traicionado al equipo, nunca fue mi intención, tal vez lo de la traición si, pero lastimarte no, eres todo para mi, mi Reino, mi vida, mi maldita droga adictiva-
-Valeria...
-Es la maldita verdad, eres mi maldita droga a seguir, mi día a día que hace que no me rinda una y otra vez, eres una maldita diosa adicta-

Me quedé callada ante esas palabras yo no podia decir nada o como reaccionar, ella tenía mi corazón, todo hombre que me quizo conquistar fallo por estar a los pies de Valeria, pero aveces me pregunto "¿Estoy haciendo lo correcto? " pensé una y otra vez, todo recuerdo llegaba a mi mente, cada risa, cada beso, cada sonrisa, cada mirada.

¿Amor o enemistad? Valeria GarzaxTuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora