Karmaland somos nosotros

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Un nuevo día iniciaba en karmaland, en una casita hecha de tierra y piedra un hibrido de pato revisaba sus pertenencias pues ayer que llego de una misión se fue de inmediato a dormir, por ello revisaría sus cofres para ver que le robaron sus compañeros porque si, a él lo robaban a cada rato de alguna extraña manera lograban meterse a su casa para saquearlo, típico de los españoles.

—Chingon me robaron varias cosas, desgraciados no se como le hacen para meterse a mi casa, ni puta idea. -quackity se quejaba consigo mismo, alisto sus cosas para salir, tenía planeado ir a conseguir un poco mas de vidrio para continuar con la construcción de su casa. —Ahorita iré a arreglar cuentas con estos weyes.

Salió de casa pero en su camino se desvío hasta la casa de staxx, luego de criticar lo feo que era su hogar siguió con la de rubius aprovechando su visita le puso algunas minas en varios lugares, le robo su comida y continuo con su camino. Durante su trayecto no dejaba de ver los nuevos cambios que aquella nave ocasiono en el pueblo, visualizo a merlon cerca de un estanque por lo que fue con el para charlar un poco.

—Merlon. -grito el chico asustando ligeramente al anciano quien lo saludo con una sonrisa en su rostro.

—Buenos días joven quackity ¿Cómo se encuentra?

—De la verga merlon, esos pendejos no se como le hacen pero se meten a robar a mi casa, pero no fueran sus casas porque ahí si los pinches dioses protegen sus propiedades.

<<Quackity ha sido golpeado mágicamente>>

Merlon rio por la actitud del chico pues todos los héroes trataban con respeto a los dioses incluso rubius que de vez en cuando les hablaba informal y se ganaba uno que otro castigo, pero les tenía cierto respeto.

—Entonces protejan mi pinche casa y eviten que esos culeros me roben.

<"Si protegemos tu casa">

Quackity se sorprendió al ver el mensaje de los dioses, por lo que siguió con la discusión un rato más pues no daba su brazo a torcer.

<"Te enviaremos al viejo del costal">

—Huevos ese wey me la pela.

<"Te enviaremos al coco">

—Ese wey también me la pela, es mas me come 100 hectáreas de verga. -contesto desafiante el muchacho le parecía divertido impacientar a los dioses, pero al escuchar cierto aullido su sonrisa se borro, vio a lo lejos una especie de perro negro su apariencia lo asusto un poco.

El "coco" se acercaba a paso rápido al menor quien empezó a correr intentando alejarse del animal.

—Perdón no lo quise decir, ya saben que estoy chiquito perdónenme dioses. -quackity se estaba cansando de correr por lo que como ultima opción regreso con merlon escondiéndose detrás de él como protección, la bestia trataba de llegar al azabache pero unos rayos lo hacían retroceder. —Eso vete no tienes poder merlon me protege. -acto seguido empezó a ladrarle a la bestia quien por ordenes de los dioses se marchó del lugar.

—Héroe quackity no debe molestar a los dioses.

—Estábamos bromeando merlon, así nos llevamos sí o no dioses. -un rayo cayo cerca del chico quien tomo eso como una respuesta afirmativa. —viste somos compas.

—Los dioses le han encomendado proteger al pueblo el día de hoy joven quackity. -el menor se quejo se supone que hoy avanzaría en la construcción de su casa, intento huir de la tarea pero merlon se lo impidió, era el único héroe que había en el pueblo ya que los demás fueron a misiones o conseguir materiales para la reconstrucción del pueblo. —Solo es vigilar el lugar, y en caso de que algún peligro se presente deberá resolverlo