Gojo x Utahime - MEDIA NOCHE

A Media Noche 🖤

Halloween Parte 2

Gojo 27 años

El rozar de sus labios, su cabello oscuro colándose en su cara pegadose a su cuello por el sudor, su piel tersa, su cadera moviéndose en círculos conmigo dentro de ella, la forma en que su jadeante voz invadía mis oídos me tenía en transe, era todo lo que siempre quise, Utahime era todo para mi y mi cuerpo reclamaba su existencia entera.

El sudor de mi cuerpo me hizo aferrarme a las sábanas, mis manos se contraían y abrí los ojos.
Me levante abruptamente, mi pecho subía y bajaba, rápidamente me giré para ver si la azabache seguía a mi lado, no estaba, deje la cama a la brevedad, busque el interruptor de la luz, pero aún no había regresado, Mei tenía ideas muy peculiares de diversión. Note que no estaba su vestido sobre el sillón, el corazón me latía fuertemente, ¿Me había dejado de nuevo?

La medianoche estaba terminando dando entrada a la alta madrugada, prendí mi celular, note las llamadas perdidas de Nanami, los mensajes de Geto, me puse la camisa y justo antes de tomar mi capa, descubrí que eso tampoco estaba.

La furia se apoderaba de mis entrañas, azote la puerta y a lo lejos aún se escuchaba algo de música en el salón, me dirigía a él para darme cuenta de que solo quedaban Geto y Shoko bailando, sobre ellos se venia un reloj con las 3 de la mañana en el. 

Los deje solos, camine dando amplias zancadas, había algo de gente en los alrededores de la casa, estaba tan absorto en mis pensamientos que choqué que de frente con Kento, se veía algo diferente, no parecía el, pero seguramente era mi problema de enfoque. 

Antes de decir algo, lo que fuera, el me miro, suspiro burlonamente.

-Si la estás buscando, la vi salir hace como una hora de una habitación, se fue cautelosa.- Desconozco como mi cara se transformó, pero él solo me miró y se apartó de mi camino.-Por cierto Gojo, si la encuentras dile que me debe un baile, ya que nunca regreso.-

Eso termino por ponerme los nervios de punta, abrí la puerta en dirección al jardín y sin dudarlo, comencé a marcarle por teléfono, nada, solo sonaba.

Estaba tan molesto, como era si quiera posible que me dejara, como después de haber gritado mi nombre de esa manera, como después de estar dentro de ella.

Justo en ese momento a lo lejos vi pasar su silueta con mi capa en el jardín, corrí hacia ella, la tenía ya frente a mi y la giré por el hombro.

-Utahime...- Su mirada estaba perdida, la vista la tenía por completo blanca, desvanecida y llena de bruma. -Utahime, mírame, mírame bien-La sacudí y después la abracé profundamente.

Su cuerpo se tensó y me abrazó con mi fuerza.

-Satoru... ¿Dónde estamos?- Me miro entre mis brazos, sus grandes ojos regresaron a la normalidad, a ser las luces de mi camino.

-Hermosa, creo que...te dio un ataque de sonambulismo, por un momento...- Los dos teníamos la misma expresión de confusión, nunca me enteré de que ella sufriera de esta condición y eso que lo sabía todo sobre ella o eso pensaba.

En ese instante mis palabras se vieron interrumpidas por su boca pasados sobre los míos, con suavidad correspondí a su beso, sujete sus cabello por detrás de su nuca, se pegó a mí y la neblina de la noche nos rodeaba.

El poder de mi coraje se convertía en un profundo fuego lleno de deseo.

-No quise irme.. Satoru..., no tengo idea de qué pasó- Se mordió los labios, eso lo hacía cuando estaba nerviosa, no me mentía, más no estaba diciéndome todo, preferí ignorarlo por ahora.

-Te creo, me preocupe mucho por no verte de nuevo a mi lado.- La tome por la mano y caminamos de regreso a la casa, al momento de entrar la luz de todo el lugar regreso. -Por fin, por cierto me comento Nanami que le debías un baile.-Dije jugueteando con su mano y girándome sobre mis talones para verla de nuevo.