Hasta que la muerte nos separe

| 3 : Ciudad |

Eddie

- Bien, he visto que hay muchos lugares lindos e históricos, las Damas pintadas.. Golden Gate bridge.. o podemos ir a..-
- Ben, he hecho esta vez yo las distribuciones vale?- dice Richie sentándose en la mesa.
- Vaya, ¿Como las has hecho?-

Yo solo estaba escuchando atentamente, hoy sería un día largo y debía ir preparado, agua y comida en la mochila.

- Stan y Bill iréis a las Damas pintadas, Ben Mike y Beverly, iréis vosotros tres juntos a Golden Gate Bridge y Eddie y yo, iremos a unos sitios que quiero visitar, si te parece bien Eddie-
- ¿Mm? Si si- dije comiendo

Stanley y Bill sonrieron, al igual que Mike y Beverly.

- Eddie, esta noche te enseñaré más sobre este sitio ¿Vale?-
- ¡Claro!- le contesto a Ben sonriendo

Cuando acabamos de desayunar algunos se visten y Richie y yo ya salimos de casa, las llaves las llevaba yo en el cuello con una cuerda, supongo que le diré que vayamos también a hacer una copia para que él tenga unas también.

No sé exactamente donde me va a llevar, y la verdad me da igual, porque tampoco es que quiera visitar las Damas o Golden Gate Bridge, son cosas que me darían igual verlas o no. Bueno, si voy con Richie al puente Golden Gate bridge de noche me parecería súper bonito, ya le diré de ir, ¿por que quiero ir solo con él?

- Vamos a ir a una tienda de instrumentos si no te parece mal-
- Claro, vamos- digo sonriendo
- Dicen que hay guitarras eléctricas y quiero una negra y blanca, súper bonita-
- ¿Y la tuya roja?-
- Es que ya está desgastada, y traigo dinero- dice enseñando el dinero

Si algo sé de Richie es que está forrado de dinero, des de que ahorró tiene la cartera llena de pasta, tiene como 3000 $ ahí dentro.

Fuimos caminando sin hablar por el camino, lo bueno de aquí era que nadie nos conocía y entonces nadie nos miraba raro ni nos saludaba.

Mi madre me había llamado 200 veces literalmente y mi Nokia estaba apunto de reventar, exacto, me lo compraron Justo al salir.

- ¿Qué tal has dormido?-
- La cama era cómoda.-
- La mía igual-
- Me alegro de que hayas dormido bien- digo

Las conversaciones con él eran raras des de..

- Yo también te quiero-

Que vergüenza.

- Hemos llegado-
- ¿Es aquí?-
- Si, ya lo se, es pequeña, pero la vi en la televisión de mi habitación ayer y me apeteció venir aquí- dice sonriendo
- Oh, vamos-

Richie

La emoción dentro de mi no paraba, estaba viendo un montón de guitarras eléctricas, mi obsesión había empezado hace nada con esas guitarras, y sabía tocarlas porque mi padre solía hacerlo de joven, ósea cuando era buena persona, hay que ser sinceros, mi padre de joven era punk.

Eddie solo miraba con asombro algunos instrumentos que había ahí, como si nunca hubiera visto algo así, su mirada emocionada hacía que mil cosas se removieran en mi estómago.

- ¿Nunca habías venido a una tienda de instrumentos Eds?- digo sonriendo
- La verdad no, mi madre me decía que no podía escuchar este tipo de instrumentos porque me podía quedar sordo por todo el ruido, tampoco me dejó ir a un concierto nunca, ni una acústica-
- ¿De verdad? Seguro que era tu madre? O se confundió con Hittler??- digo
-Mm.. Hittler- dice riendo

Cuando vi una guitarra eléctrica blanca y negra, con unas calaveras dibujadas supe que era mi guitarra, miré el precio y vi que costaba 200$ ¿¡200$?!

- La voy a coger- digo
- Es muy cara- contesta Eddie
- Pero es bonita-
- ¿Te gastarás todo tu dinero en eso?-
- Es muy especial Eds-
- Claro, perdón-

Me dirijo con una sonrisa al vendedor.

- Quiero la eléctrica con calaveras- digo
- Son 200$-
- Lo se, no estoy ciego, del todo-
- Yo pensaba que si-

El vendedor empieza a reír y le devuelvo la risa.

- Soy Max- dice sonriendo
- Richie, encantado- le sonrío a Max
- Soy del 1986-
- Igual que yo- sonrío

Eddie

Siento los celos recorrer mi cuerpo, no se porque, será que me da miedo perder a Richie por ese Max o algo así, pero quería ir ahí y pegar a Max. No hice eso, en cambio, fui con Richie y le agarré del brazo.

-Tengo hambre- digo
- Claro, espérame un momento Eds, compro la guitarra y vamos a desayunar ¿Vale?-
- Vale- le muestro una sonrisa y me giro para irme quitando aquella sonrisa falsa de mi rostro.

Richie compra la guitarra y nos vamos de la tienda.

- ¿Donde iremos si no sabemos nada?-

Richie se queda mirando al rededor para ver algo.

- Hola, buenos días, disculpe- dice parando a una anciana con aspecto de ser la peor persona del mundo.
- Buenos días- dice la señora mirando de arriba a abajo a Richie
- ¿Sabe usted dónde hay algún restaurante o bar?-
- Tire recto, después a la derecha, seguidamente recto de nuevo, después a la izquierda y camine unos 2 minutos, ahí verá un restaurante- dice haciendo señas con las manos.
- Eh..¿Gracias?- dijo Richie

Nos dirigimos donde la señora dijo y entramos a un bar donde hacían pasteles de bodas y tal, habían pastas y bebidas.

Nos sentamos en una mesa y vino una camarera.

- Hola, Bienvenidos, ¿Que van a tomar?- dice la chica con una sonrisa en su rostro
- A mi ponme una cola- dice Richie
- Yo quiero un zumo y un croissant- digo
- Bien- la camarera se va

Agarró mi billetera para agarrar el dinero pero Richie me para y me mira.

- Pago yo- sonríe
- No, tú pagaste el avión y el piso-
- ¿Y?-
- Pago yo- digo dejando el dinero sobre la mesa
- Tu ganas, te lo devolveré, lo juro- dice
- No quiero que me devuelvas nada, por cierto, ¿Dónde vas a trabajar?-
- Pediré trabajar en el McDonald's-
- Son muchas horas..-
- Y te traeré tu Happy Meel cada noche -
- Aceptable, gracias- sonrío

Nos traen el pedido y yo solo como sin hacer caso de la gente, tengo que fingir que tengo hambre, al fin y al cabo solo lo hice para que ese Max dejara de hablarle a mi mejor amigo.

- Sobre lo de ayer, te fuiste muy rápido al decirme te quiero, quiero que sepas que no es nada malo que dos amigos se digan te quiero ¿Vale?-

Me quedo callado por unos segundos con la boca llena y solo mirando a Richie.

- Ademas, yo también te quiero, y mucho, muchísimo, tanto que no te lo esperarías.-