5. Un día mas que pasa.

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Un t-shirt de la tienda, jeans negros, unos converses negro y listo, una cola de cabello despeinada. Tengo empleo en la tienda de música, así que con lo que gano me libro de tener que pedirle dinero a George, estoy sumamente cansada del drama que abunda en mi vida con respecto a él y su familia.

Mientras ordeno unos cds llega una chica y me pregunta por la sección de música country, la guío y le muestro los que tenemos, ella tomas algunos cds, y me dirijo con ella hacia la caja. ―Son $20 dólares. –le digo y desvío la mirada hasta que ella me pasa el billete y registro su compra ―Gracias. –me dice y le sonrío mientras ella sale de la tienda. No hay mucho movimiento hoy en la tienda, solo lo de siempre, alguien entra, busca lo que necesita y luego paga y se va, yo casi no me muevo de la caja registradora.

He estado pensado en mi vida, no tiene sentido alguno lo que George me hizo hace algunos años, digo, si él hubiera sido más inteligente, me hubiera dejado con mi madre y mi hermano y quizás así lo hubiera odiado menos, aun no entiendo su necesidad de alejarme de mi familia y llevarme con él como si fuera algo que simplemente tomas y listo.

―Disculpa, ¿me vas a atender o tengo que llamar al gerente? –dice un chico sacándome de mis pensamientos, solo lo observo, se le ve una risa de estúpido en la cara y yo suspiro harta de ver tantos idiotas con esa maldita risa que los caracteriza. ―Emmm, si, ¿qué deseas exactamente? –digo sin quitar mi mirada de su rostro.

― Bueno, he estado buscando en varias tiendas y nunca esta enton... -lo interrumpo, antes de que me cuento su viaje hasta aquí, ―Disculpa chico, pero ve al grano porque o tengo todo el día para escuchar tu historia, dime de una vez que es lo quieres.

―Wow que carácter, deberías atender mejor a tus clientes y no hablaros de esa forma, en fin –otra risa se posa en sus labios. ― ¿tienen el álbum ''Use Your Illusion I'' de Guns N' Roses?

Me sorprende que alguien que luzca como él y tenga ese aire de idiota quiera ese disco, digo, no todos les gustan esa banda y ellos son de los mejores, salgo de la caja y me encamino hacia el estante donde se encuentra el álbum y se lo entrego, ese es el tercer álbum de la banda y realmente no se encuentra en todas las tiendas de música de la ciudad y eso contando que solo hay tres y son del mismo dueño.

―Bien, cuesta $30 dólares, ¿lo quieres? –le pregunto al chico mientras me siento en la silla de la caja y lo observo. ―Claro, preciosa. –me dice con cara de picardía.

Y aquí vamos con otro idiota para la lista.

― Creo que no tengo ánimos suficientes para lidiar con otro bicho raro, y honestamente no quiero abofetearte ahora mismo, bien. –tomo el dinero, le entrego el disco y él se queda observándome. ―Creo que ya te puedes largar. –el ríe y sale de la tienda.


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Después de un largo día de trabajo en la tienda de música salgo del lugar y me dirijo al lugar que se supone que es mi casa, quisiera ir con los chicos pero no estoy para eso, no hoy. Cuando entro un olor extravagante entra por mis fosas nasales y unas risillas de niñas superficiales me invade, ¡GENIAL! UGH ESTAN AQUÍ, TODAS LAS PERRAS DEL INSTITUTO ESTAN AQUÍ CON LAS GEMELAS.

Entro a la casa y voy directo a la cocina a buscar algo para comer, me encuentro con las gemelas y sus migas sentadas cotilleando sobre quién sabe qué cosa, igual y no me importa.

Me observan con cara de asco y yo las ignoro para no tener que golpear a unas de estas estúpidas y darles razones para que se hagan una cirugía plástica, una de muchas.

― Podrías largarte ya, no notas que es una reunión de chicas y no de lo que un oso escupió. –me dice Lexie y las demás solo se ríen como si fuera el mejor chiste que hubieran escuchado en su vida.

―No me sorprende. –digo sin interés mientras tomo una botella de agua. ―¿Qué no te sorprende? –responde Leslie con el ceño fruncido.

―No me sorprende que tus idiotas unineuronales amigas se rían de lo que creen que es un chiste, lo cual es solo otra de las muchas estupideces que sales de sus bocas. –digo y ellas me observan indignadas como si lo que dije fuera lo más wow que habrían escuchado en contra de ellas, y no, no lo es, pero así son ellas.

Dicho esto, pongo la botella vacía en la basura y subo a mi habitación. Me siento en mi mesa y me pongo a estudiar y a hacer todas las tareas que tengo pendientes, no quiero a ningún profesor encima de mí, cuando termino me doy una ducha y luego me acuesto sobre mi cama, miro el techo y me pongo a pensar.


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⏰ Última actualización: Jun 15, 2015 ⏰

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No quiero vivir con ellos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora