La chica (FanFic de Minho)

Capítulo 15

|Narra Newt|

Palabras, esa era la clave para salir de esta cárcel. Habíamos pasado años ahí, y teníamos la respuesta a nuestros problemas enfrente, teníamos el primer paso, el primer paso hacia la libertad.

Miré a mis compañeros que me miraban con preocupación. Les hice un breve gesto con la mano para que me siguiesen. Fuimos a donde se encontraban los constructores y los ayudamos a construir una muralla que rodeara la Hacienda. La Hacienda se iba a convertir en nuestra base, en nuestra fortaleza.

Colocamos tablones en la puerta para impedir que se abriesen. Lo mismo hicimos con las ventanas.Hicimos un plano para repartir a los clarianos para que conociesen el plan.

Construimos más armas, entre ellas: lanzas, arcos y flechas. Afilamos ramas de árboles para que cada habitante tuviese su propio cuchillo y se pudiese defender solo. Estuvimos trabajando tanto que nos salieron ampollas en las manos, nos dolían y teníamos astillas clavadas en ellas.

|Narra Ashley|

La noche ya había comenzado y todos los clarianos nos encontrábamos dentro de la estructura. Me había tocado en una habitación en la que estaban Winston y otro grupo de personas que no conocía.

Rodeé con mis brazos mis temblorosas piernas, las cuales se encontraban pegadas a mi pecho. Escondí la cabeza entre el hueco que había en medio de mis rodillas. Tenía miedo, y no había nadie para consolarme.

Después de un rato en aquella postura, alcé la vista para encontrarme con el grupo de compañeros de habitación dormidos.

Me levanté y después de estirarme y hacer crujir mi cuerpo, me dirigí a la única ventana de la sala, que estaba tapiada. Flexioné mis rodillas para ponerme a la altura de una rendija que se había formado por la separación de dos tablones.

Guiñé un ojo y con el otro recorrí cautelosa mente todo el paisaje del Claro para no perderme ningún detalle.

Un escalofrío recorrió mi cuerpo. Los laceradores comenzaban a entrar por todas las puertas.

El miedo se expandió por todo mi cuerpo, como una enfermedad. Quería a mis amigos conmigo, quería a Minho a mi lado. Oí unos gritos y, sin pensarlo corrí hacia ellos. Abrí la puerta de golpe y contemplé a Gally golpeando a Newt y lanzando le a la cama. Thomas tenía el terror en sus ojos. Un lacerador entró por la ventana y el chico me miró rápidamente.

-Te quiero, Ash- Me susurró.

Abrí mucho los ojos y me quedé paralizada, apretando mis puños hasta dejar ver mis nudillos blancos. Acto seguido el lacerador le agarró de la camiseta y se lo llevó.

Me caí al suelo sobre mis rodillas, haciendo crujir el suelo, me tapé la cara con las manos y comencé a llorar.

Unos pasos se acercaban a mi a con un ritmo acelerado, sin embargo, los ignoré. Al instante unos brazos me rodearon la cintura y recibí un beso en la mejilla.

-Tranquila, Ash- Me susurró Minho, con un tono dulce.

Me giré y vi al chico, que me miraba con preocupación, pues debía tener los ojos cristalizados. Me besó con ternura, secando mis lágrimas con su pulgar. Al finalizar el beso, me abrazó y escondí mi cabeza en su pecho.

-¿Por qué él?- Pregunté. No recibí respuesta, además, no la quería.

Volví a mi habitación cabizbaja.

-*Solo uno*- Dijo la voz de Thomas.

-*¿Cómo que solo uno?*-Pregunté.

-*Solo se llevan a uno*- Me di cuenta en ese instante. Querían que saliésemos del Laberinto de una vez y nos estaban diciendo que nos diésemos prisa.

Ahí se acabó la conversación. Miré a Winston que seguía durmiendo como un cerdo de esos a los que el mismo mataba. "Se le habrá pegado esos dulces ronquidos" pensé. Pero esta vez no reí. ¿Qué me había pasado? Antes solía reír, antes solía pasármelo bien, solía, solía...

Minho entré por la puerta, sacándome de mis pensamientos. Antes de que pudiese decir nada me agarró con fuerza del brazo y tiró de mí. Me llevó hasta el cuarto de baño.

Me empujó contra la pared y gritó:

-¿¡Te gusta Gally!?

-¿Qué? ¡NO!- Negué rotundamente.

-Venga ya, has llorado cuando se ha ido.

-¡Era mi amigo, Minho!- Se giró y apoyó las manos a los lados del lavabo, agachó la cabeza y se miró el reflejo en el agua que se había quedado atascada en el recipiente. Negó con la cabeza.

-Seguro...-Dijo con ironía. Había odio y frustración en su voz- ¡Admítelo! ¡Te gusta Gally!

-¡Foder!- Grité, me había enfadado- ¡No me gusta Gally! ¿Entendido, gilipullo? Me gustas tú cara fuco.

Sus músculos y cara se relajaron. Se apartó del lavabo y avanzó hacia mi. Como reflejo me aparté y retrocedí hacia atrás hasta que mi espalda tocó la fría pared.Me colocó sus suaves manos en mi cuello haciéndome estremecer.Se acercó más a mi, presionándome contra él. Juntó su nariz con la mía y no pude evitar reír, al igual que él.

Bajó su cara hasta mi cuello y empezó a besarme el área entre mi cara y mi pecho. Volvió a subir a mis labios y su pecho se estrelló contra el mio, haciéndome sonrojar.

Deslicé mis manos hasta su cintura y metí mi mano por su camiseta, y se la quité.

La puerta se oyó chirriar y dejó ver a un Newt con los ojos abiertos como platos, sorprendido.

-¡¡¡OTRA FUCA VEZ!!!- Gritó y salió dando un portazo que hizo que retumbaran las paredes.

Salí corriendo detrás de él.

-¡Rubia de bote!- Grité cuando salí del lavabo.

-¿Qué quieres, fuca guarra?- Dijo cuando se giró.

-No íbamos a hacer nada- Contesté tocándole el hombro.

-Si claro... Por eso Minho estaba sin camiseta- Se rió y apartó mi mono de su hombro con cara de saco.

Había... ¿celos en su voz? No entiendo nada. Me reí por su acción y le abracé.

-Idiota- Dije con una sonrisa- ¡Ahora tienes esencia de Minho!

Newt soltó una carcajada y me apartó. Comenzó a sacudirse y no pude evitar reír. Por el rabillo del ojo pude ver a un Minho observándonos, frunciendo el ceño y apretando la mandíbula.

Le guiñé el ojo de forma seductora y no pudo evitar sonreír. Le miré su dulce cara de niño pequeño riéndose. Su brillante sonrisa, sus adorables ojos.

Podría decirse que... ¿le quería? No, eso no. Algo más.

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Por fin nuevo cap, espero que os guste. A partir de ahora subiremos más capítulos más a menudo.

Suerte que hemos aprobado todo y no vamos a septiembre, así más tiempo para escribir. ¡yey!

Julia y Mire