RADICAL

Capitulo 10

Capitulo 10

Jane

Después de todo lo qué pasó en la oficina de Sebastian me vine a mi casa mintiendo y diciéndole a Fernando que realmente me sentía mal.

Abrí mi puerta y extrañamente todo estaba obscuro prendí la luz y vaya mi sorpresa estaba en la mesita de mi sala un ramo de rosas con una nota y una caja

<justamente en ese momento recordé la nota que decía que llegarían más regalos del anónimo>

mi piel se eriza ante esto.

Abrí sigilosamente la nota la cual estaba escrita con una caligrafía perfecta y bonita.

Nota-. Querida Jane luces hermosa con ese vestido ha decir verdad levantas muchos suspiros querida, no me gustan que otros hombres te vean y menos que estuvieras sola con Sebastian, pero ese tema pronto quedara concluido. pues en dado caso que quiero que solamente seas mía debo de quitarlo de nuestro camino, pronto recibirás una importante visita mi hermosa.
Ponte lo que está en la caja se te verá espectacular estoy más cerca de lo que crees. dulce mía.
Att-.Tú anónimo

Esta situación realmente parece escalofriante el tener alguien que me sigue o me vigila a todas horas.

tengo miedo de hablar de esto, ya no quiero saber nada guardo la nota junto con la otra en una caja en mi habitación.

Bajo de nuevo a la sala viendo el regalo dudo en acércame pero lo abro y vaya es un vestido Chanel precioso color perla escotado del pecho y de la parte de la espalda.

<esto ha de ver costado una fortuna> pensando pero igualmente lo dejo ahí no queriendo saber más.

Cada día qué pasa me consume el nervio, de no saber qué hacer con esta situación siento que estoy agotada físicamente y mentalmente

¿Quién carajos es?.

Le hablo a Cristina para que venga lo más rápido que pueda pero ella sola no quiero preocupar a mis demás amigas, no pasa ni la hora cuando llega abro la puerta y literalmente estoy pasmada, asustada y podría decirse que frágil todavía de lo qué pasó con Sebastian.

—Jane qué pasó?—dice preocupada

Yo solo la abrazo y lloro con ella.

—tranquila Jane aquí estoy—me soba la espalda

—Cristi estoy asustada tengo miedo no sé qué hacer con esta situación, me llego otra nota y una caja las abrí y solamente decía que estaba más cerca de lo que imagino, como entro a mi casa ese maldito enfermo—en sollozo

—como así?—en tono sorprendido—Jane tienes que denunciar esto sabes que por lo menos habrá un registro—animándome

—no lo haré podría resultar ser peor tengo muchas cosas en mi cabeza, pasó algo con Sebastian literalmente me dijo en mi cara que me quería coger—le suelto sin más

mi amiga se queda con cara de shock no sabiendo que decir puesto a que sabía algo así pero no tan directo.

—Bastante loco esta ese tipo, segura que es el que conociste antes?—dice en tono burlón

—no te rías esto es serio—digo golpeándole el hombro

—Jane como es posible que de algún día a otro ya tengas tanto drama en tu vida definitivamente quisiera ser tu.
Un asesino probablemente enamorado de ti y ahora unos de los empresarios más importantes de Seattle te dijo que te quería coger, definitivamente si quisiera ser tu—se rie

—eres una tonta—ruedo los ojos

—me amas bebé—dice guiñando el ojo

Sigo platicando con ella a temas equis con cristi cuando decide irse a decir verdad es lo mejor estoy tan cansada que quiero dormir.

Me voy a mi recámara tomo una ducha y me pongo mi pijama me adentro a mi cama pensando tantas cosas pero solamente me quedo dormida sin más.