El Orbe de Mundos sin Límites: Los Juegos del Hambre

4 - Antes de la audiencia de detención

Anderson se acercó a Jacob con calma, transmitiéndole seguridad y confianza en medio de la adversidad. Le aseguró que estaba allí para ayudarlo, para luchar por su justicia y para asegurarse de que la verdad saliera a la luz.

El abogado comenzó a hacer preguntas minuciosas, buscando cada detalle y cada evidencia que pudiera respaldar la versión de Jacob. Utilizó su habilidad para extraer información relevante y construir un relato sólido en defensa de su cliente.

A medida que la entrevista avanzaba, Anderson se dio cuenta de que Jacob había actuado legítimamente en defensa propia y que su vida y la de su hermano estaban en peligro. Era evidente que el joven no había buscado el conflicto, sino que había sido arrastrado a una situación de violencia que había escalado de manera trágica.

Con cada respuesta que Jacob daba, el abogado Anderson se fortalecía en su convicción de luchar incansablemente por la libertad y la justicia de su cliente. Estaba decidido a presentar un caso sólido y convincente, basado en la verdad y en las circunstancias reales que rodeaban aquel fatídico encuentro en el callejón oscuro.

El abogado Anderson sabía que tenía una tarea ardua por delante, pero estaba dispuesto a enfrentar cualquier obstáculo para garantizar la libertad de Jacob. Se sumergió de lleno en la recopilación de pruebas, la investigación exhaustiva y la preparación del caso.

Utilizó su amplio conocimiento de la ley y su experiencia previa en casos similares para construir una estrategia sólida. Analizó cada aspecto del incidente, consultó con expertos en defensa criminal y buscó precedentes legales que respaldaran la posición de su cliente.

Después de la entrevista, Jacob se sintió agotado pero también esperanzado. Sabía que el camino que tenía por delante sería difícil, pero estaba decidido a enfrentarlo y hacer todo lo posible para remediar la situación.

"Bueno Jacob, necesito hablar con los testigos y después de esto hablaremos con tus padres. Recuerda bien, no vuelvas a hablar con los detectives sin importar que es lo que te pregunten." Advirtió Anderson con una mirada penetrante.

Jacob asintió con su expresión pálida y cansada, miró salir a este anciano con el que había tenido mcuhas conversaciones y sonrió al haber tenido esta relación inocente y de amistad pura con este señor.

Uno puede encontrar la ayuda de lugares inesperados en momentos oportunos.

...

La sala de interrogatorios estaba envuelta en un silencio tenso mientras Jacob esperaba, esposado y lleno de ansiedad, la llegada de sus padres. La puerta se abrió y entraron sus padres, con el rostro marcado por la preocupación y el desconcierto. Se acercaron a él rápidamente, envolviéndolo en un abrazo desesperado y lleno de diversas emociones.

Laurie, la madre de Jacob inmediatamente inició la conversación: "Jacob, hijo, ¿qué está pasando? No podemos creer lo que estamos escuchando. Dinos la verdad, por favor."

Jacob, con los ojos llenos de lágrimas, intentó articular palabras mientras luchaba por controlar su voz temblorosa. "Mamá, papá, Fue... Fue un accidente. No fue mi intención, solo protegía a Ethan...

Andy trató de clamar sus pensamientos y con unas palabras claras intentó enterarse de toda esta situación: "Jacob, necesitamos entender lo que sucedió. Necesitamos saber cómo podemos ayudarte. ¿Hay algo que no nos estás contando? ¿Tu hermano dice la verdad?"

"¿Que verdad?" Jacob se desconcertó con esas palabras duras de su padre.

"¿Mataste a ese niño?" Preguntó Andy mirando a su hijo.

"Yo, yo solo estaba defendiendo a mi hermano..."

En ese momento, el abogado de Jacob, el Sr. Anderson, ingresó a la habitación. Su presencia imponente y su expresión seria infundieron cierta tranquilidad en la atmósfera tensa.