El Orbe de Mundos sin Límites: Los Juegos del Hambre

8 - Lo que sigue a partir de ahora

La familia de Jacob salió del juzgado con una mezcla de emociones y una tensión palpable en el aire. Andy, Laurie y Ethan podían sentir las miradas de la gente que los rodeaba, curiosas y llenas de juicio. Era como si estuvieran bajo un intenso escrutinio, como si todos supieran los detalles más íntimos de su vida.

Caminaban en silencio, cada uno inmerso en sus pensamientos. Ethan, en un acto impulsivo, culpó a su hermano Jacob en voz alta, sus palabras resonando en el aire.

"¡Todo esto es culpa suya! ¡Si no se hubiera metido en mis problemas, no estaríamos aquí ahora!". Sus palabras resonaron en el aire, atrayendo la atención de las personas a su alrededor.

Andy, furioso, se volvió hacia Ethan y le gritó con vehemencia: "¡Basta ya, Ethan! No tienes derecho a culpar a tu hermano de esta manera. Él solo intentó salvarte, y no fue su intención que las cosas terminaran así. Necesitas comprender eso y dejar de lanzar acusaciones insensatas, ofrece un poco de respeto al menos a tu hermano, eso es lo que un verdadero hermano haría."

Laurie, tratando de calmar la situación, intervino con voz temblorosa: "Andy, entiende que Ethan también está sufriendo. Él tiene miedo y se siente confundido. No olvides que él también carga con el peso de este proceso, y su parecido con Jacob solo complica las cosas aún más".

Andy, visiblemente frustrado, respondió con enojo: "No puedo creer que estés defendiendo a Ethan de esta manera. ¿Acaso no ves lo que está haciendo? Sus palabras solo empeoran las cosas. Necesitamos unirnos como familia, no dividirnos aún más."

"¡Si ahora Jacob está en prisión hasta el próximo juicio fueron por las declaraciones de Ethan cuando los arrestaron!"

Mientras caminaban por las calles, la tensión se intensificaba. Los murmullos y las miradas acusadoras de la gente los envolvían como un pesado manto. La familia se sentía juzgada y vulnerable en medio de la tormenta emocional que los rodeaba.

En medio de la confusión y el conflicto, Andy se detuvo en seco y se volvió hacia su familia, con los ojos llenos de determinación. "¡Basta ya!" Exclamó con voz autoritaria.

"Necesitamos detener esto ahora mismo. No importa quién tenga la culpa, lo que importa es que somos una familia y debemos apoyarnos mutuamente. Ya no más discusiones, ni acusaciones. Necesitamos mantener la calma y encontrar la manera de superar esta situación juntos, ¿qué creen que pensaría Jacob de tus palabras?"

Sus palabras resonaron en el aire, y por un momento, la familia se quedó en silencio, asimilando lo que acababa de suceder. Era un momento crucial en su viaje hacia la reconciliación y la unidad.

Lentamente, se miraron entre sí, reconociendo la importancia de sanar las heridas y encontrar la fuerza para enfrentar lo que les esperaba. Aunque las palabras pronunciadas anteriormente habían sido hirientes, sabían que debían dejarlas atrás y comenzar el proceso de reconstrucción.

Pero Andy ya podía percibir la gran brecha emocional que había entre Ethan y Jacob, tenía experiencia en muchos casos como fiscal y sabía que todo esto haría que la familia eventualmente se aprieta en dos independientemente ahora de los resultados.

...

La familia de Jacob finalmente llegó a casa, y el ambiente estaba cargado de tensión y silencio. Andy, con rostro serio y determinado, reunió a su familia en la sala de estar.

"Escúchenme atentamente..."  Comenzó Andy en un tono fuerte y autoritario. "Hasta que el juicio no llegue a su fin, nadie en esta casa tiene derecho a culpar o juzgar a Jacob, y mucho menos tú, Lauri÷e." Dijo, mirando directamente a su esposa.

Laurie se sintió sorprendida y dolida por las palabras de Andy. "Pero, Andy, yo también soy su madre. Solo estoy intentando entender lo que ha sucedido y apoyar a nuestros hijos." Respondió con voz temblorosa.

Andy suspiró profundamente, tratando de controlar su frustración. "Laurie, entiendo que seas su madre, pero necesitamos ser objetivos y justos en este momento. Jacob está pasando por un momento difícil, y lo último que necesita es sentir que su propia madre no confía en él. No podemos permitir que nuestras emociones nublen nuestra capacidad para manejar esta situación adecuadamente".

Ethan, en silencio durante la discusión, asintió con la cabeza, reconociendo la razón en las palabras de su padre. "Tienes razón, papá. Necesitamos ser un apoyo para Jacob en lugar de echarle la culpa. No sabemos realmente lo que sucedió, y es injusto hacer suposiciones."

Andy miró a Ethan con orgullo y asintió. "Exactamente, Ethan. Todos necesitamos recordar que Jacob es inocente hasta que se demuestre lo contrario. No podemos permitir que nuestras opiniones se conviertan en juicios prematuros. Debemos confiar en el sistema legal y dejar que se desarrolle el proceso."

Laurie, visiblemente afectada, bajó la mirada y asintió. "Tienes razón, Andy. Me disculpo si he dejado que mis emociones se interpongan en nuestro apoyo a Jacob. Deberíamos estar unidos como familia durante este difícil momento".

Andy suspiró nuevamente y se acercó a Laurie, tomando su mano suavemente. "Entiendo que esto es difícil para todos nosotros, pero debemos recordar que somos una familia. Apoyémonos mutuamente y mantengamos la fe en Jacob. Juntos superaremos esto".

La tensión en la sala de estar comenzó a disminuir mientras la familia se abrazaba, buscando la reconciliación y la unidad. Pero bajo el abrazo de sus padres, la mirada de Ethan tenía un rastro de desprecio y odio visible a la indiferencia.

...

Jacob se encontraba solo en su habitación, rodeado por la oscuridad y el silencio de la noche. Era su primera noche después del rechazo de la solicitud de fianza en el juicio de detención, y su mente estaba llena de pensamientos turbulentos y emociones encontradas.

Se tumbó en la cama, pero no pudo encontrar la comodidad ni la tranquilidad. Cada respiración parecía pesar más en su pecho, recordándole la realidad de su situación. La habitación parecía más pequeña de lo habitual, las paredes parecían cerrarse a su alrededor, como si estuviera atrapado en un mundo propio.

Sus pensamientos se volvieron hacia su familia. Recordó la mirada de desconfianza en los ojos de sus padres durante el juicio, las palabras hirientes de Ethan y la defensa de Laurie hacia su hermano menor. Era doloroso para Jacob enfrentarse a la idea de que su propia familia podría tener dudas sobre su inocencia.

La noche era un recordatorio constante de su soledad. Las sombras se movían por la habitación, creando formas inquietantes en las paredes y el techo. Cada ruido era amplificado en su mente, haciéndole sobresaltar con cada pequeño crujido o susurro del viento.

Jacob cerró los ojos, intentando encontrar algo de paz interior. Pero en su mente, los pensamientos y las preguntas se agolpaban sin cesar. ¿Cómo podría probar su inocencia? ¿Cómo podría reconstruir la confianza de su familia? ¿Qué pasaría si no lo conseguía?

La incertidumbre y el miedo se apoderaron de él, llenando su corazón de angustia. Pero en medio de la oscuridad, una pequeña chispa de determinación se encendió dentro de Jacob. Sabía que no podía dejarse vencer por la adversidad.

Se obligó a recordar quién era realmente. No permitiría que las acusaciones y los juicios de los demás lo definieran. Sabía en lo más profundo de su ser que era inocente y que debía luchar por su libertad y su reputación.

Jacob se levantó de la cama y caminó hacia la ventana. Observó el cielo nocturno, donde las estrellas brillaban con su resplandor eterno. Esa vista le recordó que incluso en medio de la oscuridad más profunda, siempre hay una luz que guía el camino.

"Quisiera que una estrella me llevara a otro mundo, un mundo alejado de quienes no me queiren y tal vez solo así dejen de odiarme."

Los ojos de Jacob se cerraron, y eventualmente debido al cansancio se quedó dormido.