CAPÍTULO 3: EL SEPELIO ( PARTE 2)

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Los hermanos de la Reina Gabriela se presentaron en el sepelio, y aunque agradecí su presencia, su llegada me generó ciertas inquietudes.

Era conocido que anhelaban el trono de su hermana recién fallecida, que legítimamente correspondía a mi hermano Julián.

Sin embargo, temía que intentaran apropiarse del trono bajo la excusa de que Julián era considerado un bastardo debido a que mi padre nunca se casó con su madre.

Lamentablemente, lo que la Reina Gabriela había temido estaba a punto de convertirse en realidad.

A pesar de estas preocupaciones, decidí no pensar en ello y me concentré en el funeral.

En el solemne sepelio, el Rey Leo, con la voz quebrada por el dolor, dijo:

-Leo: "Hoy nos reunimos para despedir a quienes nos dieron su amor incondicional. Aunque sus cuerpos descansen aquí, su espíritu perdurará en nuestros corazones para siempre."

-Julián <<con lágrimas en los ojos>>, continuó: "Recordaremos los momentos compartidos, las risas y el cariño que nos brindaron. Su legado será nuestro refugio en los días difíciles que se avecinan."

-Hugo: "Nunca olvidaremos su generosidad y el apoyo constante que nos brindaron. Estarán siempre en nuestros pensamientos."

-Zigor: "A pesar de esta despedida dolorosa, recordemos la alegría que trajeron a nuestras vidas y sigamos adelante en su honor."

-Roy: "Las lecciones de amor y fortaleza que nos dejaron nos guiarán en los momentos de adversidad."

-Pedro, con un tono sereno, concluyó: "Aunque este adiós sea difícil, encontraremos consuelo en el amor que compartimos y en la certeza de que su memoria vivirá en cada uno de nosotros."

Mientras las rosas caían sobre las tumbas en un gesto de amor y respeto, un profundo silencio se apoderó del lugar, roto solo por los sollozos de quienes compartían el duelo.

Era un momento que recordaríamos por siempre, donde el peso de la pérdida se hacía insoportable y la esperanza de un mañana mejor parecía distante

Era un momento que recordaríamos por siempre, donde el peso de la pérdida se hacía insoportable y la esperanza de un mañana mejor parecía distante

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LA MARCA ( LIBRO 4 )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora