El tiempo en la isla de Elegia pasaba lentamente para Uta. Cada nota de música que resonaba parecía llevar consigo el eco de la tristeza y la traición que sentía en su corazón.
Un día, mientras caminaba por la costa, se encontró con Gordon, el hombre al que Shanks había confiado su cuidado. Gordon la miró con gentileza y compasión. -Uta, entiendo lo difícil que debe ser para ti. Pero quiero que sepas que estoy aquí para ayudarte en todo lo que necesites.-
Uta asintió con agradecimiento, aunque su corazón estaba lleno de resentimiento hacia su padre adoptivo. -Gracias, Gordon. Aprecio tu apoyo, pero no puedo evitar sentirme abandonada y traicionada.-
Gordon la abrazó con ternura. -Es normal sentirte así, Uta. Pero quiero que entiendas que Shanks tomó esta decisión pensando en tu bienestar. Él te ama profundamente y quiere que aprendas a controlar tus poderes para que puedas vivir una vida plena y libre.-
A pesar de las palabras de Gordon, el resentimiento en el corazón de Uta seguía creciendo. No podía evitar sentir que su padre la había abandonado en su momento de necesidad.
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Mientras tanto, en Villa Fosha, Luffy y Coby sentían la ausencia de Uta con cada día que pasaba. Aunque estaban orgullosos de su amiga por encontrar su camino, no podían evitar extrañarla.
Un día, mientras estaban en la playa, Coby miró el horizonte con tristeza. -Luffy, ¿crees que Uta alguna vez volverá? La extraño mucho.-
Luffy miró a su hermano con determinación. -Sé que lo hará, Coby. Uta es fuerte y valiente. Seguro que está aprendiendo muchas cosas nuevas y cuando regrese, será aún más increíble.-
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De vuelta en Elegia, Uta continuaba su entrenamiento con Gordon. Aunque apreciaba su ayuda, no podía evitar sentir un vacío en su corazón. El odio hacia su padre adoptivo comenzaba a consumirla.
Un día, mientras practicaba sus poderes, dejó escapar un grito de frustración que resonó en toda la isla. Gordon corrió hacia ella, preocupado. -Uta, entiendo tu dolor, pero no dejes que el odio te consuma. Eso solo te hará daño a ti misma.-
Uta lo miró con ojos llenos de rabia. -¿Cómo puedo no odiarlo? Me abandonó cuando más lo necesitaba. No puedo perdonarlo por eso.-
Gordon suspiró, sabiendo que las palabras no podían cambiar lo que Uta sentía. -Solo recuerda, Uta, que el odio no te llevará a ninguna parte. Es importante que encuentres una forma de sanar tu corazón.-
Los días pasaron, y Uta continuó su lucha interna entre el amor y el odio hacia su padre adoptivo. Aunque intentaba seguir adelante, el resentimiento seguía latente en su interior.
Mientras el tiempo pasaba, la tristeza y el resentimiento de Uta seguían siendo su compañía constante en la isla de Elegia. Cada nota de música parecía llevar consigo el eco de sus emociones tumultuosas.
Un día, mientras caminaba por la costa, Uta se encontró con una concha marina, una concha que recordaba haber encontrado junto a Luffy y Coby en la playa de Villa Fosha. El recuerdo de esos momentos felices la golpeó como una ola.
En ese momento, Gordon observaban desde la distancia, ocultos entre las sombras. Sus corazones se apretaron al ver la tristeza en los ojos de Uta y la concha en sus manos.
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Mientras tanto, en Villa Fosha, Luffy y Coby miraban el horizonte con anhelo. Extrañaban a Uta cada día más y ansiaban el momento de su regreso.
Un día, mientras estaban en la playa, Luffy encontró una concha idéntica a la de Uta. La sostuvo en sus manos con cuidado, como si fuera un tesoro preciado.
Coby lo miró con una sonrisa triste. -Es como si Uta nos estuviera recordando que aún está con nosotros, de alguna manera.-
Luffy asintió con determinación. -Lo sé, Coby. Sé que Uta volverá a nosotros. Debemos tener fe en ella.-
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De vuelta en Elegia, Uta sentía una mezcla de emociones al sostener la concha. Por un lado, recordaba con cariño los momentos compartidos con Luffy y Coby, pero por otro, sentía una punzada de tristeza al recordar la distancia que ahora los separaba.
En la sombra, Gordon observaba en silencio. El dolor en su corazón crecía al ver el impacto de la decisión de Shanks en Uta y en los dos jóvenes que también la extrañaban.
La tristeza y el arrepentimiento llenaron los ojos de Gordon. Sabía que había tomado una decisión difícil, pero necesaria para el bienestar de Uta. Aun así, no pudo evitar sentir el peso de la responsabilidad.
Con el corazón apretado, Gordon se dio la vuelta y se alejó en la oscuridad, dejando a Uta y a los recuerdos atrás.
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Continuará......
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Espero que le guste, recuerden votar para más capítulos, intento hacer capítulos largos.
Eso es todo bye bye.
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¤"Pequeños Tesoros"¤
Fiksi PenggemarEl Yonko pelirrojo era un misterio para todos. Nadie sabía lo que hacía o donde aparecía a continuación. La sorpresa era genuina cada que se lo veía. ¿Pero esto? ¿Era todo eso cierto? ¿Akagami No Shanks tiene hijos? ¿En plural?
