Pre-Fiesta

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Hasta la fecha, era increíble, como lograba Zeus irritarla. Al abrir la puerta, Hera se sorprendió de ver chofer y mellizos frente a ella, saludaron y pasaron a la sala mientras el conductor le informa la orden de su esposo y se despidió diciendo que volvía por ellos en tres horas y en su sitio, Hera todavía rabiaba y juraba hablar con Zeus sobre esa pésima decisión de traerlos a su casa si alguna clase se cancelaba, en vez de irse a la de ellos, pero al menos la melodía que empezó a tocar Apolo, bastó para calmarse y ocuparse en sus cosas, mientras volvían sus hijos.

Hebe había ido al centro comercial y los mayores habían salido temprano, así que tenía tiempo para ella, le informó a Iris para evitar le pasara llamadas de pacientes y justo en ese instante recibió una llamada de Ilitia y con la justificación de tener una reunión con su hija, se dejó la tarde libre y con una sonrisa entusiasta Hera saludó olvidándose de toda molestia. 

Al colgar y salir a dejar el teléfono en su sitio, ya no escuchó el violín que armonizaba, sino a Artemisa preguntándole a Apolo por la fiesta; media ciudad iría dedujo Hera, miró el techo negando y pasó al jardín central a arreglarlo, alcanzando a oír que no irían, mientras la rubia le recalcaba que precisamente él debía ir y si dijeron algo más, no lo escuchó, solo volvió a acordarse de ellos, cuando oyó el violín de nuevo y al asomarse al living, vio a Artemisa dormida en el regazo de Apolo captando que la música se detuvo cuando entró

-Al menos han valido los años que ha derrochado Zeus en tu capricho- reconoció a su modo, logrando que Apolo afirmara extrañado que le hablara- ¿Cuánto tiempo más estarán aquí?- insistió cruzada de brazos

-Unos... 20 minutos- calculó revisando la hora, notando que Hera tenía la vista fija en Artemisa- está cansada, alcanzó a tener una hora de entreno- la excusó volviendo a tocar

-Eso deduje- admitió notando el cansancio en el profundo sueño, al punto de parecerle cruel que tuviera que despertar en 20 minutos- ¿exactamente como es el itinerario de ustedes?- quiso saber por primera vez en la vida, consciente de merecer la sospecha y extrañeza con que Apolo la miró

-Son muy parecidos, empieza de 5 a 7 con entreno de arquería con mama', arreglarnos para el colegio, de 8 a 3 clases; de 3 a 5 cada uno a su deporte, ella a voleibol 3 veces por semana, yo a baloncesto y los otros dos días, el grupo de debate y ella de ambiental, de 6 a 8 en la academia de arte, de 8 a 10 es el curso de paramédicos que es de lunes a viernes, de ahí es volver a casa, hacer tareas y dormir... si es que hay tiempo- enlistó de forma automática esa agenda- o así era, esta semana empiezan las prácticas en paramédicos los sábados en la mañana- agregó y en sus sitio Hera afirmó con el semblante consternado

Hera alcanzó a aferrarse al sillón al oír la lista de cosas, convenciéndose aún más, que era crueldad despertar a Artemisa de su siesta y solo le quedaba una duda ante eso, ¿A qué horas eran adolescentes? En el afán de tener hijos prodigio, concluyó que no les dejaban tiempo para nada que no fuera estar con los minutos exactos para salir de un sitio y llegar al otro, suponía las noches eran suyas, en teorías les dejaba tiempo, pero con los días así, debería ser, pero entonces el precio era no dormir, como para dormirse luego en clase o peor aún, en su casa

-Hebe irá a una fiesta este viernes- admitió logrando que Apolo apartara la mirada sin dejar de tocar

-Ella y toda persona importante de menos de 30- resumió con desdén y Hera afirmó consciente de eso- hace bien al ir, es un buen modo de empezar a salir, esa fiesta es un cumpleaños, no es que sean como los bailes de pubs que son un descontrol absoluto- resumió con la vista fija en el instrumento

-Eso me contó, está tan emocionada de ir- insistió y sin dar más rodeos, clavó el puñal- ustedes, también irán, supongo

-No- le zanjó el tema con el ceño fruncido sosteniéndole la mirada- el día siguiente empiezan las prácticas de paramédicos, ya habrán más fiestas- ironizó logrando que Hera subiera los hombros

Los Hijos de ZeusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora