𝚌𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 24

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"¿Qué?" Preguntó Roier, comprobando si había oído bien.

"No logré entrar." Repitió Spreen, sin expresión en el rostro de ningún tipo.

"Oh, Dios mio." Susurró el menor y puso una mano sobre su boca, las lágrimas ya en sus ojos, porque esto fue todo. Salía hacia Colegio del Rey la próxima semana, solo. Y no había manera de que sus padres no se enteraran de ello eventualmente.

Él comenzó a llorar con la idea de dejar a Spreen en Buenos aires, envolviendo sus brazos alrededor de su torso y enterrando su rostro en el pecho del castaño.

"¿Ves? Esto es el por qué no debes ser optimista todo el tiempo. Consigues esperanzas y terminas decepcionado si las cosas no salen bien."

"¿Qué?" Preguntó Roier confundido y miró a Spreen con los ojos vidriosos.

"Logré entrar."

"¿QUÉ? ¡Dámelo!" Gritó Roier, antes de tomar un paso atrás de el mayor y arrebatarle la carta de su mano. Leyó sobre las primeras líneas en voz alta, para asegurarse de que lo hiciera
correctamente.

"Estimado Sr. B****k, nos complace informarle que... ¡idiota de mierda!

¿Crees que esto es una broma?" Roier gritó y empujó el pecho de Spreen, casi derribándolo. "¿Casi me da un ataque al corazón y querías darme una lección?"

"No nos olvidemos de lo que me hiciste en el día de los inocentes." Dijo Spreen, pero Roier le interrumpió una vez más con un empujón en el pecho.

"¿En serio estas tratando de luchar contra mi?"

"¡No te rías de mil ¡Estaba tan asustado!"

"Debido a que te preocupas por mí." Bromeó el más alto y los ojos de Roier se suavizaron, antes de recordar que se suponía que debía estar enojado con Spreen por enganarlo de esa forma.

"¡No importa! Estoy tan enojado y-" Roier continuó, levantando su mano para empujarlo de nuevo, pero Spreen atrapó sus muñecas en sus manos y tiró de él hacia su pecho.

"Pero vamos a Londres juntos." Dijo en voz baja mientras le sonreia al manor.

Roier se mordió el labio y Spreen tomó su rostro, antes de que el menor envolviera sus brazos alrededor del cuello de él, besándolo

"Vamos juntos a Londres." Roier repite en su boca y Spreen asintió con la cabeza, presionando sus labios una vez más.

"Iremos juntos, cariño."

Ni siquiera podían besarse correctamente porque sus sonrisas eran demasiado grandes en sus caras, y Roier nunca había sido más feliz.

Spreen lo tomó por sus caderas, sus lenguas encontrándose una a la otra con facilidad. Roier  jugaba con el pelo en la parte posterior del cuello de el mayor y el estaba a punto de levantarlo del suelo cuando escucharon que alguien tosía al lado de ellos.

"Oh. Hola, Sra. Isabel." Dijo Roier, sonrojándose se alejó de Spreen.

"Ya te dije que me llamaras Isa. Iba para el trabajo. Encantada de verte de nuevo. ¿Esa es la carta de la Universidad?"

"Si." Respondió Spreen. "Logré entrar."

"¡Oh Dios mío! ¡Eso es increíble! ¡Salgo a las cinco hoy, así que podemos salir a celebrar! ¡Puedo comprar un pastel! ¡Puedo hacer un pastel!" Exclamó y levantó las manos.

"Adiós, mama." Dijo Spreen, avergonzado cuando ella le besó en la mejilla.

Roier les sonrió, y eso sólo hizo que Spreen se sonrojara aún más de lo que ya estaba.

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⏰ Última actualización: Dec 11, 2023 ⏰

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"𝑏𝑒𝑏𝑒, 𝐸𝑙 𝑐𝑖𝑒𝑙𝑜 𝑒𝑠𝑡𝑎 𝑒𝑛 𝑡𝑢𝑠 𝑂𝑗𝑜𝑠" / ˢᵖʳᵒⁱᵉʳ [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora