🎀𝐋𝐨𝐯𝐞 𝐡𝐚𝐬 𝐚𝐫𝐫𝐢𝐯𝐞𝐝

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Sobra decir que ambos se despidieron justo después de terminar de limpiar ese desastre. Un poco de agua de la manguera fue más que suficiente para llevarse todo el color de la acera de su entrada, con el sol golpeando sin piedad todo el pueblo, se secaría en 20 minutos.

Wally y Barnaby se despidieron después de limpiar el desorden que habían creado en la entrada del hogar del peliazul. Ambos sabían en otra oportunidad solucionarían ese nuevo pequeño problemay se disculparían sin fin, pero también entendían que su amistad era más fuerte que cualquier accidente momentáneo. Otro día hablarían de ello, para luego olvidar que sucedió y regresar a su rutina de siempre.

Lo bueno es que ninguno de los dos era rencoroso. Pero su casa con vida propia, Home de hecho sentía algo de envidia del can azul por ser quién hace sonreir tanto al chico de ojos negros. Solo los observa silenciosamente con una mirada triste, cómo si le afectara de sobremanera el que su maceta estuviera dañada, aunque más le dolia ver a los dos interactuar nerviosamente frente a él, ¡Ese mugroso perro se estaba robando el tiempo de calidad entre él y su amigo!

Una vez en can se había alejado lo suficiente, puesto que literalmente no había ido a comprar nada al local de Howdy, solo quizo visitarlo para charlar y contarle un par de chistes, Wally intento abrir la puerta tranquilamente, sin éxito. 

Oh no... Como se temía, Home estaba de malas ahora.

—. Vamos Home!... déjame entrar .– pidió el peliazul suplicante al hogar.

Pero siendo realistas, Home no lo dejaría entrar, no solo no le había dado lo que le prometió, si no que de hecho se rompió y no tenía intenciones de olvidar eso fácilmente.

toco suavemente la puerte, una y otra y otra vez. Pidiendo amablemente que lo dejará entrar. 

Miró hacía los ojos del lugar, su expresión era de tristeza, de hecho sus ventanas estaban algo humedas simulando lágrimas, parecía un niño haciendo una pataleta. Su puerta se mantenía firmemente cerrada por dentro y sus persianas estaban entrecerradas,.

Realmente la casa no tenía la necesidad de llorar, pero quería hacerle saber al chico del cardigan que la había cagado, tal vez así le haría más caso que a Barnaby. 

—. H-hey... ¿estas llorando Home? .– Hablo en un tono preocupado poniendo una de sus manos en la pared del costado de su casa —. Realmente siento haber rajado tu maceta nueva, no fue mi intención, enserio... lo lamento amigo .– Wally susurro esto último esperando al respuesta del contrario, sin embargo solo obtuvo en contestación las cortinas completamente cerradas de la casa.

Definitivamente no lo hablaría hasta la mañana siguiente, y más le valiá tener esa maceta decorada y arreglada. No era la primera vez que este tipo de reclamo sucedía entre el menos y su propia casa. De hecho estaba algo acostumbrado a lidiar con la personalidad aniñada del lugar. Solo debía darle su espacio y en poco tiempo le volvería a "hablar" normalmente.

Ahora eran aproximadamente las tres de la tarde, otra vez, ¿cómo el tiempo se le va tan rápido? nisiquiera había almorzado y hace media hora que Barnaby se fue a su respectivo hogar.

¿Demoró tanto o es que los días eran cada vez más cortos? Nunca lo sabría, tal vez era parte del encanto de vivir en Welcome Home. Desde que vino había sido así...

Reflexionaría sobre más tarde, ahora esta pensando que podría hacer, quiero decir, esta en la puerta principal sin poder entrar y con una maceta rajada y algunos pocos botes de pintura casi intactos.

𝘾𝙖𝙣'𝙩 𝙏𝙖𝙠𝙚 𝙈𝙮 𝙀𝙮𝙚𝙨 𝙊𝙛𝙛 𝙔𝙤𝙪 ,, ᴮᵃʳⁿᵃˡˡʸ - ᴾᵃᵘˢᵃᵈᵒDonde viven las historias. Descúbrelo ahora