Una historia Omegaverse, dónde dos lobos están destinados a salvar a las manadas pero no todo será fácil para ellos, además, ¿Podrá su amor ayudar a la profecía?
Una historia de mi completa autoría.
Contenido +21.
No acepto copias ni adaptaciones.
A...
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Maratón 3/5
Ya los besos de la pareja habían puesto más que furiosa a Lara, no se podía ni imaginar lo que se sentiría verlos tener sexo, preferiría la muerte a eso, pero suicidarse era una falta a la diosa lo que te impedía de reencarnar así que no era algo que ella quería.
Danrah le quitó la camisa a Jungkook dejándolo sin nada en la parte superior de su cuerpo, él procedió a hacer lo mismo con ella dejando sus pechos a la vista, con su lengua procedió a lamer sus pezones rosados de manera lenta.
La Omega podía sentir como se mojada rápidamente, sus dedos pasearon por el cuerpo del Alfa, haciéndolo gruñir y aunque Lara estaba atrás gritando que se detuvieran, ellos hicieron oídos sordos y continuaron, Danrah tomó la liga del pantalón llegando hasta el botón y lo abrió para luego bajar su cierre y llegar hasta su bóxer, Jungkook estaba sumamente duro.
Ella lo acarició por encima de la ropa, ella se bajó de las piernas de su hombre y se arrodilló frente a él, los ojos del Alfa brillaron al ver a su esposa lista para hacerle un oral, no había nada mejor que esa vista, ella abrió su boca sacando su lengua y lamer la punta del miembro de su esposo, ya estaba comenzando a salir el líquido pre seminal, lamió desde la punta hasta las bolas, las sensaciones hacían que él la tomara por el cabello ayudando a embestir su boca, haciéndolo con cuidado pero queriendo llenarle la boca de un tirón.
Jungkook abrió los ojos y se quedó mirando a Lara fijamente.
—Solo hay una mujer... —respiró pesadamente— ...que puede hacerme sentir... así de bien.
—¡Cállate y mátame de una vez!
Danrah procedió a levantarse y bajó su ropa interior dejando la falda que estaba usando en ese momento, tomó el miembro de su esposo y lo colocó a su entrada y lo metió hasta el fondo, un gemido agudo salió de los labios de ella, no se movió por unos segundos hasta que decidió hacerlo.
Estaban follando frente a Lara, aquella tortura era demasiada para ella, solo cerraba los ojos pero no podía cubrirse los oídos, claramente los golpes de los cuerpos al chocar el uno al otro eran claramente notorios y más que en la habitación había eco.
Ya al punto de llegar Danrah se baja de las piernas de Jungkook para evitar el nudo, al no estar dentro de una vagina el pene no crece para hacer el nudo, simplemente se viene y vuelve a su estado flácido.
Luego de arreglarse la ropa ahora es Jungkook que procede a seguir con el interrogatorio, los gritos de Lara debido a las torturas llenaban el lugar, Jungkook estaba tan molesto que no se contuvo, ya cuando tuvo suficiente la sacaron para proceder con la ejecución, ya un Beta estaba listo con el hacha con el que le contarían la cabeza.
—Aun no me arreglo de lo que hice, lo haría mil veces si con ella me deshago de ese molestia —señaló con el mentón a Danrah— Esas son mis últimas palabras.
—Es una lástima que esta Alfa, a la que le tenía tanta confianza decidiera traicionarme, intentó matar a mi Omega y en el proceso terminó matando a mi cachorro, el primero que vendría a esta manada, eso es algo que no puedo perdonar y todos aquí saben que según la ley debe pagarse con la misma muerte.
Él le asintió al Beta y este procedió a cortarle la cabeza a Lara, los padres de ella y amigos lloraron su muerte pero sabían porque el Alfa lo había hecho, eso no les impedía estar molestos y tristes pero eran lobos fieles a la manada.
Todos volvieron a la casa principal allí estaba Jimin junto a Lucy y los lobos de su manada que lo acompañaron.
—Jungkook, Danrah, lamento su pérdida —él se acercó a ella y le dió un fuerte abrazo para luego hacer lo mismo con él.
—Si, de verdad que todo esto no debió pasar —agregó Lucy.
—Gracias por sus palabras de verdad que no saben lo que su apoyo significa para nosotros —recalcó Jungkook.
—Nosotros volveremos a la aldea, una manada no debería estar mucho tiempo sin su Alfa, próximamente le enviaremos la invitación a nuestra boda —Lucy sonrió.
—Les deseo lo mejor y claro que allí estaremos —Danrah tomó el brazo de su amiga— Gracias por cuidarme, aunque fue corto, ya te siento como mi amiga.
—Ya lo somos, solo que nunca lo dijimos —ambas rieron.
Con esto tanto el Alfa Park como su Omega se despidieron, el Alfa Kim aún estaba en el hospital con Irene debido a las lesiones causadas por el castigo.
—Quiero hablar con Taehyung, pero no sé si él querrá hacerlo —Danrah le acarició suavemente su brazo.
—Pues si debe dolerle pero si es Alfa y líder entenderá el porque lo hiciste, así que ve y habla con él, hazle saber que lo entiendes pero era algo que debía hacerse —el castaño asintió y caminó hasta el hospital, preguntó por la habitación de Irene y se detuvo frente a la puerta.
Tae al verlo de pie allí se levantó y caminó hasta él dónde le dió una sonrisa suave y triste.
—Hyung, yo... —Tae le colocó la mano en el hombro.
—No, no hagas eso que tienes pensado hacer, un Alfa no se disculpa por una decisión que tomó por el bienestar de su manada, sé que lo que hizo Irene lo merecía, por cierto, mis condolencias, no puedo imaginar lo que pasaste.
—Gracias por entender, Hyung. ¿Y que piensas hacer?
—Quisiera entender por la diosa me la dió por Mate, igual me casaré con ella, tengo esa conexión aunque aún no hemos completado todos los pasos pero espero que muy pronto podamos hacerlo, pero eso sí me la llevaré a penas despierte.
—La verdad es que aunque no nos agrade Irene, si vamos a su boda, será por tí, no por ella.
—Lo entiendo perfectamente, igual gracias mi hermano.
A Taehyung le quedaba un camino largo y luego entendería todo.
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