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Sunoo estaba de pie en el porche sintiéndose siete veces estúpido. Sabía que lo que David le había hecho no era como la mayoría de los hombres actuaban. Su padre era una prueba de eso. Sunoo también se dio cuenta que él había tomado su experiencia del pasado contra Niki. ¿Por qué se puso rápidamente a la defensiva cuando Niki le preguntó sobre las lágrimas? David lo ridiculizaba por ser blando. Eso fue un disparador sobre el cual tenía que trabajar.

—Sólo deja que se calme —Taehyun dijo saliendo al porche—. Un hombre tiene su orgullo, sabes. Y acabas de acusar a tu pareja de abusador.

—¿Siempre escuchas las conversaciones ajenas? —Sunoo gruñó.

—Esta es mi casa, sabes. La última vez que revisé, se me permitía estar en donde quisiera.

—¡Eso no quiere decir que tengas derecho a escuchar conversaciones ajenas!

—¡Yo no estaría escuchando conversaciones ajenas si no actuaras como un completo idiota!

—Jódete.

—Oh, eso es original.

Sunoo se dejó caer en el columpio y apoyó la cabeza en sus manos. 

—Veo lo que tratas de hacer, pero eso no ayuda. No voy a usarte para ventilar mi ira.

—Tenía que intentarlo. —Taehyun se apoyó en el barandal del porche.

Sunoo se frotó la cara y miró a Taehyun. —Creo que necesito seguir con la terapia. Lo que David me hizo me afectó más de lo que pensé.

—Puedo matarlo por ti.

Sunoo se quedó con la boca abierta. —No puedes hacer eso.

—¿Por qué no?

—Porque no serías mejor que él si lo hicieras —Sunoo puntualizo—. Además, matarlo no va a solucionar mis problemas.

—Temes que te deje atrás. Puedo decirlo por tu conversación. Y la respuesta es no. No trataba de escuchar. Sólo salí a ver si querías dar un paseo.

—¿Un paseo?

—No cambies el tema.

—No tengo problemas con el abandono.

—Puedes engañarme.

—Temo hacer algo malo y que mi pareja me levante el puño con ira. Sólo porque nunca viví solo no significa que tema estar solo.

Taehyun se puso en cuclillas viendo directamente a los ojos a Sunoo. —Déjame decirte algo. Un shifter espera toda su vida encontrar a su pareja. No hay nada en la tierra que no haríamos por nuestras parejas. Niki puede golpearte tanto como podría cortarse el brazo. 

—¿En serio?

—Créeme, eres afortunado. Al menos no eres la pareja de un jodido vampiro.

—¿Vampiro? —Sunoo se estremeció.

—¿Te estremeces sólo por la palabra vampiro?

—¿H–hay vampiros?

—Nos rodean.

A Sunoo se le nubló la vista mientras caía del columpio. Su último pensamiento era que necesitaba una nueva perspectiva de la vida. 


👷👷👷


Niki se orilló en el camino y giró la camioneta. No podía dejar las cosas de esa manera con su pareja. El miedo de Sunoo lo golpeaba, y Niki debería de haber sido un poco más comprensivo. Se sentía como una rata bastarda.

El viaje de Sunoo -SunKi-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora