El viaje de Sunoo -SunKi-

7

—¿Qué jodidos estás haciendo, Geonu? —Niki le gritó a su primo, su voz hizo eco en la vacía tienda de motocicletas. Estaba más que enojado. La familia se suponía que se respaldaban unos a otros, no que se jodían.

—No sé qué infiernos te dijo ese loco vampiro. Yo estaba tratando de encontrar una relación, no es tu asunto.

Niki pasó sus manos a través de su cabello. ¿Cómo había terminado con esa mierda como primo? Estaba cansado de limpiar sus líos. Eso tenía que terminar. Él tenía que madurar, rápido. Esta vez había ido demasiado lejos ¿Involucrar al príncipe? ¿Geonu habría perdido la cabeza?

—¿Por qué él mentiría? —Chanyeol preguntó mientras caminaba alrededor de la circunferencia de la tienda—. ¿Contra quién conspiras?

Niki cruzó los brazos contra su pecho, esperando oír la mentira que estaba seguro que su primo diría. El Alfa había llevado tres shifters con él, y no se veían muy amistosos.

Niki sabía que el Alfa podría haber venido solo. Era más que capaz de manejar la situación. Trayendo a esos musculosos le decía a Niki lo serio que esto era. Niki temía que este era un lío del que no sería capaz de sacar a Geonu y quizás esta vez dejaría que Geonu limpiara sus propios líos, correr cada vez que su primo gritaba por ayuda lo estaba agotando.

—Te dije que fui buscando una relación en el club. 

Niki podía ver el sudor empezar a formarse en la cara de Geonu. Se sentía mal por él, pero su primo se había metido en este lío, uno más de la larga línea de líos. No había nada que él pudiera hacer. No si quería quedarse en la villa Park. Niki tenía que pensar en su pareja. Sunoo necesitaba una manada y la familia de Niki lo protegía. No se arriesgaría a enojar al Alfa.

Los tres shifters se acercaron a Geonu mientras su primo seguía de pie orgulloso. Qué mal que eso no fuera algo bueno. Niki sabía que eso no iba a terminar bien. —Si tengo que preguntarte una vez más, no te gustarán las consecuencias. —La voz de Chanyeol no se prestaba a discusiones, era baja y amenazadora.

—¿Sólo te quedarás parado ahí, Niki? —Geonu le preguntó con miedo en la mirada. Su primo finalmente entendió la situación.

Niki le había visto ese miedo antes, cuando Geonu sabía que había ido demasiado lejos.

Sacudió la cabeza. —Lo siento primo, pero tengo una pareja a quien cuidar.

La cara de Geonu se retorció y gritó. —¿Eliges a un puto sobre mi?

Niki cruzó el cuarto en segundos, tomó a su primo de la camisa y lo levantó del suelo. —Te advertí que no lo llamaras así —le gruñó.

Geonu pateó, tratando de golpear las bolas de Niki. Niki movió su cuerpo y lanzó a su primo al otro lado del cuarto. Geonu rápidamente se puso de pie, corrió hacia Niki, inclinó su cuerpo, listo para derribar a Niki. 

Niki se giró, encajando su codo entre los hombros de Geonu, tumbándolo al suelo. —Detente —le gritó—. Sólo lo estás empeorando.

—Jódete, traidor. —Geonu se puso de pie, lanzándole un puñetazo a Niki que falló por un pelo. 

Niki golpeó a Geonu en el plexo solar, sacándole el aire a su primo. Tomó su mandíbula y acercó su cara a un par de centímetros de la de su primo. —Mejor deja esa mierda ahora.

Niki lo soltó y se giró hacia el Alfa. Chanyeol se movió más rápido que la velocidad del sonido, empujando a Geonu contra la pared y quitándole un cuchillo de plata de la mano. El Alfa lo lanzó hacia uno de los shifter. —Ya no eres bienvenido aquí. Recoge tu mierda y lárgate antes de una hora o un grupo saldrá a cazar tu cabeza.