El viaje de Sunoo -SunKi-

10

Niki vio a su padre durante un segundo cuando oyó el sonido de un disparo que hizo eco. Su corazón cayó a su estómago mientras corría a casa, rezando porque su pareja estuviera a salvo. Mientras llegaba a la puerta trasera, Sunoo salía corriendo directo hacia Niki.

Niki dejó salir un grito mientras revisaba si su pareja tenía alguna lesión y lo jaló más cerca cuando no vio ninguna.

—¡Hyunjin! —Sunoo gritó—. ¡Geonu le disparó a Hyunjin! —Su pareja estaba clavándose en él mientras aumentaba su histeria.

—Ve a la casa y quédate en la cocina. —Sunoo asintió rápidamente mientras sus ojos seguían llenos de miedo. Niki acunó su cara, acercándose a los labios de su pareja—. Va a estar bien. Necesito que estés a salvo mientras nos encargamos de esto.

—Está bien. —Sunoo se apoyó en Niki, dándole un rápido beso antes de correr hacia la casa. Niki se dio media vuelta y corrió hacia donde había venido el sonido. Cuándo dio vuelta en la esquina, su rabia recorrió su cuerpo.

Hyunjin estaba acostado en el suelo sin moverse. «¡No!» Niki corrió hacia el patio sin preocuparse de que su primo estuviera en algún lugar con un arma de fuego probablemente apuntándole a él. Tenía que llegar con su hermano mayor.

Niki cayó de rodillas cuando llegó junto al gemelo, empujándolo sobre su espalda. La cabeza de Niki cayó hacia atrás mientras las lágrimas caían en su cara, dejó salir el aire. El tiro sólo había rozado el hombro de Hyunjin.

—Bastardo —Jaemin gritó mientras cambiaba. Fue directamente contra su primo mientras Pa también caminaba dirigiéndose hacia Jaemin.

Geonu se enderezó de su posición al lado de la camioneta y trató de huir. Apuntó a Jaemin con su arma. Pa rugió y atacó a Geonu como un padre protegiendo a sus cachorros, y eso era exactamente lo que su padre estaba haciendo.

Los trillizos y Jaehyun llegaron en sus caballos, desmontaron y cambiaron. Los caballos corrieron hacia el establo mientras los osos se encargaban de Geonu.

—Hey, problema, despierta. —Niki palmeaba un lado de la cara de su hermano—. Sólo es un rozón, deja de actuar como un gran bebé. —Su voz se tensó mientras trataba de despertar al gran hombre.

Jaemin llegó junto a ellos, empujó a Hyunjin con su hocico y gimió. Empujó a su gemelo con la pata, tratando de que se moviera.

Niki notó el terror en la expresión de Sunoo mientras bajaba los escalones del frente. Sostenía sus puños sobre su pecho mientras se acercaba.

—Es Jaemin. No está herido. —Niki le extendió la mano esperando a que su pareja se acercara. Vio a su pareja ver a Jaemin antes de apresurarse a su lado. Niki envolvió sus brazos alrededor de la cintura de Sunoo mientras su pareja temblando veía el cuerpo de Hyunjin en el suelo.

—Él está... 

—No —Niki le contestó mientras pasaba su mano por el pelo de la cabeza de Jaemin, haciendo su mejor esfuerzo por tranquilizar al gemelo—. Sólo está desmayado. Sentí un chichón en su cabeza. Debió de haberse golpeado al caer.

Sunoo se arrodilló al lado del gemelo inconsciente mientras tentativamente estiró la mano, sintió el cuello de Hyunjin y entonces soltó el aire al confirmar por si mismo que el oso estaba bien.

—Dónde infiernos mi hermano se equivocó con él —Pa grito enojado desde el patio—. El imbécil hijo de perra lo hizo a propósito, casi como una misión suicida. —La voz de su padre se quedó atrapada en su garganta cuando llegó con ellos.

—Él ya no quería ser un adicto —Sunoo murmuró a su lado—. He visto lo que las drogas pueden hacer. Él tomó la única salida que creyó que le quedaba.