°.•-|- pequeños recordatorios de que les perteneces. mick, carlos, lewis, george.
°.-|- advertencia: nsfw.
°.-|- MICK SHUMACHER.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
• tu garganta. • ni si quiera le importa que todo mundo pueda verlo. • el hombre simplemente no puede contenerse a si mismo.
"¡Joder¡" gritas, las duras embestidas de mick entrando y saliendo de ti a una velocidad intensa que apenas puedes seguir. Extiendes la mano hacia atrás, intentando agárrate a algo, lo que sea, para no caer demasiado rápido. Justo cuando tus dedos rozan su costado, su propia mano sale disparada, presionando la tuya contra el colchón.
"Déjalo ya" Te gruñe al oído, con la longitud de su cuerpo deliciosamente pegada a tu espalda, sin romper el ritmo ni una sola vez. La sensación te recorre la espina dorsal y no puedes evitar apretarle la polla. Un gemido áspero retumba en su pecho, y puedes sentir sus dientes hundiéndose en tu cuello, el dolor compitiendo con el placer que sientes. "Tan bueno". Mick murmura, moviéndose hacia el otro lado de tu cuello, sin preocuparse por la mancha de sangre que deja en sus labios.
°.-|- CARLOS SAINZ.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
• tus tetas. • puede pasarse la vida entre tus tetas. • le encanta dejar marcas que solo él puede ver.
"Nena", gimes con los dedos enredados en su pelo, con los lentos empujones de su polla golpeando ese punto tan profundo dentro de ti. Carlos gime en respuesta, chupando con más fuerza la parte inferior de tu pecho, sus brazos envueltos debajo de ti y sosteniéndote con un fuerte abrazo. "Cariño, vamos", gimoteas en un mohín, "quiero un beso". Carlos se aparta de tu pecho, orgulloso de ver tus tetas cubiertas de saliva y mordiscos de amor. Y sientes como te aprietas alrededor de su polla al ver un ligero brillo en sus labios, si tan solo te hubiera dejado cogerlos entre tus dientes. "Lo siento cariño", te acaricia el pecho, "creo que he dejado un punto" Y vuelve a bajar para asegurarse que cada centímetro de tus cuerpo sea marcado por sus besos.
°.-|- LEWIS HAMILTON.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
• tus muslos. • este hombre es insaciable. • golpea y pellizca la grasa de tus piernas mientras te come.
Tus dedos sueltan por fin el fuerte agarre que tenían sobre su pelo cuando sientes que el orgasmo te invade. "Joder", gimes, con las manos recorriendo tu propio vientre mientras las placenteras réplicas hormiguean bajos tus dedos. "mhmm", lewis gime de acuerdo, chupando una marca justo donde tu pierna se une con a tu cadera. "Amor", gimoteas, con las manos agarrándolo para intentar levantarlo, "ven aquí". El tono necesitado de tu voz despierta el deseo dentro de su vientre, incitando a lew a apretarse contra la cama mientras hunde sus dientes en tus muslo antes de retirarse, pero no sin un suave beso. "¡¡¡Estoy bien aquí abajo!!!", responde lewis, hundiendo los dedos más profundamente en la parte superior de tu pierna, otro beso en la unión de tus muslo. "¿Pero no quieres sentirte bien tú también?", te burlas, retorciendo un pezon entre tus dedos mientras él sigue mirando. Y crees que los has atrapado cuando sus ojos casi se ponen en blanco. Pero en lugar de eso, te da una ráfaga de besos desde la rodilla hasta abajo, hasta que vuelve a tu coño, volviendo a succionar por tercera vez.
°.-|- GEORGE RUSSEL.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
• tus muñecas y tobillos. • lo encuentra tan sensual. • le encanta provocarte.
"Geo", gimoteas, moviendo impacientemente las piernas e intentando alivianarte un poco. "¿Si, amor?", murmura george mientras te besa los brazos. "Por favor", le súplicas, tocando su mejilla para que pueda ver en tu dirección, "te necesito". "¿Ah?", sonríe, mordiéndote la muñeca. "Dime lo que necesitas", dice, separando tus piernas. "Te necesito dentro de mi". Te tiembla la voz cuando te echa las piernas por encima de los hombros, presionando hacía delante de una forma que casi te dobla por la mitad. Sus labios se aferran inmediatamente al tobillo junto a su cara. "shh." Murmura, pero sigue golpeando su endurecida polla en tu coño. "¡George!", gritas, desesperada y retorciéndote por más mientras su mano te masajes la pantorrilla. Su lengua se desliza por la piel, y crees que estas apunto de perder el control hasta que se apiada y te penetra de una sola vez. "Te he dado lo que querías, ahora será mejor que te quedes ahí como una niña buena hasta que me haya saciado".
