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—Bienvenidos nuevamente a otro capítulo donde estos weyes cuidan de niños y bebés-Sonrie—El día de hoy, nos acompaña nuestro amado Masky!

—Hola, gracias por invitarme.

—Gracias a ti por aceptar la invitación-Le da palmaditas en la espalda—El día de hoy, nuestro querido Masky cuidara de un niño de 1 año. 

—¿Que? ¿cuidar?-Preguntó confundido —Pense que íbamos a charlar de algo, no de cuidar de un crío.

—Como dije, será un niño de 1 añito, y su nombre es Freddy. 

—Carajo, no sabes cómo te odio en estos momentos.

✨✨✨✨✨✨✨✨

—Buenos días Robin- Saluda amablemente el padre del niño.

—Oh, buenos días Cris ¿Cómo estás?.

—Ya sabes, lo normal-Sonrié—¿Podrás cuidar de Freddy por unas 5 horas?. 

—Claro, ¿tu pago sería efectivo o transferencia?

—No has cambiado nada.

—Mi tiempo es valioso

—Te pagaré en efectivo cuando regrese.

—¡Perfecto!.

*Media hora después* 

—El pequeño Freddy estará a tu cuidado- Le doy las cosas del niño a Masky—Tengo que salir de urgencias.

—Espera, espera ¿por qué tengo que cuidarlo yo?. 

—Eres el único el cual puedo confiar- Dije y este solo me miró feo—Te daré una parte de la paga, una caja de cigarros y un cheesecake ¿Feliz?.

—Me parece bien.

—Otra cosa, no puedes fumar cerca del niño, aprovecha a dormir un rato, Freddy duerme, además, no es un niño molesto, hasta suerte tienes. 

—Confio en ti. 

P.O.V Masky 

Me senté en la cama y observé al niño dormir tan plácidamente, tenía envida, quisiera ser el en estos momentos. Busque entre mis cosas un libro donde hablaba sobre la maternidad y cuidados de bebés y comencé a leerlos, no pregunten por qué los tengo, paso media hora y el niño comenzó a llorar de la nada, supongo que tenía pesadillas o algo. Lo cargue por un momento y lo primero que hizo fue vomitarme encima. 

—No puede ser posible y apenas la compré ayer- Dije molesto— Tendré que ducharme ahora.

Tomé al niño y lo amarre como pude en la carriola, cerré con llave mi habitación para ir a tomar una ducha rápida y lavar mi playera. El niño comenzó a llorar nuevamente, quiero suponer que no le gusta estar solo. Cómo pude y rápidamente tome la ducha, me puse la toalla y salí a verlo, sus ojitos y nariz estaban rojitas, sentí una sensación extraña, sentía tristeza verlo a si. 

 Me cambié y tomé al niño para ir a la cocina hacerle su leche y darle alguna manzana para que comiera, en la cocina estaba SlenderMan, Hoodie y Toby, estaban cocinando algo.

—¿Y ese bebé?-Preguntó Toby.

—Se llama Freddy -tome su manita para que saludara.

—No me digas que es tu hijo, casi son idénticos-Comento Hoodie.

—Callate, no es mi hijo, solo lo estoy cuidando.

𝓝𝓲ñ𝓮𝓻𝓸𝓼 «Creepypastas»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora