Professor ( Lectora x Cillian Murphy)

Chapter 42

Cillian había estado a mi lado todo el día como siempre, esperaba una reunión pequeña, al final del día solo nos teníamos a nosotros, llegue a casa con los niños y Cill  antes de abrir la puerta el me miro con una mirada risueña.

- qué pasa?- pregunté curiosa

- Feliz cumpleaños amor- dijo para luego abrir la puerta de nuestra casa

Sostenía a Benjamin en mis brazos mientras que Alice estaba en los suyos, al entrar la casa estaba decorada con colores pasteles un gran pastel, fotógrafos, y un par de personas no tantas pero no se veía vacío, estaba impresionada por el detalle que había tenido pero me sentía extraña, realmente conocía a estas personas?

Sonreí mientras rostros conocidos y otros no tantos me felicitaban mientras Cill cargaba los niños luego de unos minutos me acerqué a Cillian.

- quienes son todas estas personas?- pregunté susurrándole un poco apartada del resto

- politicos, importantes, personas como nosotros- susurró mientras tomaba un trago-

Lo miré confundida, en que momento se había convertido en un asunto de poder

En ese momento un fotógrafo se acercó a tomar una foto

- foto por favor para la prensa Rumana- comentó con su cámara hacia nosotros

Cillian cargaba ambos niños mientras yo sonreía a su lado, para la foto

- Son una familia hermosa señor Murphy- comentó el fotógrafo

- todo es gracias a mi hermosa esposa, sin ella nada de esto sería posible- comentó sonriendo

Yo sonreí mientras asentía a su comentario

- esto estará en la prensa, permiso- comentó el chico saliendo de la escena

Yo tome en brazos a Alice y a Benjamin Cillian se confundió por mi acción

- qué haces Anabelle, acabamos de llegar- comentó notando un poco mi disgusto

- necesitan descansar, estuvieron toda la mañana afuera, iré a llevarlos por una siesta- comenté mientras me alejaba hacía las habitaciones

No tenía mayor interés en relacionarme con esas personas que no conocía, ni aparecer en cada revista de este maldito país, Cillian se quedó abajo hablando y sonriéndole a todas esas personas,
acaso mi cumpleaños era solo una excusa para introducirme a la alta sociedad.

Recosté a Alice y Benjamin en sus cunas mientras me sentaba junto a ellos recostando mi rostro en el barandal de su cuna, ambos dormían estaban agotados de una larga mañana cantando mi cumpleaños, solo nosotros como una familia, en momentos así me sentía sola, extrañaba a mi padre, mi madre, mis amigos, pero supongo que así era como decía Cillian, solo nosotros éramos para siempre el resto no.

En ese momento alguien tocó la puerta de la habitación, respondí rápidamente que estaba ocupada pero la persona abrió un poco la puerta dejando ver su rostro era Bill.

- Bill, al fin un rostro conocido- dije levantando la mirada al verlo- pasa - comenté

- Cill me comentó que subiste - comentó entrando a la habitación - por lo que veo acompañas a los pequeños- dijo quedándose unos pasos de distancia

- si, estuvimos toda la mañana celebrando, estaban agotados- comenté con una sonrisa

- Feliz cumpleaños ya son 20 - comentó dándome un regalo

- Gracias Bill, no debías molestarte- comenté tomándolo- si ya tengo 20 - reí mientras lo veía

- espero te guste, lo escogí recordando cómo te gusta la historia- comentó mientras abría el regalo

Era una pequeña brújula, con un marco de Plata, toque un poco su marco y mis dedos se lastimaban al sentir aquel material pero disimulé dejándolo en la mesa

- Gracias Bill, estoy feliz que estés aquí- comenté sonriendo

- sabes que cuentas conmigo para todo Ana- comentó cerca de mi- ya debo bajar, no quiero malinterpretar las cosas- comentó camino hacia la puerta

- No, Bill para nada- dije tomando su muñeca- No quiero estar sola, quédate por favor en lo que viene Cill- sentí el impulso pero rápidamente lo solté me sentía extremadamente sola

El notó el cambio en mi rostro y me miro con una sonrisa disimulada cerrada

- y cuéntame has pensado en regresar a la universidad?- preguntó

- quisiera, pero debo cuidar a estos angelitos- dije viendo Alice y a Benjamin-.

- pero tienen bastantes personas que les ayuden, no debes ir todos los días, puedes empezar con un día a la semana- comentó entusiasta

- eso le dije a Cillian, pero el insiste que me quede con los niños y él, debe tener la razón- comenté

- No dejes tus sueños por cumplir los de alguien más Ana- comentó frente a mi

Antes que pudiera responderle entro Cillian en la habitación viéndonos frente a frente, el se quedó en silencio unos minutos en la entrada ambos lo miramos, confundió tras su rostro.

- amor, ya vamos a cantar tú cumpleaños- comento caminando hacia mi para tomar mi mano- Bill, si nos disculpas-. Mencionó serio

Bill salió de la habitación apenado

- Bill solo me estaba felicitando, ya bajo contigo amor- comenté sería tomando su mano

- trae a los niños, deben salir en las fotografías- comentó Cillian-.

- disculpa, están agotados no quiero agitarlos más - comenté

- por favor Anabelle, sera solo un momento, llamaré alguien que los cargue- comentó

-No, yo Los llevare, ya te escuché- dije seria tomándolos en brazos

Bajamos ambos con los niños en brazos para el momento del pastel, todas esas personas desconocidas para mi cantaban y coreaban mi nombre mientras otras grababan cada segundo, Cillian sostenía Benjamin mientras, yo Alice, muchas más personas me seguían felicitando, un señor se acercó a Cillian y a mi para saludarnos y Cillian me introdujo a él.

- que se siente haber logrado el sueño a los 20 años - comentó el señor

- disculpe?!- pregunté confundida a su comentario

- ya sabe, está casada con el hombre más rico de Rumania, tiene dos herederos y tan solo 20 años, que más Perfecto que eso- comentó el señor riendo junto a Cillian

Me moleste de cómo ambos reían ante su comentario, acaso yo era un chiste, acaso debía estar orgullosa de ser tratada como una arribista, me enojé mucho con el comentario y me retiré de ahí sin decir más nada

Antes de subir a mi habitación Bill llamó mi nombre

- Anabelle, estas bien?- dijo notando mi humor por mi rostro

- No conozco a estas personas ni me interesa, me iré a descansar, adiós Bill- comenté subiendo las escaleras

Deje a Alice en su cuna, y me recosté mientras unas lagrimas caían por mis ojos, me sentía tan sola, maldita sea.

Esa noche Cillian no llego a la habitación hasta la madrugada que la fiesta terminó.