Professor ( Lectora x Cillian Murphy)

Chapter 19

Almorzábamos a la orilla del lago de Cómo, usaba un vestido verde corto, combinaba con el lugar, amaba estar junto Cillian, era lo que siempre soñé.

- deberíamos quedarnos aquí, tú y yo  para siempre- comentó Cill viéndome

- así no es la vida real, debo volver a seguir estudiando- comenté frente a él

- es un simple título, yo puedo comprártelo y ya - comentó tranquilo

- No, quiero ganármelo por mi misma, aprender realmente - comenté

- como prefieras Anabelle- comentó tomando la copa de vino tinto

- No te molesta tomar tan temprano?- preguntó parecía una adición alcohólica lo que tenía

- No, no es alcoholismo me ayuda a mantenerme vivo- comentó seguro

- claro, así dicen todos- dije segura

En ese momento llegó la mesera trayendo otra copa de vino tinto

- Cillian por favor son las 11 am - comenté indignada

- toda mi vida e hecho esto Anabelle, no vas a llegar tú a cambiarlo- dijo tranquilo

- haz lo que quieras- dije sarcástica

- tráeme otra copa cariño- dijo hacía le mesera

Me indigné tanto, lo miré molesta y sorprendida diría

- de verdad te pasas- comenté de brazos cruzados

- querida- dijo llamando a la mesera- mejor tráeme la botella - comentó coqueto a la chica - si tanto te molesta puedes irte - comentó serio viéndome

De verdad que le pasaba, cuál era su maldito problema

Me levante de ahí molesta y camine hacia el baño, retoque mi lipstick y salí al lobby, solo lo vi desde ahí como conversaba coquetamente con la mesera, que le pasaba, que eran esos cambios de personalidad, cual era su problema con tratarme así, salí a la entrada, saqué un cigarro y mi encendedor no funcionaba.

Iba a regresarme a pedir uno al lobby, cuando un hombre alto de cabello oscuro se acercó a mi con uno encendido, tomé lo suficiente para encenderle y agradecí.

-Non sei di qui, vero?- preguntó el hombre con traje

- No hablo italiano- comenté mientras fumaba

- claro, no eres de aquí- menciono mientras fumaba junto a mi

- turista- comenté

- americana?- preguntó

- acaso es un interrogatorio?- pregunté

- solo me pareces curiosa- comentó el hombre

- curiosa?, usted fue quien se acercó a mi- comenté viendo la carretera

- esto no es una zona turística, no es común ver chicas como tú por aquí y más solas- comentó

Me quede callada unos segundos

-usted ni siquiera es de aquí- dije segura su acento era diferente a lo que había estado oyendo- usted no es del norte- comenté calando mi cigarro

-Sicilia, estoy en negocios aquí- comentó

- negocios?, que clase?- pregunté

- pensé que no hacíamos preguntas- dijo viéndome

- usted empezó el interrogatorio- comenté viéndolo igualmente

- exportación, un poco de todo- dijo seguro

Me quede en silencio, realmente no tenía ganas de continuar con la conversación

- viaja sola?- preguntó

- con mi esposo- dije en voz baja

- y donde está el afortunado- comentó viéndome nuevamente

Yo solo gire los ojos, apague el cigarro con la fuente que estaba frente nuestro y volvía al restaurante, el hombre sacó una tarjeta

- para lo que necesites- dijo con su tarjeta hacia mi

Lo miré unos segundos y luego la tarjeta, la tomé y me fui sin decir más nada, entre nuevamente al restaurante y el seguía en la mesa, solo, con la botella vacía y si casi igual.

- ya terminaste de alcoholizarte y molestar meseras- dije sentándome

- No pareciera que a ella le molestara- dijo levantando sus cejas

- ya cállate mejor- dije

- y qué hay de ti, terminaste de hacer amigos - dijo para luego tomar el último sorbo

-No, aún me falta llevármelo- comenté

- llevártelo a donde?- dijo confundido

- a la cama- dije molesta frente a él

El sonrió sarcásticamente y se levantó para tomarme por el brazo

- que te pasa Cill?- pregunté mientras me tomaba rápidamente

Salimos de aquel restaurante, pasamos frente al hombre con el que había estado conversando, no hice ningún tipo de contacto visual, Cill abrió la puerta del auto en el que andábamos y me tiro en el asiento, para luego entrar él por la puerta del piloto.

- que es lo que te sucede?! Sabía que te ibas alcoholizar- comenté molesta

- Anabelle, no estoy alcoholizado- dijo tranquilo

Muy convincente

- si claro y todo este espectáculo que es?- pregunté molesta

El río, recostando su cabeza al desolada y viendo el techo del vehículo, desvió su mirada del cielo a mi y luego a mi vestido corto

Tomó mi cuello rápidamente hacía él y comenzó a besarme mientras tomaba de mis caderas para colocarme encima suyo, me apretó más hacia él, mientras jugaba con su cabello y el me besaba sin parar, bajo el zipper de mi vestido, dejando mi espalda descubierta, sentí su aliento, su respiración, no estaba alcoholizado, no sentía un cambio en su aliento o realmente su actitud, estaba como si nada, comenzó a besar mi pecho mientras gemía, lentamente, me recosté de su hombro y veía cómo los vidrios del deportivo se empañaban, mi vista estaba perdida en el último asiento, y tras de este la ventanilla del mismo, sentí una mirada fija y noté aquel hombre, viéndome través de los vidrios empañados, el solo seguía fumando.

Tome el rostro de Cill y lo bese apasionadamente, luego de un rato acción note como el hombre había desaparecido, realmente no me importaba, no es como que lo fuera a ver en mi vida, Cill ayudó a ponerme mi vestido y peino mi cabello desordenado.

Había arrancado para ya irnos de ahí y continuar, el estaba tranquilo, sereno, no estaba tomado, era obvio que si lo estuviera no podría manejar.

- Cillian que fue lo que tomaste?- pregunté

- vino tinto- dijo convencido

- pero es imposible- dije confundida- estás sobrio- mencione segura de mis palabras

- supongo que el cuerpo se acostumbra Anabelle- dijo mientras manejaba

No seguí indagando, era obvio que había tomado otra cosa que no fuera vino tinto, nadie estaría así de sobrio y manejar estas curvas bien tras una botella y media, serenamente, el tomo mi mano, depositando un cálido beso y manejando sin soltarla, pero que era lo que había tomado?
Porque actuó tan extraño, que fue todo ese circo que hizo con la mesera y el hombre extraño, Cillian estaba lleno de secretos pero prefería no conocer la respuesta a ellos por mi propia felicidad, me gustaba vivir en este cuento de hadas.