♡𝑲𝒖𝒃𝒐𝒌𝒂𝒊 ♡

heaven is a bedroom

Hola lectores!💗 ¿Como están? (Feliz Navidad🎄 y próspero año nuevo🎉💞🥂) Pido unas sinceras disculpas 😔, realmente me había olvidado de la historia y había dejado esto a la deriva.🤗 Prometo que estaré actualizado más seguido. Sin más, los dejo con la historia

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Pov omnisciente:

Aren Kuboyasu tenía una vida muy desastrosa. Desde que había dejado su pandilla e intentado cambiar nada había salido bien y comenzó a juntar mucha frustración y estrés. Tenía impulsos de violencia e ira contra las personas, jamás había vuelto a lastimar a alguien, pero sus deseos de hacerlo parecían que iban a dominarlo en cualquier momento.Su única forma de escape era el sexo, para él, eso era su terapia y jamás se le había complicado conseguirlo, ya qué después de todo era un chico bastante atractivo físicamente. Sin embargo, esto solamente servía para despejar la mente por unas cuantas horas de todos sus problemas, pero no los resolvía, follar con una mujer o con un hombre cualquiera no solucionaba sus problemas mentales, no solucionaba sus problemas de ira ni sus conflictos con su padre, no solucionaba nada.

Un día, mientras iba conduciendo de camino a la escuela, pensando en qué haría ese día transmitieron por la radio la canción "heaven is a bedroom" de la banda de indie pop, Tv Girl. Al principio no le prestó atención, casi no escuchaba ese género de música y tenía demasiadas cosas en la cabeza como para concentrarse en letra de la canción. Luego de las primeras frases comenzo a prestarle más atención y notó que esta canción parecía describir su situación actual, el como se sentía constantemente insatisfecho con sus acciones y no lograba encontrar una verdadera solución a sus problemas internos.Cuando llegó a la secundaria decidio buscar el significado de la canción y analizarla más a profundidad, confirmando así que la canción parecía estar basada en el lío que se había convertido su día a día.

Pasaron las horas de clase, su cuerpo estaba sentado en su silla con su cabeza dirigida al libro que se encontraba en la pequeña mesa de madera frente a él. Sin embargo su mente no estaba allí, estaba en otro lugar reflexionado sobre sus acciones, sus impulsivas maneras de actuar cuando se encontraba muy estresado, frustrado o enojado. Estaba recordando a todas las chicas o chicos que utilizó solo para una noche de diversión y luego dejó solos en un motel;recordado a todas esas novias y novios momentáneos que tuvo, a todos las que había dejado plantados más de una vez en algún lugar sin dar explicaciones alguna de su ausencia y luego no contestar los mensajes hasta días después o directamente no contestar nunca más. También pensó nuevamente en la canción que había estado escuchado cuando llegó, por lo tanto, se preguntó si aquella banda tendría más canciones de ese estilo, quizás había otra que explicaría el como se sentía con respecto a todos sus actos pasados, una que logre expresar el arrepentimiento que sentía por haber tomado aquellas decisiones imprudentes. De igual manera, era nuevo para Aren sentirse arrepentido de algo, más de su más reciente pasatiempo, era extraño, era nuevo, pero no era desagradable, simplemente era indescriptible.

Sonó la campana para salir a almorzar, realmente no tenía hambre pero si muchas ganas de seguir con este descubrimiento sobre si mismo que estaba teniendo. Mientras iba paseándose por los pasillos de la gran secundaria PK, con dirección a la cafetería buscaba más información sobre la banda en su teléfono. Debido a esto no estaba viendo por donde caminaba y se tropezó con otro estudiante. Era un chico más bajo que él, su cabello era celeste como el cielo y parecía tener la textura de una nube, sus ojos eran dos grandes y hermosos rubíes que parecían brillar, su piel era blanca y parecía ser de porcelana, también tenía en sus brazos unas vendas rojas envueltas, no sabía que significaban pero era bastante llamativas. Debía ser el chico más hermoso que había visto en mucho tiempo, tenía una cara que parecía tallada por los dioses, quizas estaba exagerado o quizás era amor a primera vista, no era de creer en eso, pero uno nunca sabe.