El Ultimo Verano

Lo Que Hace el Despecho

     Había apostado a resignarme a terminar con Taylor, no tenía sentido seguir sufriendo, si él se va a casar y no lo puede detener ¿Para qué mentirnos? Aunque me contó todo lo que en realidad sucedía; era un matrimonio arreglado. Sus padres estaban haciendo negocios para obtener dinero de la familia de Danielis, todo sucedería si Taylor se casaba con la primogénita de uno de los mayores inversionistas de sus empresas. Necesitaban algo que los motivara a compartir su riqueza.

Seguí asistiendo a clases viendo como mis mejores amigas se reían de mí. Evitaba a Taylor en los pasillos y nos ignorábamos todo el tiempo. Me encontraba solo. Aunque me sumergí en la actuación y acepte los papeles que se me entregaban falsificando la firma de papa. Había podido aceptar la beca y ya no necesitaba la ayuda de nadie para pagar mis estudios. En ese sentido era feliz. Metiéndome en la piel de mis personajes. Olvidando mis estúpidas depresiones que me visitaban con la oscuridad. Revisaba las redes sociales y solo encontraba fotos de él con esa chica con la que debía casarse para salvar a su familia. Lloraba porque él no tenía la culpa, era una decisión que no se piensa, salvar a la familia de la ruina era el deber que si se me presentaría, tendría que asumir.

Esa noche Papa y Anthony estaban alistándose para ir a una de sus noches en la finca de prostíbulo de la mama de mi medio hermano y amante de papa. Los vi salir tan rápido que me apresure por alcanzarlos.

- ¿A dónde vas? – Le pregunte tanto a Anthony como a Papa y se sorprendieron.

- Vamos a salir, ya sabes – Dice Papa nervioso.

- ¿Puedo ir con ustedes? – Cambie de tono, no sabía cómo debía asumir lo que estaba haciendo.

- ¿Qué? – Dice Anthony boca abierta.

- Si – Dice Papa – Si quieres y no hacer un berrinche como la última vez. Ya hablamos sobre el tema. Asentí y nos fuimos juntos estaban hablando de sus hazañas de hombres y me sentí fuera de lugar, los arboles por la ventana pasaban tan rápido como para marearse y olvidar de donde provenía. Me tenía que adentrar en la conversación para no parecer indiferente.

Cuando llegamos a la finca, nos recibieron las mismas mujeres de maquillaje extravagante, vestidos cortos y vulgares. La amante de Papa cuando me vio, cambio el semblante. Nos condujeron al interior de lo que se presumía que era el intento de burdel con aires de la casa Playboy. Todas las mujeres nos miraban como presas, era su oficio. Anthony beso a una chica llamada Antonella y se alejaron. Papa no se despegaba de su amante ¿Le era fiel? bah, me daba risa el solo pensarlo, el serle fiel a una prostituta.

- Quiero a la mejor para mi hijo – Dice papa. Lo miro de arriba abajo y no sé que era "Mejor" en el vocabulario de papa.

- Anahi es mi chica estrella, es nueva y virgen – Dice. La chica tenía 15 años y no dejaba de mirar al piso. Eran unos desgraciados. Entonces mire a una rubia exagerada, que estaba operada y estaba encima de dos clientes. No sería quien destruyera la vida de Anahi.

- No. La quiero a ella – Le dije a Papa y él me sonríe.

- Ese es mi hijo – se ríe – Las experimentadas son mejores – y se va con su amante.

La mujer cuando se fue. Llego la rubia operada llamada Jimena. La típica mujerzuela sin un poco de decoro, me llevo a su habitación, cerró la puerta y se empezó a desvestir y dejo sus pechos desnudos al aire.

- ¿Así que te gusta la experiencia? – Se me acerco y me aleje - ¿Eres virgen o qué? – Me dice.

- Detente – Le dije – No voy hacer nada contigo – ella se empezó a reír – Soy gay ¿Sabes?

- ¡Ah ya! – Se reí – Y tu papa no lo sabe- negué con la cabeza mirándola para estudiarla mejor.

- Si algo de lo que he hablado en esta habitación se sabe, haré que ruede tu cabeza ¿Entiendes? – Ella se detuvo y asiente - ¿Quieres ganar dinero extra? – Dije.