Capitulo I - Vida Pasada

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Desde hace 8 años con el nacimiento de la princesa Isabel Vikt el palacio nunca había estado en silencio, siempre se podía apreciar a una pequeña niña de largo cabello negro y ojos verdes como las esmeraldas corriendo junto a su fiel perro por los pasillos de aquel inmenso lugar, sin duda todos en el palacio debieron sospechar o estar alertas de que algo muy malo pasaría ese día.

En la tarde al rededor de las 3 p.m, como todos los días la princesa iba a visitar la habitación de su madre para invitarla a dar un paseo juntas y admirar las flores, al llegar a su destino la princesa se disponía a tocar la puerta pero antes de siquiera terminar su acción logro escuchar los suaves sollozos de su madre.

También logro escuchar una distorsionada voz masculina así que con todo el cuidado del mundo pego su oreja junto a la puerta para logra escuchar mejor.

–Madre ¿Porque lloras? ¿Alguien te a ofendido? ¿O acaso fue esa meretriz? —Bramó enojada una voz, que pudo reconocer como la de su amado hermano mayor.

–Oh, mi príncipe lamento que tengas que ver a tu madre de esta manera tan patética pero no puedo evitar sufrir por culpa de tu padre y su amante, ella se atrevió a insinuar qué esta embarazada — Dijo con un tono de voz cansado la joven princesa estando del otro lado de la puerta pudo escuchar un leve suspiro salir de labios de su madre.

– Pero de ser verdad, si ella realmente esta embarazada, eso significaría que el imperio se dividirá en dos, aquellos que me apoyan a mi y aquellos que apoyarán a ese príncipe bastardo con tal de tener un títere al cual manipular. — Hablo su hermano con preocupación en la voz, pudo escuchar como su hermano se levantaba del sillón donde estaba para poder sentarse junto a su madre.

–Eso es lo que más me preocupa, de pasar eso tratarían de atentar no solo contra tu vida o la mía, si no que también contra la vida de Sissy. — Luego de decir esas palabras su madre lloro un poco más, realmente  imaginar un mundo donde su madre o su hermano no esten con ella la hacía enojar pero lo que más le hizo la sangre hervir fue escuchar a su madre llorar.

Sabía que ella no tenía que escuchar esa conversación y que escuchar a escondidas era de mala educación, pero ¿a quien le importan los modales y la educación cuando su madre esta llorando por culpa de esa mujer?, sabía que esa mujer era culpable de la desdicha de su madre y también sabía que su padre era tan culpable como ella. Pero castigará a su padre sin abrazos por un mes y pediría que echaran a esa mujer.

Camino a pasa veloz para ir a la oficina donde su padre trabajaba, pero al cruzar por un pasillo qué daba hacia un lago logro divisar a lo lejos a la maldita bruja, como su madre solía decirle, paseando a la orilla de aquel lago así que ni corta ni perezosa cambio su dirección para hablar con ella.

– Lady Alyssia qué desagradable sorpresa verla por aquí. — Exprese mientras trataba de regularizar mi respiración debido a todo lo que tuve que caminar.

–Hoho, princesa parece que la emperatriz no le enseña modales a sus hijos, eso es algo que yo no haré con el mio desde el primer momento en que nazca será un digno heredero. — Rio cínicamente mientras miraba con burla a la princesa, no le tenía miedo a las represalias pues sabía que el emperador la amaba y jamás le daría un castigó, si se podía burlar de la emperatriz ¿por que no también de la princesa?.

–Me das lastima Lady Alyssia, así que le daré un consejo, no importa cuanto se esfuerce o cuanto lo intente escuche lo que diré, nunca sera más de lo que es solo una amante, no importa si tienes uno, dos o incluso diez hijos del emperador ellos solo serán príncipes, los herederos al trono solo serán los hijos de la emperatriz y si por casualidad alguno de ellos llegara hacer candidato al trono yo misma los matare. — Le dije mientras le daba una sonrisa burlona no importa cuanto se esfuerce por sobresalir siempre viviría a la sombra de mi madre luego de decir aquello me di la vuelta dispuesta a buscar a mi padre pero me detuve al sentir un fuerte dolor en mi brazo.

Isabel Vikt Donde viven las historias. Descúbrelo ahora