Bleach One-Shot

Familia (Unohana x Kempachi)

Advertencia: universo alternativo

Isane recordaba con total claridad el día que la había conocido, asustada y empapada abrazaba a su hermana menor Kiyone, el personal sanitario corría de un lado a otro con perfecta sincronía a pesar del aparente caos que reinaba a su alrededor, vio como la camilla donde iba su padre entrar por urgencias en el hospital frente al que se encontraban. En aquel momento su cerebro no podía procesar correctamente que acababan de sobrevivir, prácticamente ilesas a ese terrible descarrilamiento al igual que tampoco procesaba que iba a ser de sus padre.

Escuchó como su hermana la hacia una pregunta, pero no logró hacer que las palabras tomasen suficiente consciencia como para poder responderla y Kiyone en vista de todo lo que estaba sucediendo simplemente abrazó con más fuerza a su hermana mientras comenzaba a sollozar. Isane sintiendo como su hermana menos empezaba a temblar reaccionó, apartándola del aparcamiento del hospital donde más ambulancias seguían llegando y donde pronto su presencia comenzaría a ser molesta.

Se hizo un hueco junto a su hermana en la sala de espera, la etiqueta que les habían colocado a ambas durante el triaje en el lugar del accidente las catalogaba como heridas leves por lo que tendrían que esperar a ser atendidas cuando lo peor hubiera pasado. Tuvo que esperar un buen rato hasta que sintió como alguien la llamaba y una mano se posaba suavemente en su hombro.

- ¿Eres Isane Kotetsu? – la de cabellos plateados asintió lentamente mientras su hermana pequeña miraba a la mujer con ojos curiosos.

- Ella es Kiyone, mi hermana menor – la mujer la miró con una expresión de amabilidad en su rostro, llevaba su pelo negro recogido en un trenza de la que se habían escapado algunos cabellos rebeldes posiblemente por el ajetreo que habían tenido, su bata la identificaba como médico de aquel hospital.

- Soy Unohana Retsu, siento que hayáis tenido que esperar tanto ¿Vuestro padre es Isenai Kotetsu? – ambas hermanas asintieron, Kiyone instintivamente agarró la mano de su hermana mayor sin quitar los ojos de encima de aquella mujer – siento comunicaros que ha entrado en coma, estamos a la espera de ver cómo evoluciona, pero el pronóstico, no es bueno.

Isane sintió que todo su mundo se venia abajo, pudo escuchar como su hermana pequeña se echaba llorar sobre su regazó y posó su mano en la cabeza de la menor, como si aquello fuera a servir de consuelo. La mujer no dijo nada quedándose con ambas hasta que recuperaron un poco la calma y pudo acompañarlas a uno de los boxes para atenderlas.

Después de aquello los días no fueron sencillos para las hermanas, Isane tenía 16 años y Kiyone 12, habían perdido a su madre hacia casi 5 años debido a una enfermedad, desde ese día su padre se había convertido en su único apoyo y en el centro de su núcleo familiar y ahora él estaba a las puertas de la muerte. Los días fueron pasando y no hubo ni uno en el que no estuviera acompañada por aquella doctora con la que termino estrechando lazos, quizá por el parecido con su madre o quizá porque Isane siempre había querido ser médico y sentía que había encontrado en aquella mujer un modelo a seguir.

Un mes y medio más tarde del accidente el padre de Isane falleció, lo cual puso en una complicada situación a ambas hermanas, ya no solo por tener que lidiar con la perdida de un padre sino que había que añadirle la necesidad de encontrarles una casa estable, aquellas semanas se habían quedado bajo la tutela provisional de su abuela paterna pero era una mujer muy mayor con una pensión ridícula y que no podía hacerse cargo de ambas por mucho que la doliese en el alma.

Fue allí donde entró Unohana Retsu, el vinculó de afinidad que se había formado con las chicas había sido en ambos sentidos por lo que rápidamente en cuanto se enteró del fallecimiento y de las dificultades económicas de la abuela de Isane y Kiyone decidió convertirse en la tutora legal de ambas niñas. Muchos lo consideraron una locura, pero sus mejores amigos Kyoraku Shunsui y Juushiro Ukitake decidieron apoyarla y ayudarla durante el proceso pues ellos habían pasado por una situación legal similar cuando estaban luchando por formar su propia familia.