Filocalista

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04/01/2025-10AM

Cuando lo miras por primera vez y sientes aquel amor que muchos sienten, amor a primera vista, eso me pasa cada vez que lo miro, lo quiero, me encanta, si o si debe ser mío y no me importa si le debo quitar a una chica frente a sus ojos, es algo que no puedo evitar u olvidar así de fácil, amarlo con solo verlo y lo fantástico que se vería en mí, exacto, eso siento yo cuando veo los tacones indicados para mi outfit.

Dove estaba frente al mostrador admirando el material, brillo, diseño bueno, todo lo hermoso que eran los tacones, esos tacones debían ser suyos, camino directo a la entrada de la tienda como sospechaba ella no era la única que quería esos tacones —Lo siento, lo siento— Decía mientras empujaba a las personas que quería quitarle la última unidad–Disculpa puede soltarlos?—Dijo ella tenía los tacones en sus manos y no solo ella, otra chica también los quería.

—Lo siento, pero yo los vi primero—Habló la chica, fui amable, ahora voy a pelear por ellos, pensó Dove, se aventó hacia la chica, tal vez algún otro golpe se dieron o jalarse el pelo, pero lo había conseguido eran solo suyos ahora.

—Disculpe, quiero pagar por estos tacones—Habló Dove estaba en el mostrador dando su mejor sonrisa ignorando que se agarró a golpes con una chica hace un rato, es lo más normal se podría decir.

—Claro, son 480 centenal—Hablo la señorita todo normal claro como ella no iba a pagar, Dove sacó una tarjeta de crédito, rezaba que no se había acabado el dinero—Pasa, tome quiere donar o—La señorita se tuvo que callar porque Dove se fue de inmediato del lugar, necesitaba ir rápido a comprar las cosas que le pidió Lía y Leonardo explícitamente, que debía haber comprado hace rato haber tenía la labradorita del mundo humano, mayormente para este tipo de cosas venían del mundo humano o debía irse a un pueblo de brujos, hechiceros y magos que son diferentes, también tenía sal de mar y velas blancas.

Le faltaba tres ingredientes más para ir directo a casa de Lía, escama de tritón, lágrimas de la luna y azabache es lo que faltaba, le llamó la atención que la llamaran así que contesto.

—Qué paso Lía—Hablo Dove.

—Leonardo me dijo que él va a salir en la noche con Dexter, así que por el camino va a conseguir lágrimas de la luna—Habló ella y la dejó en duda.

—¿Cómo rayos la luna llora o algo así?—Pregunto Dove, Lía se quedó callada ni ella sabía como era algo posible, pero mejor es saber menos—Ni siquiera yo sé cómo eso puede ser posible, Dove, me tengo que ir Víctor me está llamando vuelve pronto—Y corto, Dove miro al frente su camino, estaba decidido iba a mirar una película junto a Lía.

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12 PM
—Y después de esto, ¿Qué vamos a hacer?—Hablo Dexter, estaba aburrido el día más porque su hermana está en la ciudad, odiaba cuando tenía un viaje de negocios porque así no podría molestar a nadie, bueno, eso era antes, ahora tiene a Valentino.

—No lo sé, me podrías decir tú por qué te la pasas vigilándome un buen rato—Se quejó Dexter, no podría creer que existe alguien peor que David, quería a David, es un buen amigo, pero, le estresaba mucho su personalidad y no solo eso, tenía demasiada energía para una persona introvertida como él—Si estás aburrido puedes hacer tu trabajo—Le sugerí eso a Dexter, este me miro y yo lo mire, no pude evitar en pensar en una canción, pero este se miró más aburrido por lo que dije.

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