// En secreto~...// -/ Contryhumans/- // Usa x Perú, Chile x ale ,Rusmex //

//No veo necesidad de finjir...//

El mexicano se encontraba cansado-estresado, pues no había tenido contacto con el chileno después de que el argentino le haya contado lo que había pasado ...

¿¡Haber... como chingados se le ocurre a ese pendejo hacer eso?!, que no leyó el ¿¡expediente de Alemania o que!? — dijo molesto mirando al contrario y para colmo no tenía noticias del peruano, ¿que acaso se habían vuelto más bestias que antes o que? Se preguntó el mexicano caminando en círculos hasta que sintió que alguien tocaba la puerta, se acercó a esta y la abrió... — ehh... tu que... haces acá?

Hola.. Mexico no? Bien ven... vamos a hablar tú y yo... a solas... — dijo el ruso mirando de mala gana al Argentino pero a la vez parecía portar una... ¿una sonrisa?... era una muy leve pero la tenía, era una sonrisa escalofriante que hacía estremecer a cualquiera... como si tuviera un plan... por parte del ruso en sus pensamientos solo había una pequeña oración... "no veo necesidad que sigas fingiendo.."... pero claramente no iba a decirle pues sabe que el menor estaría a la defensa, por otro lado el mexicano vio al argentino y este solo asintió para luego estrechar la mano con el Mexicano pero era para colocarle un GPS diminuto.

Esta bien... iré contigo... — dijo mirándolo a los ojos para luego salir con el ruso, al Argentino no le gustaba nada la idea de que su compañero se vaya solo sin embargo le calmaba que él tuviera un GPS

Bien... que deseas? — dijo directo el Mexicano algo nervioso sin embargo no iba a mostrar dicho sentimiento... más bien se había puesto nervioso pues estaba frente a una casa que se veía abandonada

Xaxa no te pongas así.. — dijo riendo el ruso mirándolo de reojo al mexicano, pues el estaba atento, observando hasta el mismo movimiento de este notando como sus hombros se habían tensado levemente — pero al igual que tú eres directo lo seré yo, más bien.. quiero hacer un trato contigo...

...trato?... — dijo mirándolo a los ojos deteniéndose en mitad de camino viéndolo a los ojos... pero... esos ojos... mejor dicho esa mirada.. hacía sentir un gran extasis , esa mirada era tan sexy que lo desnudaba a sí sin más, el ruso al norte eso por el aroma que libro él omega solo sonrió acercándose y tomando su mentón quedando cerca su rostro con el suyo.. rozando sus labios el uno con el otro... mierda que excitante se veía el ruso a los ojos del mexicano.. sin embargo reaccionó entrando en razón sonriendo ladinamente — déjate de rodeos Rusia... dime ahora que trato quieres... y lo principal, saber que gano

Eres interesante omega~.. — dijo sonriendo mordiendo el inferior de su labio para luego alejarse del rostro del sudamericano — pero Bueno te lo dire... pero antes ten — dijo sonriendo... el menor alfin entendió.. no se habían quedado en mitad de camino, si no que el propósito y la parada final era dicha casa... a la vez que miro esa pastilla... y allí pensó lo peor... el Alemán los había visto, pues esas pastillas.. era solo para revertir el efecto... — entra y tómatela... no veo necesario el hecho que sigas fingiendo dulzura...

Ah... — el mexicano trago saliva entrando con el seño fruncido, pese afuera verse horrible la casa... por adentro se veía elegante pero tampoco tan llamativo... se miró al espejo y se tomó la pastilla... fue cuestión de segundos para que de su espalda hallan brotado dos inmensas alas de águila, alas suaves y majestuosas a la vista de cualquiera — bien... supongo que ya no es necesario fingir... y si tú lo sabes supongo que...

America sabe?... si él sabe muy bien... de echo ahora debe estar con... Perú?... bueno eso no interesa... — dijo acercándose por la espalda del mexicano acariciando sus hombros haciendo que él omega se tense haciendo que sus alas se bajen un poco — te dire de frente Mexico, quiero saber que hacen acá ustedes... como esque son... esto y pues te ayudaré a recuperar a Chile...

Que ganas tu Rusia?... — dijo mirándolo desde el espejo hasta que sintió como el ruso tocaba sus alas delicadamente — no... ni se te ocurra que.. — ya era muy tarde, el sovietico lo había tirado al sillón que estaba al costado

Sabes... estuve con varios omegas pero... el echo que tengas alas o seas diferente... no sabes cuánto me exci- — el no pudo terminar la frase pues sintió como el mexicano le pego una patada en la entre pierna y rápido se levantó cambiando de posiciones quedando este encima del ruso tirándolo al suelo — Rusia querido... y yo que pensé que tendríamos un trato sin embargo parece que no... pero...  lo que sí me interesa es el de que me ayudes a recuperar a mi herma-... — rápido se tapo la boca con una de sus alas

Her-hermano... — dijo mirándolo con una sonrisa sin querer mostrar el dolor en su 3ra pierna — bi-bien en ese caso... empieza por soltarme y.... Hablemos de negocios...

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