¡¿Novios?! ¡¿Tú y yo?!

3. La desición

Al parecer los periodistas se habían cansado de estar ahí sin noticias, eso tranquilizó un poco a Marinette, quien estuvo un rato dibujando en las sillas mientras esperaba, hasta que vió una figura conocida acercandosé, había perdido la noción del tiempo, ya eran las diez de la noche, y ya él venía en camino.

 —Hola Marinette— saludó entrando de una vez al balcón

 —Hola Chat— contestó dando un suspiro y dejando su cuaderno de lado, se levantó y se recostó en el barandal 

—Aquí tienes tu chocolate de Londres— dijo Chat mostrandoselo, le costó mucho desprenderse de él, ahora solo le quedan tres

 —¡Si fuiste! Gracias— tomó el chocolate y lo abrazó a modo de agradecimiento, pero ahí cayó en cuenta de algo 

—Chat, se que lo estoy diciendo de manera muy directa, pero es mejor empezar a hablarlo ahora, esto debe de parar, no podemos seguir en esta situación, es decir, ¡¿Novios?! ¡¿Tú y yo?!— exclamó la chica mirando al rubio a los ojos

 —¿Te suena tan descabellado?— preguntó acercandose a ella 

—No lo sé— se limitó a contestar, no sabía si él lo decía en broma o no, si no lo era, la verdad es que no le desagradaba para nada la idea —Pero no lo somos, ni siquiera mis padres me creen, dicen que simplemente lo estoy negando— ella suspiró cansada 

—Tengo una loca idea— dijo Chat Noir sentandose en una de las sillas 

—Te escucho, a estas alturas aceptaría cualquier cosa— contestó sentandosé a su lado 

—Normalmente cuando un famoso tiene una pareja hacen revuelo, noticias y chismes, pero en cuanto pasa una semana se olvidan de eso, podriamos decir que es cierto, tal vez te persigan por unos días, porque si lo negamos como hiciste con tus padres pasará lo mismo, te acosaran diciendo que lo niegas y a mi también, no quiero que te pase eso, sé que es lo que te persigan por la calle, o que te hagan un millón de preguntas que realmente no quieres contestar— explicó tomandola de la mano a manera de apoyo 

—Mis padres van a pensar que soy una mentirosa— dijo aunque fue más para si misma 

—¿Es raro que piense que si tiene logica?— le preguntó ella sin soltar su mano 

—Yo fuí el de la idea, no me preguntes— ambos rieron un poco ante la situación tan tonta 

—Bien hagamoslo— accedió, haría lo que fuera por deshacerse de los paparazzis 

—Entonces, novia falsa, ¿Cuando daremos la noticia?— preguntó soltandose de la mano y levantandose, ella también lo hizo 

—Mañana, cuando vuelva a ver un paparazzi en la puerta de mi casa— dijo de manera un tanto jocosa pero al mismo tiempo estaba hablando en serio 

—¿Quieres que venga a ayudarte?— preguntó, sabía que al confirmarlo harían más preguntas 

—Porfavor, ¿después podrias llevarme a la escuela?— pidió intentando no sonar desesperada 

—Seguro, no te preocupes por eso— era una situación estupida, pero tenían miedo de que les afecte 

—¿Otra partida de SpeedStorm?— cuestionó queriendo cambiar el tema 

—No preguntes y entremos ya a tu habitación— contestó abriendo la trampilla y ayudandola a entrar.

Al momento de despedirse, la chica abrazó a Chat, como siempre, y él respondió el abrazo para luego darle un beso en la mejilla 

—¡Marinette!— exclamó Tom viendo la escena 

—No puede ser— murmuró ella y dió un suspiro 

—Vamos a hablar sobre esto mañana— avisó para irse, el rubio estaba aterrado, tuvo recuerdos de ese día (weredad)

—Sé que acordamos fingir todo esto, pero tu padre me va a matar— dijo Chat Noir separandose del abrazo 

—Tranquilo, se le pasará— mencionó a lo que ambos sonrieron y el heroé se fue.

—Buenos días mamá, tengo algo que decirte a ti y a papá— dijo ella ya lista para irse, pero era temprano y tenía tiempo, sus padres se sentaron sin decir una palabra

 —Chat Noir y yo somos novios, tenian razón, pero no he estado con él, es un noviazgo normal, solo vemos peliculas, hablamos, jugamos videojuegos, es lo único que hacemos— explicó, todo era verdad, a excepción de que eran pareja 

—Marinette, ¿Eres consciente que estás a solas con tu novio, en tu habitación hasta altas horas de la noche sin que nosotros nos demos cuenta? Ayer, no... Más bien, hoy en la madrugada, tu papá te encontró abrazada a él de manera muy sugerente ¡y te estaba dando un beso!— explicó Sabine mirandola fijamente 

—Era uno en la mejilla, no tiene nada de malo— contestó defendiendose, no quería seguir peleando con sus padres 

—Claro uno en la mejilla ¿Y cual viene después? El problema es que no sabiamos que venía, si quieres seguir viendote con Chat Noir solo tienes que traerlo y presentarlo como tu novio oficial— Marinette los vió, no quería involucrarlos en esta mentira, pero sabía que se iban a negar 

—Esta bien, hablaré con él— accedió y se fue más tranquila.

Al llegar a la puerta habían periodistas como todas las mañanas, suspiró y salió, logro ver a Chat Noir en un tejado cercano, estaba nerviosa, a pesar de todo él llegó, la tomó del brazo acercandola a él 

—¿Lista?— le susurró cerca del oído, ella asintió 

—Muy bien, escuchen todos, les presento a mi novia, ya lo oficializamos— hizo una pausa y le dio un beso en la mejilla mientras la abrazaba 

—pero les pido el favor no hacerle la vida imposible, esto es considerado acoso, si quieren hacernos cualquier pregunta programen una entrevista, pero no más de esto— pidió a lo que cargó a Marinette al estilo nupcial y se fueron de tejado en tejado, si que habían reporteros en la zona

 —Bien, esperemos que funcione, si no voy a tener que romperte el corazón— dijo Chat de manera jocosa mientras corria 

—¿Por qué tu me tienes que romper el corazón? ¿Por qué no yo?— le preguntó a manera de broma 

—Sabes a lo que me refiero, tendremos que terminar si no te dejan en paz— la bajó en la puerta de la escuela 

—En algún momento tendra que ser, pero por el momento espero que funcione, gracias por todo— se acercó un poco a él

 —¿Debería abrazarte para que sea creíble?— murmuró a lo que él sonrió 

—No es necesario, princesa— dijo para irse 

—Adiós— se despidió para irse con una sonrisa un tanto tonta.

—¡Por eso no querías contestar las preguntas! Si son novios— exclamó Alya de manera alegre abrazando a su amiga 

—Si, lo somos, no quiero contestar nada, porfavor, ya estoy harta de los periodistas y paparazzis, para que mis amigos también lo hagan— dijo queriendo evitar cualquier pregunta 

—Tranquila, entiendo— ambas entraron al salón y todos la quedaron mirando 

—Te odio Chat Noir— susurró para si, ¿Por qué había aceptado esa loca idea?

 —Mentira, lo quieres, si no, no estaría pasando eso— murmuró Alya y se sentaron en su puesto habitual.

Luego del descanso, Adrien entró y se quedó viendo a la azabache, debe de admitir que antes de toda esa locura le gustaba, y podría darle indirectas escudandose en esa mentira 

—Marinette, alguien me dijo que te diera esta nota— dijo entregandole un papel 

—¿Alguien?— se preguntó tomandolo —Gracias— lo abrió y decía: "Sé que esto es raro, pero necesitaba una forma segura de decirte que nos veamos en la torre eiffel hoy a las 8:30 p.m. -Chat Noir."  La chica sonrió como tonta, antes de toda esa locura le gustaba Chat Noir, tal vez por eso accedio a esa idea extraña 

—¿Es de quien creo que es?— preguntó Alya al ver la sonrisa de la chica 

—Solo cierra la boca— contestó sin borrar su sonrisa.