CAPÍTULO 11.

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ARCO 3: KATANA MAN.

ARCO 3: KATANA MAN

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CAOS.

Haruki sonrió después de tomar un sorbo de su taza de café, finalmente feliz de dejar a un lado la dichosa cafetera de la oficina por una buena bebida

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Haruki sonrió después de tomar un sorbo de su taza de café, finalmente feliz de dejar a un lado la dichosa cafetera de la oficina por una buena bebida. Por supuesto él no había pagado por ella, porque tras lograr convencer a Kishibe de que necesitaba un descanso de todo el papeleo acumulado esa semana, el mayor sintió algo de pena por su compañero y accedió a invitarlo a tomar café. Era extraño ver a su superior con algo que no fuera una botella de alcohol entre manos, lo que le hizo recordar al castaño que no siguiera su ejemplo y que jamás tomara ni una sola gota de alcohol en su vida.

━Kishibe-san, ¿no cree que el café es mucho mejor que el alcohol? Su hígado le agradecería un cambio, la verdad.━comentó mirándolo de reojo, a lo que este rodó los ojos.

━El café me hace estar despierto, que es exactamente lo contrario a lo que quiero.━respondió dejando a un lado la taza sin haber tomado ni una sola gota de esta. El ojiverde imitó su gesto, pero a diferencia de él su taza estaba completamente vacía.━Tampoco viviré muchos años más, deja que este viejo sea feliz bebiendo...

El Okumura estuvo a punto de contestar en contra de las palabras de su superior. No obstante, su atención se desvió por completo cuándo notó a otro cliente sacar un arma de su chaqueta. Su cuerpo reaccionó de inmediato y tan pronto como puso un pie en el suelo, congeló al momento a aquellos criminales y los gritos de horror y miedo no tardaron en hacerse presencia. El castaño frunció el ceño confundido, preguntándose dónde diablos habían conseguido armas de fuego simples civiles, puesto que llevaban prohibidas mucho tiempo por cierto demonio.

━Yo me encargaré de evacuar la zona y revisar que no hay más psicópatas sueltos con armas...━soltó un suspiro Kishibe, cansado de trabajo.

━Cómo esto sea cosa del Demonio Pistola, voy a estar realmente molesto.━murmuró el castaño tras fruncir el ceño.━¿Y bien, algo que declarar?━le preguntó a los sujetos que había congelado, al menos hasta el cuello para que no pudieran disparar en lo absoluto.

━El Demonio Pistola... el Demonio Pistola quiere tu cuerpo.━respondió uno de ellos, y Haru sintió la necesidad de congelarlo por completo para que cerrara la boca. 

Y realmente se encontraba molesto, apenas había podido dormir bien desde el incidente del Demonio de la Eternidad y ahora tenía que preguntarse porqué estaban tras su cuerpo. Ya tenía suficiente con Denji queriéndolo, no le apetecía tener un séquito de demonios y asesinos tras su cuerpo que lo tuvieran más tiempo ocupado. Le era un verdadero misterio el porqué era un objetivo tan buscado cuándo simplemente era un oficinista aburrido que tenía qué hacer guardia por las calles. 

Sin embargo, de repente notó una extraña sensación en su pecho y su respiración comenzó a entrecortarse. Sumado a eso sintió un fuerte dolor de cabeza que comenzó a repartirse por todo su cuerpo. Por la mirada de los criminales, era claro que habían envenenado el café que se acababa de tomar, pero no era nada que no pudiera tener bajo control. Tampoco era la primera vez que le sucedía si era completamente sincero y no parecía ser un veneno mortal.

━Bien, ¿quién ha sido el graciosito que me ha arruinado la hora del café?━cuestionó acercándose a estos con una sonrisa fingida, haciendo que los contrarios comenzaran a plantearse si había sido buena idea seguir las órdenes de envenenarlo para comprobar si averiguaban el detonante de su cuerpo.━No voy a perdonar a nadie, y ya que no podéis correr, eso me da la ventaja...

Aunque el Okumura no tenía buenas intenciones, para nada, su sermón fue interrumpido por la repentina muerte de los criminales. Estos explotaron en su cara sin que hubiera tenido que hacer nada, y el castaño parpadeó repetidas veces, sin saber si sentirse sorprendido o asqueado por toda la sangre con la que acabó empapado. Quizás se declinaría más por la segunda, porque ya había visto muchas cosas extraordinarias en su corta vida. 

━La policía llegará pronto, será mejor que esos se mantengan con vida para servir como testigos y...━dijo Kishibe entrando nuevamente en la escena, pero tuvo que detenerse al ver el caos de sangre y hielo en el lugar. Miró de reojo al menor, quién aún parecía estar en un trance preguntándose qué diablos había pasado.━Haruki, no quiero ser entrometido, ¿pero no deberías solucionar tus problemas de ira de otra forma?━preguntó preocupado.

━¡¡No tengo problemas de ira, y yo no los he matado!!━reaccionó por fin el ojiverde, tratando de retirar la sangre de su rostro.━¡Explotaron en mi cara, no tengo idea de porqué! ¡Y además me envenenaron el café!━soltó molesto y aún con el ceño fruncido.━¡Solo sé que no pienso limpiar todo esto!

Kishibe no respondió a los arrebatos de ira del chico y simplemente atendió la llamada de teléfono, recibiendo una muy mala noticia.  Todas las divisiones habían sido prácticamente asesinadas excepto por una renuncia, Denji, Kobeni, Power y un Aki malherido en el hospital, y por supuesto Haruki, que tenía el día libre por permiso del propio jefe que lo acompañaba. 

━Oh...━murmuró el Okumura al enterarse de la noticia.━Quizás, si no me hubiera tomado el día libre...━pensó desviando la mirada, sintiendo algo de pena por la pérdida de sus compañeros. Pero en el fondo, tan solo pensaba que eso no era más que una molestia para contratar nuevos cazadores y más papeleo todavía.

━No digas eso. Te lo merecías.━respondió Kishibe para por fin sacar su bebida alcohólica.━Lo importante ahora es averiguar porqué el Demonio Pistola os quiere tanto a ti como a ese tal Denji...━suspiró tras darle un trago al sake.

━Aún es un novato. Él y Power apenas tienen experiencia.━respondió tratando de sacar la sangre de su bufanda, a la que por supuesto tendría que darle un buen lavado.━¿No le parece que tendría que entrenarlos, Kishibe-san? No puedo pensar en un mejor maestro.━sugirió, a lo que este se le quedó mirando incrédulo.

━¿Pretendes que entrene a un par de demonios de pacotilla?━preguntó, a lo que este simplemente asintió.

Kishibe no tuvo más opción que hacer caso a la petición de Haruki, el cuál pasó el resto de su tan esperado y caótico día libre rodeado de papeles relacionados con los incidentes de todas las divisiones y los fallecidos. Le hubiera gustado visitar a Aki, dar su pésame por la muerte de Himeno y comprobar cómo se encontraban los novatos. Pero nuevamente estaba atascado en la maldita oficina sin poder mover ni un dedo.

━Ah... tan solo espero que Denji y Power estén bien.━se lamentó por lo bajo no poder acompañarlos. 

Al menos pensó que pasaría el resto del día algo más tranquilo... al menos, hasta que Makima lo llamó a su oficina.

 al menos, hasta que Makima lo llamó a su oficina

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❛WINTER❜ → CSMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora