C A P I T U L O | 10

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Fiesta

Rebecca volvió a su rutina de entrenamiento, se despertaba antes del amanecer intentando no mover a su esposa o causar algún escandalo con el personal de servicio: sus heridas ya se veían muy poco y había comenzado a hacer ejercicio para que su memoria muscular recordara el esfuerzo.

Esa mañana con suavidad, se deslizó fuera de la cama sin despertar a su esposa y se vistió con ropa cómoda. La lujosa villa se llenó de la suave luz del amanecer, lo que la animó a explorar la isla en silencio antes de que el mundo despertara por completo, decidió correr hasta el mercado porque tenía ganas de comer algo diferente, le gustaba todo lo que comía en la isla y lo que Sarocha le había mostrado pero ansiaba un desayuno ingles como el que solía tener en su casa.

Salió al aire fresco de la mañana y trotó por los senderos rodeados de vegetación exuberante que la llevaron al pequeño mercado que le había mostrado su esposa la primera vez. El mercado aún estaba tranquilo, con los vendedores preparándose para un nuevo día.

Las cestas de frutas y verduras frescas se alineaban en los puestos, y Rebecca no pudo resistirse a probar una jugosa piña que le ofreció un vendedor. El aroma de las hierbas frescas, como la menta y el cilantro, impregnaba el aire, creando un ambiente fragante y acogedor.

Rebecca observó con interés cómo algunos vendedores preparaban platos de comida, mientras otros exhibían artesanías tradicionales, joyas brillantes y sedas coloridas. Preguntó por las cosas que le faltaban para su desayuno y cuando estuvo completamente cargada se topó con dos primos Chankimha: si recordaba bien eran Saranya y otra chica a la que no conocía

—Hola Becky, no esperaba verte aquí

Cada medio día, los primos Chankimha tenían una bendición colectiva ya fuera de manera individual o en pareja

—Lo sé, todavía no nos dan la bendición— Saranya asintió

—Por cierto, ella es mi hermana Sanouk

La presentación se llevó a cabo y Rebecca se acercó a saludar de manera occidental pero fue recibida con una reverencia

—Nong Rebecca, es un gusto conocerla

—El gusto es mío, alteza— la menor decidió ser respetuosa de esa chica que parecía rechazar cualquier interacción social con ella

—Espero no le moleste pero debo retirarme — Becky hizo una reverencia y vio a la chica irse con un hombre

—No te preocupes, siempre es así. Mi hermana intenta ser la princesa perfecta

—Es lo que veo, es muy buena tomando del brazo a su esposo

—No solo eso, es una esposa dócil y obediente

—¿Y qué me dices de ti Saranya?

—Sarocha y yo tenemos una personalidad muy parecida con nuestras relaciones, somos un tanto independientes y amamos el romance. Nos gusta que nos consientan aunque nunca lo diremos y somos un tanto competitivas

—¿Sarocha ya tuvo antes otras parejas?— por alguna razón aunque Becky no quisiera involucrarse ese tema le pareció interesante

—A lo mejor tuvo dos relaciones formales muy cortas en secreto y un enrollo de una noche...— Becky agachó la cabeza— Sarocha es virgen si eso es lo que te preocupa pero creo que no pareces nada sorprendida

—Yo...

—A ella le alegraría estar con alguien que supiera lo que hace— Saranya habló en voz baja— pareces una chica con experiencia, por eso también asustaste a mi hermana

(PAUSADA) Seré tuya, princesa ┊Freenbecky ┊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora