In another life.

02

"Padre, no es buena idea entrar a ese lugar. Las criaturas oscuras podrían acabar con todos. Ambos sabemos que esto es un suicidio, déjame crearte una cura, por favor." suplicaba el príncipe.

Su padre y a la vez rey, tenía una enfermedad incurable, así que quería que consiguieran una de las 12 flores de la vida. Que únicamente se encontraban en aquel reino, Cataratas del Paraíso, dentro del castillo negro, el cual se encontraba en la montaña más grande de ese lugar.

"Ya está tomada mi decisión, Jungkook. Tú también irás, sé que si vas, la misión no fallará. Y usted, solado Min, cuide de mi hijo." dicho esto, todos hicieron una leve reverencia y salieron de la habitación del rey.

"Príncipe, es muy peligroso que usted vaya. Le sugiero que se quede, no se preocupe por nosotros." dijo el capitán Min, después de subirse a su caballo.

"Capitán Min, no desobedezca las órdenes que le dio mi padre." Jungkook también subió a su caballo, y empezó a cabalgar.

Si bien, no estaba de acuerdo con su padre, de hecho, nunca lo ha estado, pero tiene que obedecer a fin de cuentas. Así que, con sus nervios de punta, y su corazón latiendo a mil, empezaron el trayecto hacia ese lugar.

Se detuvieron en lo único que los alejaba del otro extremo; un río con un puente en muy malas condiciones.

Se bajaron de sus caballos, y con mucho cuidado y silencio, empezaron a caminar sobre ese puente.

Si hacían ruido, una criatura monstruosa saldría del río y se los llevaría a quién sabe dónde. No los mataba, eso lo sabían.
Siempre encontraban cadáveres flotando por esas aguas.
Esa cosa los torturaba y mataba de la peor manera, pero nunca se los comía.

Cruzaron todos el puente sanos y salvos y todos sonrieron aliviados por ello.

Siguieron caminando hasta llegar a un lago, muchas criaturas estaban reunidas ahí así que se escondieron en los árboles y arbustos.

"¿Qué crees que nos tengan preparado para este año? ¡Espero los andis cuenten otras de sus maravillosas historias!" expresó una hada diminuta, pero con un gran entusiasmo.

"¡Ojalá! Pero sólo espero poder ver al guardián, ¡es tan hermoso!" dijo otra hada mientras un leve sonrojo se asomaba en sus mejillas.

Jungkook escuchaba aquella conversación.
¿Un guardián? Nunca había escuchado hablar de un guardián.
¿Cómo será?

Jungkook dejó de pensar en eso cuando el capitán Min le avisó que ya podían seguir avanzando.

Caminaron por bastante tiempo, y por fin habían llegado al castillo negro, pero para su desgracia, estaba lleno de criaturas oscuras, blancas, mágicas y también especiales. Todos los habitantes de Cataratas del Paraíso estaban ahí.

Los guardias y Jungkook incluyendo, maldijeron por lo bajo y volvieron a esconderse.

"¿Qué crees que vayan a hacer? Creo que escuché algo sobre una celebración" dijo Min.

"No lo sé, sólo espero no se demoren. Ya me quiero ir de aquí."

"Nos matarán si seguimos aquí." susurró otro.

"No digas eso, que no falta ni un poquito de que se den cuenta, ¡mira no más dónde nos escondimos!" todos los guardias empezaron a asustarse y a hablar. Ya no querían seguir ahí.

Jungkook los volteó a ver furioso, y con eso, todos se quedaron callados.

"¡Criaturas mágicas de la creación, es un placer para nosotros hacerles este pequeño espectáculo para conmemorar que las 12 flores de la vida siguen dándonos salud, vida y sobre todo paz y tranquilidad!" un chico de cabello castaño salió a decir aquellas palabras, y aunque pareciera normal, no lo era.