In another life.

08

Día 6 de 50.

"¡¿Qué mierda está pasando?!" Yoongi gritó, saliendo alterado al sentir como la tierra se movía.

¿Un terremoto? Eso no era lógico en su mundo.

"¡¿Dónde está el príncipe Jeon?! ¡Lo necesitamos!" gritó un guardia, mientras trataba de proteger de que la entrada del palacio no callera sobre las personas que entraban atemorizadas, buscando refugio. La mayoría de sus hogares habían quedado destruidos.

Yoongi no sabía qué hacer, se quedó inmóvil en su sitio viendo cómo el reino era destruido por culpa del agujero negro del cielo, que empezó a absorber todo lo que callera por causa del terremoto.

Sintió cómo fue brutalmente golpeado, cayendo al suelo.

"¡Señor responda!" el guardia de hace unos momentos tuvo que golpearlo para que volviera en sí.

Ya no había manera de hacer algo.

Estaban perdidos.

Pero entonces cuando un rayo de luz, que salió desde el páramo, fue hasta el agujero negro e impidió que siguiera tragándose la tierra, sin embargo, no lo podía contener por mucho tiempo.

Yoongi y todos los demás se preguntaron qué había sido eso, ¿quién hizo eso?

Sus preguntas fueron respondidas cuando el hada guardian del páramo se hizo presente y apareció para rescatarlos. Los llevó a todos al páramo y los refugió en el castillo negro, o bueno, los restos que quedaban de el.

"Gracias." dijo Yoongi.

"No es nada." Taehyung le regaló una pequeña sonrisa y volvió a los cielos.

El rayo de luz se hacía cada vez más débil, por lo cual tuvo que usar la poca magia que quedaban de las flores para impedir que se comiera por completo la tierra.

Intentó con todas sus fuerzas aumentar el poder del rayo, para su suerte, el agujero negro dejó de comer todo a su paso, pero el rayo, de tanta fuerza que contenía explotó, causando que los ojos de Taehyung sangren de tanto poder. Su cuerpo cayó, sus alas no respondieron, y aunque lo intentó, ninguna parte de su cuerpo respondió, y estuvo apunto de caer en el acantilado que se encontraba aún lado de su casa.

Voy a morir...

"¡Taehyung!" Jungkook empezó a correr hacia la dirección en donde él iba a caer. Lágrimas empezaron a caer por sus mejillas, dios, no tenían ni un momento de paz desde que ellos dos se conocieron, ¿será porque el universo no está de acuerdo de que estén juntos?

Taehyung logró abrir sus ojos, de ellos salió un pequeño brillo, parecido al color del oro. De sus labios salieron palabras en un idioma que nunca había escuchado, pero por algún motivo, lo conocía.

"Adiuva me, pater."
Ayúdame, padre.

"Sol meus, creator meus."
Mi sol, mi creador.

Era de día, por lo cual pidió ayuda a su padre, era lo único que quedaba.
Sabía que sus padres estaban muertos, y que los seres que estaban ahí arriba, sólo eran el reflejo del pasado. De cuando el sol y la luna iluminaban el universo.