𝕿RAITOR | Billy Loomis. [PAUSADO]

𝒊𝒗. 𝖲𝗈𝗌𝖕𝖾𝖼𝗁𝖺𝗌

ᅳ¿Diga?

ᅳ¡Alyn! ¡Debes venir ahora a la estacion!

ᅳ¿Tatum? ᅳdijo confundida, levantándose de su cama para ponerse sus botas, sus palabras salían rápido de su bocaᅳ ¿Tatum, que sucede?

ᅳTe lo explico en cuanto llegues, yo voy en camino ᅳla voz de ella sonaba nerviosa, no queriendo decir lo que pasó por teléfono.

Alyn confirmó, abrigado su cuerpo para poder ir rápidamente al lugar.

Una rara sensación se instaló en su estómago. Aún así, no tenía nada de información sobre por qué Tatum le había citado con tanta desesperación a la estación policial.

Dió aviso a sus padres de su salida, éstos le habían insistido en que tuviera cuidado de los ataques del asesino suelto por el pueblo.

La chica tomó el primer autobús que pasó por la parada, sentándose en los asientos del final.
Recargó su cabeza en la ventana.

¿Qué podría haber pasado?

Suspiró nerviosa, estaba pensando demasiado, debía parar. La preocupación le carcomía los nervios, el pensar en cierto chico y que algo malo le podría haber pasado le asustó.

Al llegar a la parada frente a la estación, se bajó rápidamente y trotó hasta la institución. Caminó hasta divisar a sus dos amigas.

ᅳ¿Tate, Sid? ᅳles cuestionó. Sidney no la miraba. tan solo movía su pierna de forma inquieta, incapaz de mirar a su amiga ante esoᅳ ¿Qué sucedió? ¿Están bien?

ᅳEl asesino atacó a Sidney hace un rato...

Tatum soltó esas palabras con dificultad, soltptun pequeño suspiro, incapaz de comentarle a su amiga la atrocidad.

ᅳ¿Qué? ᅳexclamo, horrorizada. Caminó hasta la castaña y se incorporó frente a ella, tomando sus manos en señal de apoyo.ᅳ, Sid, ¿qué pasó?

La pelinegra inconscientemente miró hacía un lado, topandose con una mirada café que la miraba fijamente. Esos ojos la miraban sin expresión, hasta que se toparon con los orbes azules de ella y los ojos de él se suavizaron. Alyn arrugó sus cejas, mientras fruncía sus labios en un gesto de confusión.