Fiare [Adaptación JeffTaBarcode]

II. Capítulo 5

Cerró los ojos por la impresión, quizá era su omega transformando una ilusión para hacerle sentir mejor, pero fue más real cuando unos brazos lo tomaron y lo levantaron revisándole de pies a cabeza, Barcode sintió las rudas manos apretujar de más su piel, abrió los ojos tembloroso, y la descarga que sintió fue demasiada, jadeó buscando aire, sus pupilas se dilataron y se agarró con fuerza a los hombros contrarios, tratando de llevar aire a sus pulmones.

El alfa frente a él lo notó y le miró a los ojos, parecía tan preocupado como nunca antes lo había visto, lo agarró del cuello, presionándolo suavemente, queriendo tranquilizarlo como una vez había hecho hace tiempo atrás.

—Respira, vamos omega ¡Respira!— dijo suave y ronco, su voz sonó dulce en sus oídos.

Trató de respirar normal, trató pero estaba en una especia de shock, no podía reaccionar bien.

—T-Ta....

Este sonrió suave, quizá sabiendo que a pesar de todo, le reconocía, con suavidad lo dejó en una esquina de la sala, vio todo pasar casi lentamente y entre manchas raras vio todo el movimiento que se hizo.

—Por favor, si tienen la fuerza necesaria ayuden a sus compañeros que no pueden caminar por sí solos— los pequeños asintieron con determinación, haber visto el combate de aquel omega macho contra un alfa el doble de fuerte y en tamaño, les había dado furor en sus corazones.

Ese omega había luchado por ellos, omegas que no conocía, omegas por los cuales nadie daría su vida, Barcode sin importarle nada, había peleado casi muriendo en el intento, la admiración de aquellos pequeños jóvenes había crecido y les había dado la fuerza que hace unos momentos no tenían.

Ta vio aliviado como todos comenzaban a ayudarse entre todos, el forzó las cerraduras restantes, viendo de reojo hacia Barcode notándolo ahí quieto y fijo en él, parecía estar en un trance, y se preocupó más pero estaba en una misión, no podía fallar.

Vio a Tong comenzar a levantarse, Tong le había dicho exactamente donde estaban y él había corrido hacia allí de inmediato, le dio un antídoto para la droga y al fin Tong estaba reaccionando bien.

Parecía estar adolorido, pero eso no le impidió llegar hacia el omega desmayado y tomarlo entre sus manos, agarrando al otro chiquillo que había estado llorando por su hermano.

—Síganme— dijo suavemente tratando de no asustar a los omegas y todos asintieron, Tong le vio de reojo y Ta asintió, cuando todos se vieron libres, Tong encabezó todo con su pistola en mano mientras llevaba en la otra a aquel chiquillo desmayado, los demás comenzaron a seguir y Ta corrió rápidamente hacia Barcode, tomándolo de nuevo en sus brazos.

Apuntó su pistola cuidando la espalda de los omegas por si alguien atacaba por detrás, aferró más a Barcode a su cuerpo, preocupado.

Necesitaba ponerse a salvo, ponerlos a todos a salvo, sus sentidos estaban alerta, dejó salir sus colmillos y orejas, sus pupilas buscaron frenéticamente algún peligro, algún sonido anormal, pero nada pasó.