En memoria del Apocalipsis - ChanBaek/Slight KaiSoo (Traducción)

Capítulo 5: 29 de mayo otra vez

"Quiero cambiar de turno." Sehun apareció frente a Kyungsoo, quien estaba en la infancia de Chanyeol. "Ya no soporto ver a esos dos juntos, parece que están pegados." Hizo una mueca de disgusto.

El pequeño Chanyeol estaba jugando con la pelota hace un segundo, y de repente dejó de hacer lo que estaba haciendo para proteger a un pequeño escarabajo, casi imperceptible, que caminaba sobre el concreto. Lo tomó en su mano y lo colocó en el árbol más cercano al patio de juegos, dejando a los Reapers que lo observaban sumamente curiosos por su actitud, haciéndoles olvidar que incluso estaban en medio de una catástrofe.

Kyungsoo miró a su compañero de trabajo.

"Nada de eso. Estamos en medio de esta importante misión." Dijo con calma. "Tú fuiste quien pidió tener su juventud."

"¡Porque pensé que sería divertido! No pensé que estaría en vela todos los días debido a ese Baekhyun. Ya entré en la cabeza de Chanyeol y todo lo que veo es que está pensando en este chico, casi falla las pruebas por eso."

Chanyeol miró el reloj en su brazo y corrió en dirección a su casa. Estaba jugando solo en el patio de juegos de la calle de al lado, como siempre lo hacía porque no le gustaba mucho jugar con otros niños que eran agresivos durante los juegos – ni siquiera era porque no estaba invitado, simplemente prefería estar solo. Su madre había dicho hasta el crepúsculo y realmente era hora de irse a casa, con unos minutos de sobra que aprovecharía para ir a una heladería con el cambio que tenía en la alcancía, sujetando con cuidado la pelota bajo el brazo para que no se resbale y ruede. Los Reapers lo siguieron.

Poniéndose de puntillas para llegar a la altura del mostrador – y aun así era en vano porque solo podía verse la frente del otro lado – estiró el brazo libre para tocar la campanilla y esperó pacientemente a que lo atendieran.

Chanyeol tenía unos seis años, pero parecía responsable como un niño que le doblaba la edad, por ello jugaba solo e incluso compraba dulces cerca de casa – con el consentimiento de su madre, por supuesto. No pasó mucho tiempo para que el amable dueño de la tienda apareciera con el colorido y divertido uniforme.

"¡Hola, pequeño Chanyeol!" Saludó el mayor al pequeño. Kyungsoo y Sehun notaron que un Ángel Guardián comenzó a rodear a Chanyeol, lo cual era completamente inusual después de verlo jugar solo sin ninguna protección espiritual, por lo que no entendieron por qué solo en ese momento apareció el ángel del niño. "Veo que no has crecido un poco desde la última vez que nos vimos." Bromeó.

"¡Sí, crecí!" respondió Chanyeol con dificultad en el habla. Todavía era muy pequeño, y su voz era muy aguda, sonando un poco entrecortada por la falta de dos dientes. "Mi mami dijo que soy un niño grande porque perdí mis dientes de leche. Mire." Bajó el labio para mostrar con orgullo los espacios en su boca y el viejecito pareció muy interesado en mirar dentro. "Ella dijo que voy a perder más cuando sea mayor, así que voy a venir aquí más veces. Esta vez ella no vino, pero también quiero comprarle algo."

El dueño de la tienda de helados rio.

"Sí, sí es cierto. ¿Qué sabor querrá mi cliente favorito?"

Chanyeol dejó caer la pelota de fútbol sobre una silla y caminó hacia los congeladores para analizar cada sabor allí, como si estuviera tomando la decisión más importante de su vida. El dedo meñique corto y regordete sobre sus labios, el ceño fruncido y la expresión seria era extremadamente adorable, incluso parecía un adulto.

Sehun, quien estaba acostumbrado a un escenario completamente diferente, decidió explorar un poco la heladería, mientras que Kyungsoo no le quitaba los ojos de encima al pequeño, así como al Ángel Guardián, quien incluso lo saludó con un gesto amistoso.