Robándome al Marido (Yeongyu)

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Yeonjun

ME ESTOY CONGELANDO, PERO EN ESTADO DE SHOCK por la emoción cuando nuestra familia feliz y fangosa entra por la puerta. La alegría líquida fluye por mis venas cada vez que pienso en Beomgyu siendo mío. Ni siquiera sé si mi corazón puede soportar tanto amor. Si fuera un sombrero, lo usaría todos los días. Si él fuera mi caballo, nunca dejaría la silla. Si fuera un bistec jugoso, sería mi comida favorita y me atiborraría de él mañana, tarde y noche.

Y él me quiere. Después de todo lo que le he hecho pasar, todavía me quiere.

No puedo evitar darle un beso húmedo tan pronto como cerramos la puerta. Ha pasado tanto tiempo, dos meses completos de permanecer casto, y ahora no puedo quitarle los ojos de encima. Se pone de puntillas, me abraza el cuello y me devuelve el beso con tanta dulzura que quiero ponerlo sobre mi hombro e irme a la cama, pero todos estamos helados y sucios, y como tuvimos que esperar más de treinta minutos para la grúa, también se ha hecho bastante tarde.

Jekyll parece estar bien, aunque actualmente se parece más a un troll que a un pastor australiano, y ladra, tratando de abrazarlo.

—Vamos a meterlo en la ducha, ¿eh? —Digo y recojo a Jekyll, porque de lo contrario, podría tener la brillante idea de sacudirse todo el barro en mi dormitorio.

Mi corazón late como loco. Sé que lo que hice en el bosque fue absurdo, pero nunca me sentí más seguro de mi amor por otra persona. Incluso con Karina hace años, éramos niños, y aunque la adoraba, no sabía qué implicaría realmente el matrimonio.

Pero a pesar de todos mis temores, a pesar del hecho de que nuestra relación comenzó con Beomgyu engañando a mi prima, estoy listo para dar un salto de fe y confiar en él con mi corazón. Puede que sea joven y un poco ingenuo, pero nunca he conocido a nadie más compasivo y amable que él. Expresó esas cualidades cuidándome, y aunque amo mis almuerzos caseros, lo que realmente atesoro es el pensamiento detrás de ellos.

Quiero pasar mi vida con él y apreciarlo como él lo hace conmigo.

—Tengo tanto frío —dice Beomgyu, quitándose los zapatos y luego el resto de su ropa antes de correr por el pasillo completamente desnudo.

—¡Vamos a llevarte a la ducha entonces! —Me río, volviéndome hacia mi dormitorio. El camino de barro tendrá que esperar. Puede ser algo inapropiado imaginar mientras sostengo al perro, pero todo lo que puedo pensar es que finalmente podré tocarlo, verlo desnudo, besarlo y follarlo de la manera que podría haberlo hecho durante semanas si mi cabeza no estuviera tan dentro de mi propio culo.

Por otra parte, nunca lo sabremos. ¿Quizás este tiempo de unión casta era lo que necesitábamos?

Me alegro de que haya terminado de todos modos.

Beomgyu ya está empezando a ducharse cuando entro y cierro la puerta con el pie.

Me muestra una amplia sonrisa. Ven aquí.

—Mierda. Finalmente puedo decirlo de nuevo. Eres absolutamente hermoso.

Dejo a Jekyll en el suelo y, por supuesto, lo primero que hace la bestia es sacudirse la suciedad adherida a su pelaje. Oh bien. Al menos hay azulejos aquí. Estoy demasiado ocupado quitándome la ropa empapada de barro para preocuparme.

Beomgyu se acerca a mí y agarra mi cinturón, abriéndolo con movimientos eficientes. Solo sentirlo tirando de mí así es excitante, y me inclino para otro beso, pero él escapa y se da la vuelta para mostrar sus nalgas. —¿Está seguro? ¿Es esto lo que querías?