Confusión [Thoma x Ayato]

Distanciamiento

Thoma no podía creerlo, definitivamente no, tal vez creyó que al principio era su imaginación pero pudo comprobar que no era así.

Hace 2 semanas que Ayato había despertado, su emoción y felicidad obviamente fue lo primero que llegó a él, pero entonces se acordó del "accidente" que había causado, sin mencionar que estando ebrio lo había hecho. No podía tener más que vergüenza y miedo de como reaccionaria su amo al verlo, pero tampoco podía quedarse atrás y no ir a verlo cuando claramente estuvo 5 días sin despertar, no quería ser o verse como un cobarde.

Cuando lo visito al día siguiente, lo que más le sorprendió fue que Ayato lo haya recibido de la manera más normal, como si no hubiera pasado nada, recordaba muy bien como tenía esa sonrisa característica de el en su rostro. No iba a negar que fue un alivio que no sacará el tema, pero aún así quería disculparse por lo que había hecho, incluso recibir un castigo si así el mayor lo quería, al menos ese sentimiento de culpa desaparecería de el si fuera así. Pero ya que ninguno de los dos sacaba el tema, prefirió quedarse callado, para no incomodar lo, esperaría a que el mayor diera la primera palabra, y así se disculparía totalmente con el.

Le dió su espacio, pero con el pasar de los días Thoma solo pudo sentir como su amo se distanciaba de el, pero no con palabras, mejor dicho con acciones, ya que ahora no hacía tanto contacto físico con el, no comían juntos en el almuerzo, ya no le pedía que le preparara la ducha o lo bañara, simplemente no le pedía nada que tenga que ver con el.

Le dolía, ya que eso no era algo que antes haya pasado, intento sacarse de su mente esos pensamientos malos, incluso intentaba estar todo el día con Ayaka, pero al parecer aún así no podía sacarlo de su cabeza.

Incluso un día estaba tan distraído al hacer sus labores, que la Kamisato menor le dijo que le daría el día libre para descansar ya que supuso que por eso no podía concentrarse.

Ya no aguantaba este distanciamiento, Ayato era su mejor amigo, su amo, quién lo salvó y le dió un techo para vivir. Esto no podía seguir así por lo que decidió que hoy intentaría hablar con el.

Era hora del almuerzo y como siempre sirvió la comida para los Kamisato, sabía que el mayor no comería allí o saldría a otro lado, por lo que aún así coloco su plato allí.

Busco a Ayaka y le dió el aviso de que la comida estaba lista, luego fue en la recamara de Ayato y tocó suavemente la puerta esperando una respuesta.

Pero al ver que nadie respondía decidió volver al comedor para poder acompañar a Ayaka un poco desilucionado.

-¿Thoma que te sucede?. -Pregunto Ayaka mientras comenzaba a comer su plato favorito preparado por el amo de llaves.

-Oh no es nada señorita Ayaka, no se preocupe. -Respondio mientras miraba constantemente la entrada de la residencia.

-Se que has estado muy inquieto, es por Ayato ¿no es así?. Thoma solo pudo ponerse un poco nervioso y mirar su plato, mientras que Ayaka solo lo observaba esperando una respuesta.

-Si, lo es, últimamente nos hemos distanciado, y ni siquiera viene a la hora del almuerzo...

-¿Se han distanciado? ¿Sucedió algo malo si que yo sepa?. -Esta vez la menor lo miro preocupada, tal vez y su amigo se haya peleado con su hermano, pero eso nunca había pasado hasta ahora, por supuesto que se dió cuenta de como ambos ya ni siquiera hablaban, o cuando le preguntaba a su hermano por Thoma este evitaba o cambiaba de tema.

Thoma no sabía que decir, ¿acaso estaría bien decirle que había besado a su hermano estando ebrio, y en el peor de los casos que Ayato hubiera llorado?, definitivamente no sabía que cara pondría Ayaka, por lo que solo decidió mentir para no cagarla más en ese tema.