Boruto ahora era alguien diferente, aquel sonriente y tierno niño del pasado había muerto cuando todos le dieron la espalda, en especial Mitsuki, su más grande amor.
Pero Mitsuki no estaba dispuesto a rendirse, ya que él siempre lo amó aunque el Ser...
Boruto y Deamon llegaron a la dimensión de los sapos donde estaban Koji y Sasuke, este último empezaba a despertar tras concluir su recuperación. Ahora Sasuke tenía su brazo izquierdo y su ojo izquierdo tras recuperar el Rinnegan.
Koji se había ocupado de Sasuke junto a los sapos, ahora que el pelinegro estaba reperado al fin, Boruto junto a Deamon llegaban. El niño miraba todo a su alrededor asombrado. Boruto se alegró al ver a su padre adotpivo, Sasuke, bien.
Sasuke lo hubo adoptado a los pocos meses de haberlo salvado de ser asesinado por los ninjas de Konoha, tras ser acusado de haber asesinado al Septimo.
Sasuke lo había cuidado y entrenado, pero cuando fue herido de muerte por Code, pasó dos años recuperándose en la dimensión de los sapos bajo la supervisión de ellos.
Ahora que al fin se pudo recuperar, Sasuke sentía que volvía a la vida. Boruto lo abrazó con fuerza intensa, lo emocionaba verlo vivo, sano y fuerte una vez más. Luego saludó a Koji mientras Deamon se acomodaba entre los cojines que allí adornaban el lugar.
Boruto lo presentó a Sasuke y a Koji. Por supuesto que ambos sabían perfectamente quién era Deamon. A su vez Koji sabía todo lo que ocurrió ya que lo vio desde una esfera de cristal.
Sasuke, en cambio, se fue enterando debido al relato de Boruto quien se sentó junto a Deamon, el niño se acomodó sobre del rubio y se durmió. Aunque no lo parezca, estaba demasiado cansado debido a la gran batalla que se sucedió.
Mientras Boruto acariciaba los azules cabellos del niño, relataba a Sasuke lo sucedido durante los dos últimos años mientras Koji y uno de los sapos le curaba las heridas que aún tenía, lo mismo hicieron dos sapos más con Deamon quien no despertó, ya que se sentía protegido gracias al chakra de Boruto que lo envolvía.
Sasuke supo escucharlo en silencio y sin alterarse, ocultaba sus emociones de manera magistral. Hasta que su hijo adoptivo acabó. El pelinegro era conciente del intenso dolor que el rubio sentía debido a la traición que todos los habitantes de Konoha y en especial Mitsuki, Shikadai y sus padres tuvieron para con él.
A ellos los culpaba de todo. No pensaba recuperar el apellido Uzumaki, ya que se sentía orgulloso de ser Uchiha. Concideraba a Sarada su verdadera hermana y no a Himawari.
Su dolor lo había enceguecido, y Sasuke sabía cómo actuar para ayudarlo a alejarse de esa oscuridad. Lo mismo ocurría con Koji. Ahora Boruto se había vuelto una maquina de matar como Deamon.
Cuando acabó su relato, Boruto estaba sentado en el suelo junto a Sasuke y Koji bebiendo jugo mientras seguían conversando, al tiempo que Deamon seguía dormido en la cama hecha de cojines.
— Llamarlos a todos los shinobis de Konoha traidores ¿no crees que es un tanto exagerado Boruto? — decía Koji — Después de todo estaban bajo el control del Seringan.
Boruto tenía la mirada helada, su dolor era tan intenso que se había convertido en furia intensa. Estaba hermeticamente cerrado a toda posibilidad de comprensión por parte del rubio. Sasuke suspiró hondo antes de intervenir.
— Eres muy poderoso ahora Boruto, salvaste al mundo y pese a tí mismo apuesto que te todos en el mundo shinobi deben desear verte y hablarte. Eso demuestra que no eres una mala persona.
— ¿Y el punto es? — quiso saber Boruto — Deberías darles a todos una oportunidad, ya que sabes lo que se siente estar atrapado ¿cierto?
— Cierto pero no puedo ni quiero hacerlo. Menos a mis padres, a Shikadai y a Mitsuki. — Entiendo, para mi es un gusto que quieras seguir llevando mi apellido. — Eso nunca cambiará Sasuke.
Los días pasaron y al cabo de un par de semanas, Sasuke decidió volver a la aldea de la hoja. Necesitaba volver junto a su familia y su gran amigo Naruto.
Boruto lo entendía perfectamente. Koji planeaba quedarse ahí ya que consideraba ese sitio su hogar. Antes de irse, Sasuke le habló a Deamon aparte pidiendole que cuide a Boruro e intente convencerlo de volver a la aldea donde nació. El niño se lo prometió.
Así Sasuke desapareció tras abrir el portal con su Rinnegan y aparecer en Konoha.
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