ROOMMATES

CAPITULO 8: CELO INESPERARO

Kyungsoo picaba finamente el eneldo haciendo resonar su cuchillo contra la tabla de madera, sus precisos movimientos eran increíbles y en un pestañeo ya tenía todo listo. Deja salir un gran bostezo de su menudo cuerpo, no había descansado mucho la noche anterior, cuando repentinamente un calor extraño lo obliga a lavarse la cara. El pelinegro sospechaba del porqué de esos calores, pero su celo todavía debía de llegar en un mes más. Lo único bueno de sus celos era que estos no eran muy seguidos, una vez paso casi 4 meses sin tener ninguna necesidad y eso fue una bendición.

Su rostro quemaba ligeramente, al ver su reflejo en el espejo se dio cuenta de lo sonrosadas de sus mejillas. El chef se encorvo cuando sintió un hincón intenso en su vientre bajo. Su cabeza comenzó a tildar, volvió a mojarse y meneo la cabeza para despejarse, solo necesitaba supervisar el almuerzo y ya podría irse a descansar.

A suregreso todos los aromas de su cocina comenzaron a darle nauseas, se sujetó confuerza del mesón y respiro profundo para calmarse, pero él sabía que era envano. Justo ahora necesitaba un solo aroma, el típico olor maderoso cítrico deChanyeol. Su celo lo estaba sofocando lentamente y sospechaba que era porquetenía su alfa cerca cada día, pero si lo pensaba bien no paso nada importante másallá de besos y toqueteos intensos

-Chef, ¿Esta bien? ¿Necesita que llame a alguien? - Los alfas de la cocina se habían retirado antes de que perdieran el autocontrol y terminaran follando a su jefe, solo quedaban omegas y el beta Jaehyun, todos lo miraban desconcertados porque era la primera vez que Kyungsoo daba un espectáculo de esa magnitud en horario de trabajo

-No, me voy...encárgate por favor...si necesitas ayuda, llama a Baekhyun

-Chef, debería llamar a su alfa, es peligroso que se vaya solo

-Si...auw, ya lo llamo, no te preocupes- quiso hacerse el fuerte pero luego de dar dos pasos, termino de rodillas en la cocina. Sintió como se humedecía e impotente apretó la mandíbula para no gritar, no podía estar pasándole eso frente a su personal, el siempre había sabido controlarse.

Jaehyun lo cargo como pudo y lo subió a su propio vehículo. Esos minutos para Kyungsoo fueron eternos, no era dueño de su cuerpo, sus delirios eran tan agotadores que en un segundo paso de estar en el coche de su empleado a estar en su sala casi desnudo y con Jaehyun marcándole al celular una y otra vez al socio de Exo Ladder.

-Acabo de recordar que está en día de spa...Jaehyun solo enciérrame, hay pastillas en mi botiquín, necesito eso y...- el pelinegro se retorció en agonía, perdió la noción del tiempo y de su cuerpo. Afortunadamente pudo sentir el aroma inconfundible de su alfa a pesar de que el alto aún estaba subiendo la escalera

Chanyeol abrió la puerta y de inmediato se calmó, lo observo con ojos llorosos y empezó a ronronear vergonzosamente

-¿Soo que pasa?

-Gracias a Dios que vino, su omega está muy mal, los dejo...menciono algo sobre un botiquín y pastillas

-Está bien, muchas gracias por tu ayuda, no lo olvidare Jaehyun- el pelirrojo se interpuso entre el omega y el beta. No quería que el ultimo siguiera viendo a Kyungsoo en ese estado, espero a que se retirara para ir a la cocina por un poco de agua.

Cuando llego acomodo al omega en su regazo y peino los húmedos cabellos de Kyungsoo, el pobre estaba hecho bolita y se quejaba bajito.

-Voy por tus supresores cariño, están en el botiquín, ¿Verdad?

-Alfa, alfa- El pelirrojo trago duro, el aroma del omega era muy intenso, intento cargarlo para llevarlo a la habitación y el pelinegro se subió a su regazo a intentar besarlo

-Soo, no creo que sea correcto que te tome así, mírame. ¡Mírame Kyungsoo!- se vio en la obligación de gritarle. El bajito estaba muy agitado, observaba al alfa hablar, su consciencia iba y venía.