27 - El Caso de Joshua Dale (II)

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Sentado en una cabina de cristal, Joshua Dale no entendió de inmediato lo que significaba ese gesto con la mano y estaba un poco confundido en cuanto a lo que estaba pasando. Miró a Gu Yan, sin comprender e inquieto.

Hasta que habló el juez Murray Liu. "Abogado Gu, ¿está seguro de que desea no participar en su declaración inicial?"

Joshua Dale, "......"

Sintió que su corazón, atado a la cintura de su pantalón, se había roto y caído al suelo; alguien incluso le había dado una patada y rebotó. Abrió lentamente la boca, pero su cerebro ya había implosionado.

¿Optar por no participar en la declaración inicial?

¿Me estás tomando el pelo?

No entendió nada profundo. Sólo sabía que el tribunal siempre tenía un ida y vuelta -usted dice cinco puntos, yo niego cinco puntos- para tener material para continuar el debate hasta el final. ¿Pero su abogado terminó renunciando a una ronda tan pronto como subió?

Las personas que se encontraban al fondo de la sala y que habían venido a observar el juicio con sus documentos guardaron un silencio ensordecedor durante cinco segundos y luego, de repente, estallaron en discusión.

No es que no estuviera permitido optar por no participar en la declaración inicial, pero en la limitada experiencia de estas personas como espectadores en la sala del tribunal, nunca habían visto esta práctica en la realidad. Después de todo, optar por no participar en una ronda significaba perder la oportunidad de convencer al jurado y al juez.

"Silencio!" Murray Liu golpeó su mazo.

La sala del tribunal volvió a quedar en silencio. Murray Liu miró hacia la mesa de la defensa.

Gu Yan asintió. "Sí."

En medio de las miradas atónitas de toda la sala del tribunal, solo Yan Suizhi estaba relajado e incluso aprobaba.

Hace mucho tiempo, una vez les había dado algunos consejos a sus alumnos. Dijo: "Es inútil criticar punto por punto su argumento a un juez o jurado cuando ellos mismos tienen prejuicios preexistentes. Aunque tus palabras sean apasionadas, pueden acabar siendo contraproducentes. Hay algunas personas que ya tienen en mente un resultado preconcebido y les resulta difícil aceptar afirmaciones contrarias. Especialmente si no están abiertos a la persuasión, no importa cuántas razones hables, te refutaran lineal por lineal en sus cabezas. Cómo decirlo... probablemente sea un tipo de psicología inversa que les hace querer rebelarse en un abrir y cerrar de ojos".

En lugar de obligar a la otra persona a aceptar su conclusión, ¿por qué no darle una pista y dejar que saque esa conclusión por su cuenta?

Si fuera algo en lo que ellos mismos pensaron, ¿necesitarían otros persuadirlos para que lo hicieran?

Al igual que en la situación actual; Para un juez como Murray Liu, para un lugar rebelde como Wine City, renunciar a la declaración inicial fue una excelente estrategia de defensa.

Incluso estimularía otro tipo de psicología inversa en algunas personas: cuanto menos dices, más quiero escuchar.

Utilice la retirada como avance, utilice la defensa como ataque.

Incluso si el movimiento de Gu Yan no estuvo influenciado por las palabras de Yan Suizhi de aquel entonces, el profesor Yan todavía estaba muy contento.

Este emperador, majestuosamente sentado con su pierna hinchada, hizo girar el bolígrafo electrónico en su mano y escribió una 'A' segura en las páginas en blanco que había creado.

Cuando Gu Yan abandonó la declaración inicial, el juicio pasó rápidamente a la siguiente ronda.

El fiscal comenzó a citar uno a uno a los testigos correspondientes según el rastro de las pruebas.

Abogado de Primera ClaseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora