Abogado de Primera Clase

32 - Flores para los Muertos (I)

Los pasos de Yan Suizhi vacilaron, con un ligero asombro en sus ojos.

Se quedó mirando por un momento antes de comenzar a mover los pies nuevamente, caminando sin prisas hacia el auto.

La ventanilla del auto bajó lentamente, revelando el hermoso pero frío perfil lateral de Gu Yan. La calefacción interior era más que suficiente, pero no podía calentar su naturaleza en modo alguno.

"¿Estás esperando a alguien?" Yan Suizhi estaba junto a la puerta del auto con sus bolsas de compras.

No había otras caras conocidas en los alrededores. En realidad, sabía que Gu Yan probablemente estaba estacionado aquí porque lo estaba esperando, solo que todavía preguntó por cortesía.

Gu Yan le deslizó una mirada de reojo. Él inclinó la cabeza. "Entra en el coche."

Pero Yan Suizhi no abrió inmediatamente la puerta del auto. En cambio, se inclinó y agitó el dedo ante Gu Yan a través de la ventana abierta. El dispositivo inteligente en forma de anillo brillaba ligeramente bajo la farola. "Yo acababa de..."

Cuando comenzó a hablar, un auto de alquiler negro se detuvo lentamente detrás del auto de Gu Yan. El conductor contratado miró hacia abajo para comprobar las coordenadas de ubicación y bajó la ventanilla del coche, señalando a Yan Suizhi. "¿Llamaste para que te llevaran?"

Yan Suizhi, "... Si".

Qué momento tan espectacular.

Gu Yan miró el auto a través del espejo retrovisor, su expresión ya fría se hundió instantáneamente otros diez grados, como si estuviera molesto y posiblemente sintiera que había hecho algo muy innecesario.

Sin embargo, dado que nunca estuvo feliz, era difícil juzgar si esta expresión se debía a que siempre parecía disgustado o si realmente estaba enojado.

Yan Suizhi golpeó ligeramente la puerta del auto como si estuviera dándole una palmada a alguien en el hombro. "Espérame."

Dicho esto, se acercó al coche de alquiler y le sonrió al conductor. "Lo siento, voy a tener que cancelar este viaje, surgió algo".

"Está bien, no hay problema." Afortunadamente, el conductor no se mordió la cabeza y simplemente recitó una instrucción bien practicada. "Cambie el estado de su reserva, es posible que deba pagar una pequeña tarifa de cancelación".

Yan Suizhi asintió. Se disculpó nuevamente y el conductor presionó un botón para girar el auto y alejarse.

Pagó la tarifa de cancelación en su dispositivo inteligente, abrió la puerta del auto de Gu Yan y entró.

Cuando se sentó en el asiento del pasajero delantero, estaba bastante atrapado entre la risa y las lágrimas. Pero dejando de lado la incomodidad, todavía estaba bastante conmovido.

"Nunca esperé que esperaras aquí todo el tiempo", el estimado profesor Yan miró de reojo el rostro frío del estudiante Gu, intentando aligerar la atmósfera.

Gu Yan movió los labios y dijo insipidamente: "Yo tampoco me lo esperaba".

Yan Suizhi, "..."

¿Alguien puede continuar una conversación como esta?

Quizás al darse cuenta de que había matado la conversación, Gu Yan preguntó: "¿De verdad tienes saldo suficiente para reservar un viaje?".

Yan Suizhi: "Aún quedaba un poco después de tener en cuenta las tarifas de la habitación en el hotel. No demasiado, así que reservé un taxi básico operado por un hombre, no un taxi inteligente no tripulado".