Shion Kagura (tú) es una estudiante de Kioto y durante el Festival de Intercambio de las Escuelas Hermanas conoce a Megumi Fushiguro y le empieza a hablar, asi encontrando cosas en común entre el muchacho y ella.
Megumi Fushiguro no sabía si aquella última canción había sido para él, sin embargo algo en su corazón le decía que tenía que ir a ver a la Kagura.
- Tengo algo que hacer, no me esperen para comer, es posible que tarde -le dijo él a Itadori, no queriendo lidiar con la ola de preguntas que haría Kugisaki.
Busco con la mirada la entrada al camerino, ignorando el millón de dudas que flotaban en su cabeza. Encontró la puerta y entró.
Lo primero que vió fue un montón de telas de colores, era una salita pequeña. Al fondo había un armario de color violeta del cual sobresalían prendas de colores, en el suelo también había cualquier clase de telas, azules, rojas, amarillas, verdes, rosas y mucho más. A un lado había un tocador, y encima de este maquillaje y un espejo. En el lado contrario se encontraba un sofá desgastado de color rojo y recostada en el, Shion Kagura.
No traía ya el sombrero dejando ver su desaliñado cabello castaño, tampoco llevaba ya el maquillaje, dejando ver las marcas de insomnio debajo de sus ojos color caramelo, iba descalza y contaba un montón de billetes en efectivo con una sonrisa orgullosa en el rostro.
Megumi casparreo, algo incomodo de que la chica no se hubiera dado cuenta de su presencia.
Ella lo miro y sus ojos centellaron, se levanto a toda velocidad y corrió a los brazos de él, guindandose de su cuello en emocionado abrazo
-¡Si viniste, -ella chillo mientras él la agarraba de la cintura para ponerla nuevamente en el suelo, sin dejar de abrazarlo- no estoy loca!
-Shion... -ella sintió un escalofrió al escuchar su nombre provenir de los labios del chico.
-Megumi... -Fushiguro se agacho un poco para posar su barbilla en el espacio del cuello y el hombro de Kagura. Ella aunque no lo veía podía sentir su sonrisa
-¿Te acuerdas de cuando me preguntaste cual era la cosa o momento que de mi vida que se me hacía más reconfortante y bello? -Ella asintió, emocionada- Ahora se que responderte -ella contuvo inconscientemente la respiración- Mi cosa favorita desde es el sonido de tu voz
Poco a poco, él le dio un beso en la mejilla luego uno más cerca de sus labios, dejando un camino y compartiendo una mirada con la chica en forma de pregunta y en respuesta un asentimiento de ella, el la beso.
El beso expresaba todo lo que ambos habían sentido y no habían podido expresar con palabras, el amor que sentían el uno por el otro, la necesidad de estar juntos, lo reconfortante de la compañía, todo eso y más cosas inexplicables en un beso, un beso tierno y necesitado, el sonrojo en ambos rostros y la felicidad expresada de que al separarse compartieran una sonrisa, una mirada y en ello una silenciosa promesa de no tener que extrañar al otro nunca más, la eterna compañia.
- Te amo, Megumi
- Y yo a ti, Shion
Fin
¡Gracias por leer!, esto es el final de este Fanfic, tal vez haga un extra, pero no estoy segura.
Si les gusto esta historia vayan a leer La chica de tinta en mi otro perfil de ediazj (las otras historias en ese perfil no son mías, son de mis compas)
