BL One Shots

¿Por que no te has ido? porque... (Kurodachi)

Con un gran sonido cayó al suelo, y con una maldición comenzó a llorar.

Kurosawa rápidamente se puso de pie y fue al otro lado de la cama, solo para encontrar a Adachi, con su muleta en el suelo y el llorando.

-Mi amor- poniéndose al lado de Adachi lo tomo de un brazo a lo que el pelinegro de un manotazo lo alejo- ¿Adachi?

Con lágrimas en los ojos el pelinegro se quedó en el suelo con su esposo al lado.

- ¿Por qué Kuro? - su voz rota por completo, como un vacío dentro de él que estaba saliendo a relucir- ¿Por qué no te has ido y dejado esta carga de lado?

Kurosowa sabia de que estaba hablando, de lo único que hablaba desde el accidente. Porque no se iba y podía vivir una vida normal sin necesidad de cuidar a un enfermo invalido.

-Porque...

Dolía no iba a mentir, dolía como un demonio, como si tu alma fuera arrancada parte por parte lentamente.

Ver a Adachi en esa cama de hospital, con una férula en su pierna, heridas en el resto del cuerpo, su cabeza vendada y un tubo en su garganta. La máquina por lo menos mantenía un ritmo constante, lo que significaba que su corazón estaba latiendo a un ritmo normal.

El hermano y padre de su esposo lo estaban tranquilizando, mientras que la madre y cuñada de Adachi lo estaban visitando en la habitación.

No sabía que paso, solo recuerda breve lapsos y cosas que le parecen un sin sentido.

Recuerda estar en la oficina esperando a que Adachi llegara, se levantaron al mismo tiempo, pero el pelinegro le dijo que llegaría tarde debido a que tenía que hacer unas encomiendas a su hermano aquí en la ciudad.

Estaba hablando con Rokkaku cuando su celular vibro, al ver que era de un numero desconocido decidió dejarlo pasar. No fue sino hasta que dos horas después volvía a sonar y esta vez era Tsuge quien llamaba, respondió y un grito fue lo primero que sonó.

Solo recuerda unas palabras

Adachi está en el hospital, tuvo un accidente y está en cirugía...

Recuerda llamar a sus suegros y cuñado.

-Él va a estar bien Yuichi- la voz de su suegro le trajo algo de tranquilidad -Adachi siempre ha sido un chico fuerte, débil en carácter tal vez, pero fuerte en muchos otros aspectos.

Rio levemente al escucharlo hablar, así era su suegro, si decía algo bueno tenia, por ley, que decir una debilidad, así era con todos.

-Papá tiene razón- su cuñado fue quien decidió hablar – Adachi desde niño siempre ha sido travieso y nervioso, pero cuando se lastimaba siempre se ponía de pie. Eso era extraño.

Los ojos de Kazuya se pusieron brillantes así que rápidamente giro para que Kurosawa no lo viera.

El ambiente se rompió cuando varios doctores y algunas enfermeras iban corriendo por el pasillo a donde estaba la habitación de Adachi. No pasaron ni dos minutos cuando la madre y cuñada de su esposo llegaron corriendo y abrazaron a sus respectivas parejas.

-Él estaba bien, estaba abriendo los ojos...- la madre de Adachi comenzó a llorar.

-Adachi estaba despertando, pero se sobresaltó, se comenzó a mover- la cuñada de Adachi retomo lo que su suegra decía- al moverse su pierna comenzó a sangrar, creo, se puso de color morado...

Kurosawa no quería escuchar más, se alejó un poco y trato de pensar, ¿en qué? No sabía, pero solo no podía escuchar más sobre como su esposo parecía no mejorar.