MÍO [KATSUDEKU] [BNHA X VIERNES 13]

Cap 1: Feliz viernes 13

Realmente le había insistido a su madre en que no quería ir. Izuku Midoriya era un joven de secundaria, al cual su escuela había invitado para unas vacaciones de verano en un campamento, pero él no quería ir.

- ¡Esta es una oportunidad para que logres hacer amigos! - Decía su madre, mientras lo ayudaba a empacar sus cosas.

- ¡Pero mamá! ¡No quiero ir! Es mejor si... Me quedo aquí estudiando... - insistió Izuku, pero al parecer, ya nada conseguiría cambiar la opinión de su madre.

- Vas a ir, no puedes solo quedarte encerrado en tu cuarto estudiando cuando ya tus notas son buenas. Vas a ir a ese campamento. -

Todo sería mas fácil si simplemente... Le contara la verdad del por que no quiere ir. Pero no, no quiere preocuparla...

Sin mas opción, Izuku se vió obligado a ir a ese campamento. El autobus finalmente llegó a su casa, y el pecoso estaba preparado con sus cosas. Tragó saliva, antes de despedirse de su madre, y comenzar a avanzar hacia lo que para él, sería unas vacaciones de verano horribles... Un infierno lleno de burlas, golpes y abusos verbales. Si... Ese tipo de vacaciones.

El pecoso entró en el autobus, y comenzó a caminar hacia un asiento libre.

- ¡Vaya vaya! ¡Pensaba que el nerd no iba a venir! - Dijo uno de sus compañeros. - Parece que el campamento no será tan aburrido despues de todo. - Decía.

Izuku solo se mantuvo en silencio, hasta que finalmente se sentó, y el autobus arrancó, con destino hacia el campamento.

- Debiste haberte quedado en casa, Midoriya... - Esa voz... Viene desde el asiento de atrás.

El pecoso volteó a ver, notando que se trataba de Rensuke... Era su mayor bully por así decirlo, el lider de estos.

- Bueno... No puedo quejarme, despues de todo... ¿Que haría en estas vacaciones sin nadie a quien golpear? - Dijo, con una sonrisa maliciosa en su rostro.

- . . . - No respondió, simplemente volteó nuevamente hacia el frente, mientras comenzaba a jugar con sus dedos.

- ¿Me ignoras? Vaya... No se si eres muy valiente o muy estupido. - Masculló. - Pero no importa... Cuando lleguemos espero recibir una disculpa adecuada. ¿Entiendes? - Y sin decir nada mas, solo soltó una carcajada y volvió a acomodarse en su asiento.

"Hacer amigos... Claro, mamá." Se decía a si mismo, mientras soltaba un supiro pesado.

"Creo que quiero vomitar..."

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Luego de un buen rato conduciendo, el autobus finalmente había llegado. Visto de esta manera, parecía un muy buen lugar para pasar las vaciones, pero teniendo en cuenta el tipo de gente con la que va a estar, entiendo que las cosas no van a ser muy buenas.

Sin mas, Izuku se puso de pie, y comenzó a caminar hacia el exterior del autobus. Necesita aire fresco, y tal vez... Vomitar. Una vez fuera, podía sentir el viento suave golpeando su cuerpo. Era relajante... Pero el constante pensamiento de que Rensuke y sus amigos lo convertirían en su juguete durante el fin de semana no lo dejaba tranquilo. Por ello, decidió... Alejarse un momento del grupo.

El pecoso comenzó a caminar hacia el muelle que daba al enorme estanque del lugar. Era hermoso, un lugar perfecto para saltar y darse un buen chapuzón en el agua. Se quedó un par de segundos mirando el lugar, hasta que sintió unos pasos acercandose a él. Su piel se erizó, un enorme escalofrio recorrió todo su cuerpo, para posteriormente comenzar a voltear hacia atrás, imaginandose quien podía ser.

- ¡Hey, Midoriya! ¿Apreciando la vista? - Dijo Rensuke, acompañado de sus 2 amigos. - ¿Tantas ganas tienes de entrar que decidiste adelantarte?

- Yo... Solo estaba mirando, nada mas... - Respondió con nerviosismo notable.

- ¿Ah si? - Dijo, mientras llevaba su mirada hacia el agua unos segundos, y sonriendo con malicia al ocurrirsele una idea. - No mientas... Además, ¿No crees que me debes una disculpa por lo de hace un rato? - Dijo, comenzando a acercarse al pecoso.

- Y-Yo... Lo siento. -

- Sabes que un "Lo siento" no basta, amiguito. ¡Agarrenlo de sus brazos y piernas! -

- ¿Que? -

Al instante, los otros dos chicos se aproximaron hacia Izuku, tomandolo de sus brazos y piernas y levantandolo.

- ¡No! ¡Sueltenme! - Izuku comenzó a patalear y a moverse con fuerza, buscando soltarse, pero era inútil, ellos eran mucho mas fuertes que él. - ¡Por favor! ¡Realmente lo siento! -

- Venga chicos, ¿Que tal si le cumplen su deseo y le hacen darse un chapuzón en el agua? -

- ¿¡QUE!? ¡¡NO, NO NO!! ¡¡ESPEREN!! -

Al instante comenzaron a balancear a Deku de un lado a otro, preparandolo para lanzarlo al agua.

- ¡A la de tres! ¡Uno! -

- ¡¡NO, POR FAVOR!! -

- ¡Dos! -

- ¡¡YO NO SE NADAR!! -

- ¡Tres! -

Y al instante, los dos chicos lo soltaron en el momento justo, lanzando a Izuku hacia el agua.

- ¡¡NOOOO!! -

El agua salpicó con fuerza al momento de impactar, mientras el pecoso comenzaba a gritar y chapotear, buscando salir del agua.

- ¡¡AUXILIO!! ¡¡NO SE NADAR!! ¡¡AYUDA!! - Rogaba por que lo ayudasen a salir, pero...

- ¿Cuando crees que se de cuenta de que solo está en la orilla? - Dijo uno de los chicos.

- ¡Oi, nerd! ¡Se te olvidó esto! - Fue entonces que Rensuke le lanzó un salvavidas, solo para molestarlo.

Fue ahí que Izuku se dió cuenta de que solo estaba en la orilla, en la parte menos profunda. 

- . . . - 

- ¡Asegurate de lavarte bien! ¡Brocoli! - Dijo Rensuke, antes de comenzar a reirse y finalmente marcharse con sus compañeros del lugar, dejando a Izuku ahí sin mas.

Que verguenza... Solo era la estupida orilla.

- Ay no... - Dijo, poniendose de pie y mirandose de pies a cabeza. Ahora estaba totalmente empapado, toda su ropa mojada.

- No quiero estar aquí... - Decía, mientras un par de lagrimas comenzaban a caer por su sus mejillas.

El pecoso comenzó a caminar a paso lento fuera del agua, pero... Volvió a sentir otro escalofrio en su cuerpo, algo que lo hizo voltear al instante.

- ¿Eh? - 

Pero... No había nada, nadie. "Por un momento... Sentí que alguien me estaba mirando." Se dijo a si mismo, antes de finalmente salir agua, comenzando a dirigirse a una de las cabañas. Necesita cambiarse de ropa.

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La tarde fue pasando. Todos los jovenes comenzaban a acomodarse cada quien en su lugar, y poner todo en orden para los siguientes días que se iban a quedar en el lugar. Izuku solo se mantuvo alejado, esperando poder buscar otro lugar donde dormir. Lo haría afuera de ser necesario, pero no quiere estar cerca de sus compañeros. 

"Estoy decidido, le contaré la verdad a mamá al llegar a casa..." 

Era su unica alternativa, de esa forma conseguiría que lo cambien de escuela, pero... No sabe como ella va a reaccionar ante todo esto. Está deseando que todo salga bien.

"Voy al baño..." Se dijo a si mismo, comenzando a caminar fuera de la cabaña, pero una mano posandose en su hombro lo detuvo.

- Oi, ¿A donde vas con tanta prisa? - Esa voz... Rensuke de nuevo.

- Yo iba al baño... - Respondió, sin siquiera voltear a verlo.

- ¿Ah? ¿Y perderte nuestra noche de historias frente a la fogata? - Entonces el mayor pasó su brazo por encima del cuello del pecoso, apegandolo a él y comenzando a desviarlo hacia otro lugar. 

- ¡N-No es necesario! ¡Estoy bien así! -

- ¡Vamos! ¡Será MUY divertido! -

- ¡P-Pero no quiero! - 

Fue llevado casi a rastras hacia el lugar mencionado por Rensuke, donde se encontraban sus compañeros, alrededor de una fogata. Ya estaba anocheciendo, así que era normal que la hubieran encendido.

Fue obligado a sentarse en el sitio, sin ninguna otra opción mas que aceptar esto.

- No quiero... -

- ¡Bien! ¿Entonces quien empieza? La noche es larga. -

- ¡Yo tengo una historia! -

- ¡Y yo! -

Todos insistían en tener algo que contar. Izuku no hablaba, pues... Por mucho que cualquier historia sea entretenida, eso no quita que fue traído a la fuerza, y eso significa que Rensuke lo quiere cerca por alguna razón, y no precisamente buena.

- ¡Callense todos! ¡Cualquiera de sus historias de seguro que apesta! - Dijo Rensuke, poniendose de pie. - Yo tengo una que seguro que les pondrá los pelos de gallina. -

- ¿Ah si? ¡Te reto a contarla ahora. - Dijo uno de sus compañeros. 

- Pues bien... Se dice que en este mismo campamento, solía habitar un chico, el cual se ahogó en este mismo estanque. - Contó. - Su madre se volvió loca, trató de matar a todos los campistas que aquí llegaban, hasta que una chica superviviente logró acabar con ella. - 

El pecoso levantó la mirada, escuchando la historia. 

- ¡Pero eso no es todo! - Exclamó Rensuke. - Luego de la masacre, la chica superviviente murió, debido a una explosión en su propio hogar. La policía creyó que se trataba de un accidente, pero se dice que en realidad, fue el hijo de aquella mujer loca, el cual realmente siguió vivo, y busca venganza en contra de todo aquel que pise sus tierras. -

". . . Quiero irme a casa." Esa historia si que lo asustó, ahora también hay un asesino suelto por estos lugares. 

- ¡Pfftt! ¡Pero esas son solo leyendas! ¡Este lugar es completamente seguro! -

Pero fue entonces que uno de los matorrales comenzó a moverse, cosa que los hizo voltear a todos.

- ¿Que es eso? -

- ¿Eh? -

De pronto, de aquellos matorrales salió un gran oso, el cual comenzó a dirigirse hacia ellos. 

- ¡Corran! ¡Un oso! -

- ¡Llamen al profesor! -

Todos comenzaron a correr.  Izuku quedó paralizado unos segundos del miedo, hasta que finalmente se obligó a pararse y correr. 

- ¡Esperenme! - Pero al instante cayó al suelo. Había algo que no había notado, y es que los cordones de sus zapatos habían sido amarrados. - ¿¡Que!? -

Volteó hacia atrás, viendo como el oso terminaba por encimarse sobre él, a punto de atacarlo. Las lagrimas salieron de sus ojos, y soltó un fuerte grito.

- ¡¡AUXILIO!! -

Y cuando una de las patas del oso tocó su rostro, solo escuchó un "bu" de parte de este.

Abrió los ojos, confundido, para entonces ver como este oso se quitaba la cabeza, revelando que era una mascara.

- ¡¡PFFFTT!! ¡¡DEBISTE MIRAR TU CARA!! - 

Era uno de los amigos de Rensuke, que estaba disfrazado de oso para asustarlo.

- ¡¡HAHAHA ESA ESTUVO BUENA AMIGO!! ¡¡CAYÓ REDONDO EN LA TRAMPA!! - Decía Rensuke riendose.

- ¿Que? - 

Fue ahí que lo entendió, todo había sido una broma de parte de Rensuke y los demás lo sabían. Comenzó a sentirse enormemente frustrado, avergonzado y triste... Nuevamente volvió a ser la burla de todos.

- ¿Que pasa Midoriya? ¡Esto apenas empieza! ¡La noche es larga! - Decía Rensuke, mientras Izuku solo se quedaba ahí, con rabia.

"Por favor... Solo dejame en paz... ¡Desaparece!" Se decía a si mismo.

Fue entonces que se escuchó una fuerte explosión, la cual dejó totalmente oscuro el lugar.

- ¿¡Que fue eso!? -

- ¿Acaso la planta electrica explotó? -

El pecoso volvió en si, levantando la mirada hacia Rensuke, notando como alguien se acercaba a él desde atrás.

- Bueno, no importa... ¿Quien tiene una linterna? - Preguntó, mientras que sacaba un encendor para iluminar, y cuando lo acercó a su rostro, se pudo notar la figura de alguien bastante alto detrás de él.

- ¡Rensuke! ¡Atrás de ti! - Dijo uno de sus amigos.

- ¿Que? - Pero justo cuando volteó, un machete apareció frente a sus ojos, clavandose en cabeza, y matandolo al instante

La sangre salpicó el rostro de Izuku, quien vió a aquel hombre que mató a Rensuke frente a él. Tenía una mascara puesta, y un machete... ¿Acaso... La historia de Rensuke era real?

El cuerpo de Rensuke cayó al suelo, para que posteriormente cundiera el panico entre sus compañeros.

- ¡Un asesino! -

- ¡Corran! -

El hombre no tardó mucho en lanzarse el que tenía el disfraz de oso, estampandolo contra el suelo, para posteriormente comenzar a clavarle el machete una y otra vez en el pecho, salpicando el suelo con su sangre.

- ¡¡NOOO!! ¡¡DEJALO!! -

El otro amigo de Rensuke apareció, y con una rama que tenía en sus manos le golpeó con fuerza la espalda al asesino, el cual ni siquiera parecía haber sentido daño de eso. Al instante volteó la mirada hacia el chico, y lo tomó con fuerza de la cabeza.

Comenzó a apretar con fuerza su craneo, buscando destrozarselo.

- ¡¡AAHH!! - Un fuerte sonido de huesos crugiendo se escuchó, mientras un ojo caía al suelo. Le había reventado la cabeza.

El asesino dejó caer el cuerpo al suelo, para posteriormente mirar hacia los demas jovenes que quedaban.

- . . . -

Al instante comenzó a dirigirse hacia ellos, para posteriormente acabarlos de las formas mas violentas y sangrientas posibles.

Izuku estaba demasiado asustado para poder reaccionar, temblaba, quería gritar, pero la voz no le salía, sus piernas temblaban tanto que le era imposible levantarse. Lo unico que pudo hacer, fue escuchar los gritos de sus compañeros siendo asesinados por aquel hombre.

Luego de unos segundos que parecían eternos, los gritos finalmente se apagaron. Izuku abrió los ojos, encontrando el lugar bañado en sangre, tripas y cuerpos de sus compañeros asesinados. Frente a él, se encontraba aquel mismo asesino que hace unos segundos los mató a todos, quien lo estaba mirando.

- N-No... No... Por favor... -

El enmascarado lo miró unos segundos mas, antes de tomarlo de uno de sus pies, y comenzar a arrastrarlo hacia los arboles. Se lo iba a llevar.

- ¿¡Que!? ¡¡NO!! ¡¡POR FAVOR NO!! ¡¡DEJAME IR!! ¡¡AYUDAAAAAA!! -

Nadie acudió a sus gritos, nadie lo escuchó, y finalmente, tanto Izuku como el asesino, se perdieron entre los matorrales...

Fin del capitulo.