CAPITULO 2

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DOS MESES ANTES

Son inicios de octubre, la temperatura comienza a bajar cada vez más y a mí me encanta.

Mi madre y yo vivimos solas en un bonito vecindario lleno de casas enormes como la nuestra. Una casa que mi padre compro con esmero cuando nací y a la que hace tres años le añadió una piscina sin saber que la disfrutaria muy poco, murió un mes después en un accidente de tráfico.

Desde entonces mi cumpleaños no me gustaba, pues la noche en que murió planeabamos hacer una fiesta en la piscina con tema de halloween, si, mi cumpleaños es la noche de brujas.
Al parecer un ebrio se le atravesó en el camino sacándolo de la carretera haciendo que su automóvil rodará y se impactará contra un árbol. Su muerte fue tan violenta que no se nos permitió ver el cuerpo y su ataúd estuvo cerrado en el cementerio.
Mi tío dijo que su cuerpo había quedado irreconocible, no había pistas del ebrio ni reporte de algún herido o auto chocado.

Aun me dolía su ausencia, pero mamá hacia todo para que pudiera sobre llevarlo.

Estábamos hablando sobre mi cumpleaños, sabía que no me gustaba pero ella quería que lo festejará de algún modo, decía que ya había pasado tiempo y debía seguir adelante.

-Lo pensare- dije mientras me levantaba del comedor y me dirigía a mi colegio.

El colegio estaba cerca, a 20 minutos a pie, y con este clima es algo que adoraba hacer.

Entonces vi la mudanza, junto a mi casa había un carro y unos trabajadores estaban bajando las cosas, supuse que había nuevos vecinos.

Me gire cuando sentí que alguien me miraba. Había un chico rubio, tan rubio que me quedé sorprendida mirándolo y asta que mis ojos se toparon con los suyos, me gire sonrojada por la vergüenza de haber sido tan grosera.

Di unos pasos más, aún podía sentir su mirada, la sentí asta que di vuelta dos calles adelante.

Al llegar a mi colegio me costó mucho concentrarme, jamás había visto un chico así, su tono de piel era muy blanco, su cabello y pestañas eran de un rubio casi platino, sin duda era atractivo no solo por esas características si no que su rostro era atractivo.

Quiza era yo muy ingenua,pensé, pero nunca he visto chicos asi y quería investigar.

Estaba terminando la clase de biología y me pareció oportuno preguntarle a la señorita Simons.

-Disculpe profesora- dije acercándome a su escritorio.

-Dime querida?- me miró curiosa.

-Este... Quería saber si hay alguna condición en las personas que las haga ver muy rubias y con la piel muy blanca??- me sentía ridícula preguntando, pero mi curiosidad era más.

-Si, se llama albinismo, es una condición poco común, pero si se da- me dijo acomodando sus libros.

-Oh gracias- me despedí y salí del salón rápidamente.

Las demás clases fueron tranquilas junto a mi amiga Isabella, estabamos en la cafetería hablando de los chicos guapos cuando le comenté de mi vecino guapo.

-Woow un vampiro sexy- dijo entre risas.

-No lo se, jamás había visto un chico así, su pelo están blanco que pareciera brillar- dije dándole un bocado a mi sandwich.

-Pero la maestra de biología te dijo que era una condición llamada albinismo, osea que es un chico normal, no un sexy y caliente vampiro- dijo ella con decepción.

-Si lo se, quizá se mudo aquí porque el clima es más nublado, según investigue en internet ellos son muy sensibles a la luz del sol, les lastima la piel y sus ojos- dije leyendo el artículo en Google.

UNA NOCHE DE HALLOWEEN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora