BLOOD DROPS

Parte 3.2

Las gotas poco a poco cayeron sobre la sábana que había arrastrado al suelo y ahora reposaba sobre sus piernas.

Inmediatamente el comenzó a limpiarse con las manos aunque eso hiciera un desastre más grande.

Cristoph: Te llevaré a la ducha, creo que hará falta recoger esto. Vamos, hay que darte un baño.

Cian mordió su labio para evitar que cualquier sonido de dolor saliera de ellos cuando el mayor le ayudó a levantarse.

El menor fue sujetado hasta el baño dentro de ese cuarto aún con la sábana encima donde Cristoph le ayudó a quitarse las vendas.

Cristoph: Puedes mojarte completamente, este plástico evitará que la herida entre en contacto con el agua.

Él señaló un pequeño cuadrado transparente que estaba sobre el abdomen del chico para después tomar todas las telas y salir.

"Baño"

Solo significa una cosa.

Trabajar

Ellos hasta el momento le han dejado estar sobre las sábanas con un aroma fresco además de darle un vaso completo de agua, la última vez le ofrecieron la mejor comida que jamás había probado y encima se han molestado en tratar heridas que en unos días cerrarán.

Tiene que pagar todo lo que le dieron, tiene que estar limpio.

Miró alrededor de todo ese cuarto, había muchos diferentes botes y productos que no conocía.

Abrió la regadera y dejó que agua fría cayera sobre él, su piel se erizó y su cuerpo se adormeció ante la sensación de helades.

Su cabello largo y completamente enredado quedó espumoso cuando colocó un poco de lo que estaba seguro era jabón, su piel de igual forma fue envuelta en dichas burbujas mientras restregaba cada parte con cuidado de dejarla limpia para después ser usada.

Hay mujeres y hombres, probablemente tegan que trabajar todos sus orificios y otras áreas después de todo.

El agua dejó de circular cuando la llave se cerró, tomó la toalla ahí colgada y secó todo su cuerpo.

Un "clack" fue escuchado fuera, tal vez siendo la puerta al cerrarse.

Era hora de salir.

Mal secado y aún envuelto en la toalla el chico salió notando la presencia de ese chico con cabello rosa quién acomodaba la cama dándole la espalda.

Tal vez ese pelirosa iba a ser el primero en usarlo.

Cian avanzó quedando detrás de ese chico, la toalla que tenía en los hombros la dejó caer al suelo provocando un pequeño ruido pero lo suficientemente fuerte para que ese joven volteara.

Al verlo, nuevamente, igual a la noche en la que lo conoció esos café lo miraron con terror.

El cuerpo desnudo de Cian temblaba por el reciente baño con agua fría además del ambiente invernal que estaba en todas partes.

Algunas gotas caían de su cabello y otras se deslizaban por todo su cuerpo.

Él ni siquiera podía mirarlo a los ojos sabiendo que cada que lo hacía tenía esa sensación tan fuerte de rechazo, por lo que siempre mantuvo su mirada en el suelo.

Al darse cuenta de que el pelirosa no parecía moverse pensó que tal vez quería que él mismo hiciera las cosas, entonces después de tragar en seco se dirigió directo a los pantalones del chico para desabrocharlos y comenzar a chupar. Pero antes que que todo eso pasará sintió como el aire le era arrebatado de los pulmones cuando ese joven lo golpeó y salió corriendo mientras gritaba con bastante miedo.