Rubí desde los ojos de Gideon

Capitulo 2

Volví a la sala del Dragón en busca de Charlotte y la encontré en el mismo lugar que hace minutos atrás ocupaba. En cuanto me vio salió corriendo.

-Espera Charlotte- alcance a tomarla del brazo y pude escuchar como lloraba

-Todo lo que está pasando es tan terrible, penoso y humillante- espeto.

Se veía destrozada y por alguna razon me compadecí de ella.

-No, de ninguna manera, esto no es culpa tuya- le dije con voz cálida y suave, aunque en realidad estaba molesto con todo y por todo lo que había pasado.

Me acerque y la tome de la cara acercándola a mi pecho, quería que se tranquilizara pero no funciono, en su defecto comenzó a llorar mas.

-Falsos síntomas! Quería que me tragara la tierra, realmente estaba convencida de que podía pasar en cualquier momento.

-Yo hubiera pensado exactamente lo mismo en tu caso-la tranquilice un poco-. Tu tía debe de estar loca para haberse mantenido esto en secreto durante tantos años. La verdad es que tu prima me da lástima-. <<Y de verdad que lo hacia>>

-Tu crees?- lo dijo por fin mirándome a los ojos y con dudas en la mirada.

-Piénsalo un poco! ¿Cómo va a poder arreglárselas? No tiene ni la menor idea...¿Como va a ponerse al dia de todo lo que hemos aprendido en los últimos 10 años?

-Es verdad, pobre Gwendolyn- dijo Charlotte sin lágrimas en los ojos y con una mirada de lastimas-. Pero también tiene sus puntos fuertes...soltar risitas con su amiga, escribir SMS y recitar de memoria el reparto de un montón de películas. Eso si puede hacerlo muy bien-. Dijo con una enorme sonrisa en el rostro lo cual me hizo recordar a la chica y sentir más lastima por ella.

-si, es justo lo que he pensado hace un rato de verla por primera vez- Se me vino repentinamente al pensamiento ella en su uniforme- Oye, realmente te echaré de menos , sin ir más lejos, en las clases de esgrima.

Charlotte suspiro mientras se acercaba más a mí si es que eso era posible...

-Nos la pasábamos bien verdad?

-Sí, pero ¡piensa en las posibilidades que se te abren partir de ahora Charlotte! ¡Te envidio por eso! ¡Ahora eres libre y puedes hacer lo que quieras!

-Nunca he querida nada aparte de esto!

-Sí, porque no tenías opción, pero ahora el mundo entero se abre ante ti mientras yo no puedo mantenerme alejado más de un dia de este conde...cronógrafo y me paso las noches en el año 1953, tu podrías estudiar en el extranjero y hacer largos viajes. ¡Créeme, me encantaría cambiarme por ti!

De pronto una voz conocida me desconcertó, era la voz dramática de la madre de Charlotte.

-Ya verás cómo al final se arrepentirán-. Dijo furiosa saliendo de la sala del dragón.

-Glenda, Por favor! somos una familia- trataba de calmarla la voz recta de Lady Arista.- Tenemos que mantenernos unidos.

-Diselo a Grace!- su tono de voz era fuerte- ha sido a ella la que nos ha colocado a todos en esta situación imposible. Protegerla! Ja! Nadie en su sano juicio creería ni una palabra lo que ella dice! No después de todo lo que paso, pero ese ya no es nuestro problema, Vámonos Charlotte.

-Las acompaño al coche- dije tratando de sonar tranquilo aunque los gritos de Mister Glenda me habían alterado más de lo normal.

-Adiós Charlotte- dije mientras ella se montaba al auto y su madre no dejaba de hablar.- cuídate.